Carrasco tenía 51 años de edad. Fue autor de tres novelas históricas --"INRI", "El último iman de Ishbilya" y "El hombre que esculpió a Dios" --. Esta última se estrenó recientemente como obra de teatro, exactamente el pasado 27 de febrero, con gran éxito y agotando todas las localidades.
Fernando Carrasco realizó una importante carrera profesional en el diario ABC de nuestra ciudad. Además de llevar a cabo crónicas e informaciones taurinas, cubrió asimismo temas relacionados con la vida e historia de nuestras hermandades y cofradías.
Casado y padre de dos hijos, Fernando Carrasco se licenció en Periodismo tras pasar por las aulas del Fernando de Herrera. Era hermano de la Cofradía San Bernardo, cuya corporación estuvo siempre muy vinculada al mundo de los toros.
Desde este periódico digital mostramos nuestras condolencias por el inesperado fallecimiento de un buen amigo y de un buen profesional en el mundo del Periodismo sevillano.
Este sábado, día 5 de marzo, a las 10:00 de la mañana, tendrá lugar el funeral en la Parroquia de San Bernardo.
DESCANSE EN PAZ EL BUEN PROFESIONAL Y EL GRAN COMPAÑERO
Conocí a Fernando Carrasco en ambientes cofradieros y taurinos. Recuerdo cuando comenzó a realizar sus primeros trabajos periodísticos en la Plaza de Toros de la Real Maestranza. Fue siempre un gran profesional, con enorme responsabilidad para realizar las tareas en el diario ABC de Sevilla. Yo he llegado a conocer a grandes críticos y cronistas taurinos que ejercieron sus tareas informativas en este periódico sevillano. Desde Antonio y Manuel Olmedo --Don Fabricio I y II--, al poeta, macareno y pregonero de la Semana Santa Joaquín Caro Romero. Hasta Rafael Moreno llegó a escribir de toros en aquella redacción de ABC de la que formé parte realizando información municipal, cofradiera y las crónicas de los partidos que jugaban en campo ajeno el Sevilla FC. y el Real Betis Balompié.
Carrasco llegó con buen pie al ABC de Sevilla. Gran aficionado porque su padre fue personaje destacado en el mundo de los toros de nuestra ciudad, escribió de la Fiesta Nacional con una gran objetividad. Ya en los últimos años y como las ciencias adelantan que es una barbaridad, se le podía ver en la grada alta del tendido 4 del Coso del Arenal con un ordenador portátil para ir enviando por internet a todo el mundo el desarrollo de los festejos abrileños en la Plaza de Toros de la Real Maestranza sevillana, minuto a minuto, toro a toro, faena a faena y torero a torero.
También escribió ampliamente de las cofradías en el periódico y brujuleó en la historia de nuestras hermandades y cofradías. Y sus libros están ahí también, porque quiso dejar constancia de todas sus ideas y sus sueños literarios e informativos.
Coincidí con Fernando Carrasco hace pocas fechas en el tradicional acto de la presentación del abono de la temporada taurina en el salón de carteles de la Plaza de Toros de Sevilla. Igual que yo, Carrasco fue testigo de la intervención de Rafael Valencia, ya como único representante de la Empresa Pagés, pero siempre con el recuerdo del histórico de Diodoro Canorea, en ese acto protocolario en el que se informa sobre el abono de los festejos de la temporada taurina 2016. Brindamos allí por esta profesión que sentimos de forma profunda.
Carrasco fue siempre amable, cordial y un gran compañero y amigo de todos cuanto sentimos y vivimos a fondo esta profesión periodística. Me parece increíble que se nos haya ido con ese medio siglo de vida en el cuerpo. Y entra como un duro pellizco en el corazón cuando un amigo se va de forma tan inesperada y repentina y en plena Cuaresma. Recodaremos siempre a Fernando Carrasco, el hombre que esculpió a Dios.
FERNANDO GELÁN
Este sábado, día 5 de marzo, a las 10:00 de la mañana, tendrá lugar el funeral en la Parroquia de San Bernardo.
DESCANSE EN PAZ EL BUEN PROFESIONAL Y EL GRAN COMPAÑERO
Conocí a Fernando Carrasco en ambientes cofradieros y taurinos. Recuerdo cuando comenzó a realizar sus primeros trabajos periodísticos en la Plaza de Toros de la Real Maestranza. Fue siempre un gran profesional, con enorme responsabilidad para realizar las tareas en el diario ABC de Sevilla. Yo he llegado a conocer a grandes críticos y cronistas taurinos que ejercieron sus tareas informativas en este periódico sevillano. Desde Antonio y Manuel Olmedo --Don Fabricio I y II--, al poeta, macareno y pregonero de la Semana Santa Joaquín Caro Romero. Hasta Rafael Moreno llegó a escribir de toros en aquella redacción de ABC de la que formé parte realizando información municipal, cofradiera y las crónicas de los partidos que jugaban en campo ajeno el Sevilla FC. y el Real Betis Balompié.
Carrasco llegó con buen pie al ABC de Sevilla. Gran aficionado porque su padre fue personaje destacado en el mundo de los toros de nuestra ciudad, escribió de la Fiesta Nacional con una gran objetividad. Ya en los últimos años y como las ciencias adelantan que es una barbaridad, se le podía ver en la grada alta del tendido 4 del Coso del Arenal con un ordenador portátil para ir enviando por internet a todo el mundo el desarrollo de los festejos abrileños en la Plaza de Toros de la Real Maestranza sevillana, minuto a minuto, toro a toro, faena a faena y torero a torero.
También escribió ampliamente de las cofradías en el periódico y brujuleó en la historia de nuestras hermandades y cofradías. Y sus libros están ahí también, porque quiso dejar constancia de todas sus ideas y sus sueños literarios e informativos.
Coincidí con Fernando Carrasco hace pocas fechas en el tradicional acto de la presentación del abono de la temporada taurina en el salón de carteles de la Plaza de Toros de Sevilla. Igual que yo, Carrasco fue testigo de la intervención de Rafael Valencia, ya como único representante de la Empresa Pagés, pero siempre con el recuerdo del histórico de Diodoro Canorea, en ese acto protocolario en el que se informa sobre el abono de los festejos de la temporada taurina 2016. Brindamos allí por esta profesión que sentimos de forma profunda.
Carrasco fue siempre amable, cordial y un gran compañero y amigo de todos cuanto sentimos y vivimos a fondo esta profesión periodística. Me parece increíble que se nos haya ido con ese medio siglo de vida en el cuerpo. Y entra como un duro pellizco en el corazón cuando un amigo se va de forma tan inesperada y repentina y en plena Cuaresma. Recodaremos siempre a Fernando Carrasco, el hombre que esculpió a Dios.
FERNANDO GELÁN
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