El encuentro finalizó con el resultado de dos a dos (2-2). Increíble, pero cierto. El Sevilla llegó a tener un 0-2 a su favor, pero el Rayo logró empatar en este trepidante choque futbolístico. En el primer tiempo, en los minutos 10 y 20, marcaron por el cuadro de Nervión NZonzi e Iborra.
Además, en este primer tiempo y también en la continuación, el once de Emery tuvo claras ocasiones para aumentar el marcador y alcanzar la goleada. Hasta pudo lograr un tercer tanto si el árbitro, Estrada Fernández, sanciona con penalti un derribo de Diego Llorente a Gameiro dentro del área. También Krokn-Dehli, en la segunda parte, y antes de que el Rayo empatara a dos, perdonó ante el portal rayista una jugada clara de gol. Al final todo quedó en ese reparto de puntos. El Rayo igualó el marcador con los tantos marcados por Manucho (minuto 43) y de Miku (minuto 62). El Sevilla no sabe ganar a domicilio. Un punto siempre es bueno, pero no se puede desaprovechar tan buena ventaja y tantísimas ocasiones para amarrar la victoria. El Sevilla le regaló el empate a los vallecanos.
LA DIFÍCIL MISIÓN DE GANAR FUERA
El Sevilla de Emery, que está en zona europea en la liga española y que tiene aspiraciones a jugar la Liga de Campeones, llegó al estadio vallecano a romper esa mala racha de victorias en campo ajeno. En esta campaña solo ha podido lograr siete empates fuera del Sánchez Pizjuán (este es el octavo). El equipo de Nervión no ha ganado ningún partido a domicilio. Era y es una cuenta pendiente. El Sevilla llegó al estadio del barrio madrileño de Vallecas con todas las ganas del mundo de superar al Rayo de Paco Jémez y amarrar tres puntos de oro para poder alcanzar todos los grandes objetivos deportivos que ha marcado en esta temporada.
Aunque Rayo y Sevilla están metidos en metas muy diferentes --los de Jemez para poder salvar el pellejo y no descender y los de Emery para pisar muy fuerte el acelerador y meterse de lleno en clasificación Champions--, en estas últimas jornadas ambos equipos habían llevado a cabo un trabajo importante ante sus respectivos rivales. El cuadro de Vallecas llevaba cinco partidos consecutivos sin conocer la derrota y el equipo de Nervión un total de seis partidos sin perder.
DOS GOLES DEL SEVILLA EN EL PRIMER TIEMPO
El equipo de Emery fue a ganar a Vallecas. A superar en todos los terrenos al equipo de Jemez. Y fueron los sevillistas los que con urgencia y rapidez quisieron resolver esa cuenta pendiente que tiene el equipo en campo ajeno. A los diez minutos de juego llegó el 0-1 para el Sevilla. Krohn-Dehli botó un saque de esquina y el balón fue cabeceado con fuerza con Gameiro, respondiendo el portero rayista, que rechazó el cuero. Pero allí estaban Coke y NZonzi para el remate. Fue el centrocampista quien resolvió con eficacia y marcó el primer tanto sevillista.
Este gol le dio alas al Sevilla que quiso amarrar el resultado a favor. A los 20 minutos de juego llegó el 0-2. Iborra fue el autor del tanto en jugada que inició Vitolo con pase a Gameiro. Otro centrocampista del cuadro de Nervión elevaba la cuenta para el Sevilla en este choque ligero frente al Rayo de Paco Jémez.
Pudo aumentar el marcador el equipo de Emery en el minuto 24. Iborra, en situación privilegiada, remató al portal de Juan Carlos, pero quiso apuntar tan fino que mandó el balón al poste. También le pasó lo mismo a Gameiro, en el minuto 26, cuando envió otro balón a la madera, aunque esta acción fue invalidada por el colegiado Estrada Fernández, por fuera de juego del delantero francés.
En la recta final de este primer periodo, el Sevilla contó con otra ocasión de gol en el minuto 38. Pero Gameiro no atinó a meter el cuero en el fondo de la portería rayista. Sin embargo, el equipo de Vallecas, que nunca se dio por vencido, buscó con enorme afán acortar distancias en el marcador. Y encontró petróleo en el minuto 43, cuando Monucho batió a Sergio Rico para lograr el 1-2.
Hubo en este periodo final ciertas dudas en el Sevilla y algún que otro desconcierto porque el Rayo no dio nunca un balón por perdido. Jemez mandó a sus hombres a morir con las botas puestas. Sin embargo, el once de Emery se relajó algo con tanta ventaja a su favor.
SIN FORTUNA PARA GANAR A DOMICILIO
Tuvo el Sevilla en el segundo periodo del partido una clara ocasión de marcar para lograr el 1-3. Pero Gameiro, en una contra, no tuvo fortuna en el remate final. En esta segunda parte el Rayo de Jémez peleó con más intensidad para poder controlar a los sevillistas y buscar el empate. Sin embargo, el once sevillista sevillista mantuvo sus esperanzas de amarrar la victoria. Krohn-Dehli, en el minuto 49, tuvo una ocasión de oro para batir de nuevo a Juan Carlos, pero perdonó ante el portero rayista con todo a favor. El Rayo fue creciendo en su juego y desarrolló en este tiempo un fútbol muy agresivo. Pese a la transformación del once local, el equipo de Emery continuó creando ocasiones para aumentar el resultado que tenía a su favor. Pero el equipo de Jemez fue quien más sustos provocaba en el área sevillista. Miku, a los 56 minutos, pudo marcar el segundo gol rayista, pero salvó Fazio en un espectacular despeje. Pocos minutos después, aún con 1-2 favorable al Sevilla, Gameiro, al intentar un remate a puerta, fue derribado por Diego Llorente dentro del área. Pero el árbitro no sancionó la ilegalidad de la acción del defensa del equipo de Vallecas.
En este periodo, el Rayo hizo sufrir un poco a los sevillistas, que acusaron la mala fortuna a la hora rematar las acciones ofensivas que desarrollaron para amarrar los tres puntos. Y la escuadra de Jémez aprovechó las dudas visitantes para lograr el empate a dos. En el minuto 62, Bebé centro un balón al área del Sevilla que fue rematado por Miku, para alcanzar el empate. Emery, en la recta final del partido --minuto 66--, hizo dos primeros cambios --Cristóforo por Carriço, e Iborra por Banega--. Pero en realidad apenas se notó la presencia en el campo de estos jugadores para poder buscar la victoria que había estado tan cerca en este encuentro frente al Rayo en Vallecas.
PERDER UN GRAN BOTÍN
El Sevilla perdió el gran botín que había logrado con el 0-2 del primer tiempo y todas las ocasiones para alcanzar su primer a victoria a domicilio. El técnico del cuadro de Nervión hizo un tercer cambio en el minuto 80, metiendo a Konoplyanka por Vitolo en busca de una mayor acción ofensiva para crear ocasiones de gol. Hasta 16 saques de esquina botó el Sevilla sobre el portal de Juan Carlos. Esto daba clara idea del dominio y las intenciones del equipo de Emery y las veces que se plantó en el área local. A los 87 minutos, Gameiro tuvo una última ocasión para ese esperado gol de la victoria. Pero el Rayo supo dormir bien el partido para que al final todo quedara con ese empate a dos.
El Sevilla mereció y luchó por la victoria. Además de ponerse por delante con un claro y contundente 0-2 con los goles de NZonzi e Iborra, Gameiro, Krohn-Dehli y Vitolo tuvieron clarísimas ocasiones de marcar para golear con claridad a los rayistas. Sabe a poco ese puntito que solo sirve, al menos, para consolidar la quinta plaza en la clasificación de a Liga BBVA. (Foto: SFC).
FERNANDO GELÁN
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