viernes, 27 de noviembre de 2015

EL PENALTI DE GELÁN.- Con otro gol de oro de Rubén Castro, el Real Betis venció al Levante en el Ciudad de Valencia para seguir con su buena racha de triunfos en campo ajeno (0-1)

Llegó un partido para que el Betis, al menos, lograra fuera de casa lo que no puede alcanzar en el Benito Villamarín. En partido correspondiente a la 13ª jornada de la Liga BBV jugaron en el Ciudad de Valencia el Levante y el Real Betis Balompié. El choque finalizó con el resultado de cero a uno (0-1) a favor del equipo de Pepe Mel. El gol de los verdiblancos llegó a los cuatro minutos de juego. Sacó un córner Joaquín y en acción ensayada hubo un tuya y mía entre el portuense y Rubén Castro. El canario se internó en el área para mandar el balón fuera del alcance de Rubén, el portero del Levante. !Toma tocayo! Desde este 0-1 para los béticos, los dos equipos lucharon de forma intensa. El Betis,  para aumentar su ventaja, y el equipo valenciano, con el fin de poder superar el tanto marcado por el delantero canario. El Levante, en el primer tiempo, gozó de una ocasión de gol --a los ocho minutos--, pero el balón, rematado primero por Verza y luego por Deyverson, que cogió el rechace, pegó primero en el poste y luego en el larguero.
En la segunda parte, el juego se desarrolló con muchas alternativas y, además, hubo fuertes fricciones entre los jugadores. También tuvo el Levante una clara ocasión, en el minuto 54 de partido, pero de nuevo Deyverson mandó el balón al larguero. A la contra, el Betis, que sufrió algo más en la segunda parte, pudo batir nuevamente a Rubén, pero no hubo fortuna en los remates. El Betis, por doble amarilla a Westermann, se quedó con diez jugadores en el minuto 78. Pero el equipo de Heliópolis, con un hombre menos, aguantó con mucha firmeza y entrega todos la furia local para batir a Adán. El Betis se defendió con mucha astucia y hasta en algunas contras encontró tres ocasiones para el gol, pero Rubén Castro y Van de Vaart, que salió en la segunda parte, no estuvieron finos a la hora de dirigir el cuero al fondo de las redes locales. 
Al final: 0-1 para el Betis. Sigue la buena racha en campo ajeno. Son tres puntos de oro para consolidar posiciones.

TÍTULO Y JUGADORES PARA LA HISTORIA BÉTICA
Urquiaga, Areso, Aedo, Peral, Gómez, Larrinoa, Adolfo, Lecue, Unamuno, Tiimimi, Saro, Caballero, Rancel, Varela, Espinosa… Hombres fuertes y valerosos que formaron parte de aquel Betis que en 1935, hace ahora ochenta años, lograron ganar la Liga. Jugaba este torneo solo doce equipos. Los verdiblancos, entrenados por Patricio O´Connell, ganó en aquella temporada 15 partidos, empató cuatro y solo perdió tres. Logró 34 puntos –uno más que el Real Madrid, que quedó segundo en la tabla--, y a diez puntos de su eterno rival, el Sevilla FC, que se clasificó en quinto lugar. En este campeonato de Liga, los encuentros entre los eternos rivales tuvieron siempre más color verdiblanco. El Betis ganó a los de Nervión por 0-3, pero en Heliópolis, el clásico local terminó con empate a dos. El equipo de Heliópolis jugó el último partido de esta Liga en Santander. Allí logró un contundente 0-5. El Betis, a su llegada a Sevilla, fue recibido jubilosamente y hubo fiesta grande, con recepción en el Ayuntamiento, para festejar el título ganado hasta ahora por los verdiblancos.

GOL DE RUBÉN CASTRO A LOS CUATRO MINUTOS
A los cuatro minutos ya tenía el Betis marcado el gol de la noche. Joaquín, en acción ensayada, sacó en corto un córner, y gambeteó con el balón con Rubén Castro para iniciar el asalto al poder. El portuense le dio un balón de oro al delantero canario, que con habilidad mandó el cuero al fondo de la portería de Rubén Martínez en un habilidoso y preciso remate. 0-1 para los de Pepe Mel, que abrieron bien los ojos para saborear el rico pastel que tenían por delante. Es cierto que el Levante, ante el sorprendente gol de Castro, buscó con urgencia una respuesta y se puso a trabajar duro para poder responder con eficacia el golpe recibido. A los 8 minutos, en un fallo defensivo de la defensa bética, Verza aprovechó el regalo para irse hacia el portal donde estaba Adán, bastante adelantado de su marco. Pero el balón disparado por el jugador levantino dio en el poste. Cogió el rechace Deyverson, pero también mandó el balón a la madera. El Betis, de momento, salvó los muebles.
Hasta el final de este primer periodo, el Levante de Rubí intentó superar la presión y el dominio de los verdiblancos en el centro del campo. Hubo un ritmo trepidante en el partido. Los dos equipos pusieron toda la carne en el asador. Si en el minuto 15 fue Camarasa quien pudo batir a Adán; en el 17 le tocó a Rubén Castro ensayar el tiro en una contra muy peligrosa. También Joaquín, multiplicador en toda su labor, estuvo a punto de aumentar la ventaja bética en el marcador en el minuto 33. Pero el balón, rematado con picardía por el delantero verdiblanco, fue desviado a córner por el guardameta local. El Betis, con el trabajo de Ceballos, Cejudo, Joaquín, Petros y NDiaye, controlaron en todo momento todos los deseos del Levante para sorprender a la defensa bética.

AGUANTÓ HASTA CON DIEZ EL BETIS ANTE EL LEVANTE
Salió a la desesperada total el cuadro levantino en la segunda parte para poder aguarle la fiesta a los verdiblancos. Aunque el cuadro bético quiso controlar el balón, el once que prepara ahora Rubí se volcó en el área sevillana para culminar de forma positiva sus ataques. A los 9 minutos de este segundo periodo --54 de partido--, Deyverson mandó otra vez el balón al larguero, cuando se encontraba en óptima situación para sorprender a Adán. Pero a la contra, cuando el Betis cogía su ritmo y el control, el once verdiblanco también provocó sus sustos en el área levantina. Rubén Castro, a los 57 minutos, remató un buen balón que a punto estuvo de meterlo en la portería local. En este periodo, con el desgaste físico por la entrega y el esfuerzo de los jugadores de ambos equipos, hubo muchas fricciones. El colegiado de turno, el murciano Sánchez Martínez, tuvo que mostrar mucha tarjetas y terminó ensañando la roja al defensa bético Westermann, que a los 78 minutos --por doble amonestación (47-78)--, tuvo que abandonar el terreno de juego.
El Betis se quedó con diez hombres. Mel hizo en este periodo varios cambios para mantener el ritmo hasta la pitada final. Pepe Mel agotó los cambios en esta recta final del partido. Van de Vaart --que tuvo ocasiones de gol, pero sin justo remate--, salió al campo por Cejudo; Ceballos por Figueras, y finalmente y en la prórroga, Joaquín por Molinero. Pero el Betis, en inferioridad numérica, supo aguantar con mucha casta el tirón y, además, mantener ese solitario gol del canario Rubén Castro para lograr tres puntos que valen muchos quilates. (Foto: LBBVA).

FERNANDO GELÁN

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