LIGA BBVA.-
En el Estadio Benito Villamarín se jugó el partido correspondiente a la 19ª jornada de la Liga BBVA entre el Real Betis Balompié y el Club Atlético Osasuna. El encuentro finalizó con el resultado de 1-2 a favor de los navarros. Jornada muy aciaga para el cuadro verdiblanco, que al minuto de comenzar el partido ya estaba perdiendo por 0-1, con gol de Torres. Todo le salió al Betis mal en este importante encuentro de Liga. En la primera parte, además de encajar ese gol tempranero, en el minuto 37 se quedó con diez jugadores en el campo por la doble amarilla que el árbitro mostró a Nono. Como las desgracias no vienen solas, en la segunda parte, Jordi Figueras –minuto 57--, marcó en propia puerta para poner un 0-2 a favor de Osasuna. Además, Rubén Castro falló el lanzamiento de un penalti que provocó el jugador bético ante la desesperada salida de Andrés Fernández, que fue expulsado por derribar al delantero canario. Con diez jugadores por bando en cada equipo, el Betis lo intentó a la desesperada y encontró el premio con el gol de Molina. Pero ahí se acabó la pólvora verdiblanca. La derrota frente a Osasuna ha sido demasiado dolorosa. Un auténtico descalabro. Debutó Leo Baptistao en el once verdiblanco. La nueva incorporación fue el mejor delantero bético en el primer tiempo, pero en la segunda parte acusó su tremendo desgaste físico.
Betis-Osasuna. Era como una final. De las muchas finales que tendrá que jugar el equipo del Villamarín para poder salir del pozo y dejar el farolillo rojo, aunque la victoria del Rayo ante el Getafe en la matinal de este domingo haga mucho más complicada la gran proeza que ha de realizar el Betis contra vientos y mareas. Los hombres de Garrido, tras la derrota ante Osasuna en el Villamarín, continúan en una complicada situación en el torneo de la regularidad. Sorprendentemente sigue en Europa y en la Copa del Rey, La victoria verdiblanca en la ida en los octavos de final, frente a los leones de San Mamés, había levantado la moral de un equipo que está en la UCI. Y la meta bética ante los navarros era clara: Amarrar los tres puntos. Unos puntos de oro. Pero todo se torció en una tarde dramática, caótica y desesperante.
Osasuna es un equipo siempre incómodo y complicado. Batallador e infatigable. Es como una mosca cojonera. El Betis, frente a los navarros, tenía que armar la revolución. Ir a por todas con agresividad, talante, intensidad y goles. Los precisos, pero goles puntuales y necesarios para la victoria. El equipo de La Palmera se ha reforzado con nuevos hombres y hasta Leo Baptistao, cedido por el Atlético de Simeone, fue incluido en la lista de los convocados. Se necesitaba un revulsivo y Garrido apostó por este nuevo refuerzo y formó parte del once inicial frente a Osasuna.
Y todo ello porque era urgente y necesario para el Betis ganar este partido ante el cuadro de Pamplona. En esta Liga de nuestros amores, el club verdiblanco llevaba once partidos sin ganar –ahora doce--, y la presión ante este choque frente a Osasuna era total. Pero había que agarrarse a un clavo ardiendo. El equipo bético afrontó la responsabilidad con esa fe que mueve montañas. En esta jornada aciaga del Betis, en esta final de la primera vuelta, era el Osasuna el rival de turno que salió favorecido por las desgracias de los verdiblancos. Pero en la próxima jornada, nuevamente en el Villamarín, el enemigo será nada menos que el Real Madrid. Hay que suponer que alguna vez habrá luz al final del túnel…
REAL BETIS BALOMPIÉ, 1; CLUB ATLÉTICO OSASUNA, 2.-
Mal comenzó el partido para el Betis. En el primer minuto de juego marcó el Osasuna para poner el drama en el Villamarín. Marcó Torres a centro de Marc Bertrán, en fallo defensivo de los verdiblancos. 0-1 para los navarros en el minuto 1. Fue un tremendo mazazo para el equipo verdiblanco y para la grada. Además, en este primer periodo, el Betis se quedó con diez jugadores. Nono, que había visto una tarjeta amarilla en el minuto 22, volvió a ver la cartulina en el minuto 37. Fue excesivamente riguroso el colegiado Texeira Vitienes, pero el futbolista verdiblanco tuvo que coger el camino de los vestuarios.
Aunque el Betis acusó el inesperado gol de Osasuna, con todas sus dudas, intentó superar todos los males e inconvenientes que tiene recibir un gol nada más comenzar el partido. Sobre todo, cuando el equipo de Juan Carlos Garrido se está jugando tanto en este torneo de la Liga BBVA. El preparador de los jugadores del Villamarín hizo debutar a Leo Baptistao en la línea del ataque bético junto a Rubén Castro y Vadillo. Sin duda alguna, el recién llegado fue el futbolista que más peligro creó durante estos primeros cuarenta y cinco minutos en el área de los visitantes. Baptistao fue el hombre que más remató al marco defendido por Andrés Fernández, pero sin la puntería precisa para sorprender al meta osasunista.
Mientras el Betis, con la multiplicación de Juanfran, Salva Sevilla, Lolo Reyes y Nono hasta su expulsión, buscó con más corazón que cabeza acortar el marcador, el cuadro navarro se movió con más serenidad y soltura, creando contragolpes peligrosos que, afortunadamente para el Betis, atajaron y despejaron el danés Andersen y la defensa. Pese al 0-1 y ha quedarse el equipo bético con inferioridad numérica, la grada alentó con fuerza al equipo. Pero todo olía a chamusquina.
En la segunda parte, el Betis volvió a sufrir. A los 12 minutos de esta periodo –57 de partido--, Jordi Figueras, que había salido por Juanfran, introdujo el balón en su propia portería al querer despejar un centro de Torres sobre la meta de Andersen. La suerte estuvo para quien la encontró, que era el Osasuna, y la desgracia y el infortunio era para un Betis que encajaba en este segunda parte otro gol para poner en el marcador un dramático 0-2 a favor del cuadro de Pamplona.
Los hombres de Garrido intentaron salir del enorme atolladero. El preparador había colocado en la delantera a hombres que suelen ser resolutivos a la hora de la pegada. Vadillo, Molina, Leo Baptistao y Rubén Castro a la carga de la brigada ligera. Y hubo un primer premio para el delantero canario, que supo sacarle un penalti al portero navarro cuando se dirigía con el balón hacia el marco osasunista. Penalti a favor del Betis y expulsión para Fernández, por derribar a Rubén Castro dentro del área. Era el minuto 60 de partido y el Betis podía enmendar la plana. Pero el delantero bético mandó el balón al larguero.
Y otra vez a empezar para superar el drama, el sufrimiento, las desgracias y los infortunios. Garrido tuvo que sustituir a Leo por Chuli, porque el nuevo fichaje, tras su gran primer tiempo, estaba ya con bastantes males físicos por el enorme esfuerzo que había realizado. No perdió nunca la fe el Betis. Siguió luchando y batallando dentro de un orden. Chuli, en el 77, pudo marcar en una jugada en la que intervinieron Castro y Molina. Ya, en el minuto 80 de partido, el Betis encontró el gol que buscaba para romper los maleficios. Molina, a pase de Chuli, marcó un gol que hizo vibrar al personal del graderío. Era algo así como el gol de la esperanza que nunca se pierde.
Pero no hubo más cera que la que ya había ardido. Osasuna, aprovechando la intensidad ofensiva del Betis, organizó peligrosos contragolpes y, además, se dedicó a dormir el balón y perder los minutos en juego de la recta final. Los hombres de Garrido pisaron el acelerador a tope, pero ya era muy difícil para el Betis superar una jornada tan aciaga. El barco no está hundido del todo porque queda aún media Liga para resolver todos los entuertos. Pero el susto ya está muy metido en el cuerpo porque esta derrota es un paso en falso en el torneo de la regularidad. El Betis está al borde del abismo. Tras los despropósitos ante Osasuna en el Villamarín se ha quedado a siete puntos de la permanencia.
FICHA TÉCNICA:
Alineaciones:
Real Betis Balompié: Andersen; Juanfran (Jordi Figueras, minuto 46) Paulao, Amaya, Nacho; Nono, Lolo Reyes; Baptistao (Chuli, minuto 75), Salva Sevilla (Molina, minuto 46) Vadillo; y Rubén Castro.
C.A.Osasuna: Andrés; Marc Bertrán, Arribas, Loties, Damiá; Lolo, Silva; Cejudo (Oier, minuto 75) Torres, De las Cuevas (Acuña, minuto 58); y Oriol Riera (Riesgo, minuto 60).
Goles:
1-0, minuto, 1, Torres; 0-2, minuto 57, Jordi Figueras en propia puerta; y 1-2, minuto 80 Jorge Molina.
Árbitro:
Fernando Teixeira Vitienes (Colegio Cántabro). Expulsó a Nono por doble amarilla (minutos.22 y 37), y a Andres Fernandez (minuto 60) por derribo a Rubén Castro. También mostró tarjeta amarilla a De las Cuevas (minuto 29), Lolo Reyes (minuto 34), Jordi (minuto 47), Amaya (minuto 71), Acuña (minuto 86), Nacho (minuto 87)
Incidencias:
Partido de la 19ª jornada de la Liga BBVA jugado en el Benito Villmarín. Asistieron más de 33.000 espectadores. Hubo protestas dirigidas al palco presidencial al final del partido. El Betis, como ocurrió en la jornada en la que perdió en el Villamarín frente el Almería por 0-1, volvió a concentrarse en el centro del campo para escuchar las protestas de los aficionados tras la derrota ante Osasuna. Junto a los jugadores también formó Juan Carlos Garrido. (Foto: Liga BBVA).-
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