* La edil sevillana embarca mañana en La Rochelle (Francia)
La portavoz adjunta de Participa en el Ayuntamiento de Sevilla, Cristina Honorato, embarcará mañana en el buque Al Awda (El Retorno), incorporándose a la Flotilla de la Libertad que está recorriendo todas las costas europeas en su camino hacia Gaza, ha informado esta formación política en el Consistorio sevillano.
Participa indica que Honorato embarcará en el buque Al Awda (El Retorno) que conjuntamente con el barco Freedom (Libertad) saldrán mañana del puerto francés la Rochelle (Francia) y llegarán el lunes al puerto de Gijón.
El objetivo de la Flotilla de la Libertad es denunciar el ilegal bloqueo israelí a la franja de Gaza y exigir el cumplimiento de las resoluciones de la ONU, así como el fin de la colonización que se está realizando en Palestina.
Rumbo a Gaza surgió en 2009 como iniciativa de movimientos sociales europeos que pretendían romper el bloqueo isarelí a Gaza, una de las zonas con mayor densidad de población del mundo y donde dos millones de palestinos no pueden salir, en una especie de cárcel a cielo abierto. De ahí el nombre de Flotilla de la Libertad. El bloqueo a Gaza está declarado ilegal por la ONU sin que se haya obligado a Israel ha retirarlo.
La primera flotilla de la libertad fue enviada en 2010 y contaba con ocho barcos, de los cuales solo el Mavi Marmara llevaba 581 pasajeros a bordo, entre ellos varios parlamentarios europeos. Precisamente este gran barco fue asaltado por comandos israelíes en aguas internacionales (lo que equivale a una acción de piratería) asesinando a diez pasajeros e hiriendo a decenas. De ese asalto y la posterior detención de los activistas, entre ellos dos españoles, no se conoce el paradero de seis personas que fueron detenidas por las tropas y que aún no han aparecido.
A pesar de que Israel pensaba que con esa acción armada iba a disaudir de realizar nuevas ediciones de la flotilla, lo cierto es que todos los años se han vuelto a repetir las expediciones.
La situación en Gaza
El 70 por ciento de los habitantes de Gaza son personas refugiadas expulsadas por la agresión israelí de 1948, donde 400 ciudades y pueblos palestinos fueron atacados y su población expulsada, en lo que se conoce como la Nakba (el desastre), indica Participa.
La resolución 194 de la ONU reconoce el derecho a regresar a sus hogares de la población palestina expulsada, algo que impide Israel, por las armas. De hecho, entre el 30 de marzo y el 15 de mayo Israel ha asesinado al menos a 116 palestinos y herido a más de 10.000, durante las jornadas de “la gran marcha del retorno”. Los soldados israelíes dispararon munición real contra población civil desarmada que se manifestaba pacíficamente en Gaza.
El desempleo en Gaza tiene una de la tasas más elevadas del mundo, estimado en alrededor de un 44%. El 80% de los habitantes de la Franja dependen de la ayuda humanitaria para sobrevivir.
Tras una década de bloqueo, la falta de combustible y la destrucción durante los bombardeos del 2014 de la única central eléctrica de Gaza, han provocado una grave crisis energética que, entre otras cosas, impide el tratamiento de las aguas residuales contaminando de esta forma el mar en Gaza y suponiendo un grave riesgo sanitario para la población. A su vez la falta de combustible ha derivado en una crisis sanitaria. A la falta de medicamentos y equipamiento se suma la decisión de Israel de no conceder más permisos de salida a los pacientes terminales de Gaza para recibir tratamiento.
“La Flotilla defiende el derecho internacional, protesta por los crímenes contra la humanidad cometidos por Israel --finaliza la información Participa Sevilla--, y se solidariza con una población con la que se está cometiendo un verdadero genocidio. Exigimos que se acabe el bloqueo ilegal, que toda la población palestina de Gaza tenga libertad de movimiento y derecho a un futuro digno en su tierra” ha declarado Honorato. (Foto: PS).
El objetivo de la Flotilla de la Libertad es denunciar el ilegal bloqueo israelí a la franja de Gaza y exigir el cumplimiento de las resoluciones de la ONU, así como el fin de la colonización que se está realizando en Palestina.
Rumbo a Gaza surgió en 2009 como iniciativa de movimientos sociales europeos que pretendían romper el bloqueo isarelí a Gaza, una de las zonas con mayor densidad de población del mundo y donde dos millones de palestinos no pueden salir, en una especie de cárcel a cielo abierto. De ahí el nombre de Flotilla de la Libertad. El bloqueo a Gaza está declarado ilegal por la ONU sin que se haya obligado a Israel ha retirarlo.
La primera flotilla de la libertad fue enviada en 2010 y contaba con ocho barcos, de los cuales solo el Mavi Marmara llevaba 581 pasajeros a bordo, entre ellos varios parlamentarios europeos. Precisamente este gran barco fue asaltado por comandos israelíes en aguas internacionales (lo que equivale a una acción de piratería) asesinando a diez pasajeros e hiriendo a decenas. De ese asalto y la posterior detención de los activistas, entre ellos dos españoles, no se conoce el paradero de seis personas que fueron detenidas por las tropas y que aún no han aparecido.
A pesar de que Israel pensaba que con esa acción armada iba a disaudir de realizar nuevas ediciones de la flotilla, lo cierto es que todos los años se han vuelto a repetir las expediciones.
La situación en Gaza
El 70 por ciento de los habitantes de Gaza son personas refugiadas expulsadas por la agresión israelí de 1948, donde 400 ciudades y pueblos palestinos fueron atacados y su población expulsada, en lo que se conoce como la Nakba (el desastre), indica Participa.
La resolución 194 de la ONU reconoce el derecho a regresar a sus hogares de la población palestina expulsada, algo que impide Israel, por las armas. De hecho, entre el 30 de marzo y el 15 de mayo Israel ha asesinado al menos a 116 palestinos y herido a más de 10.000, durante las jornadas de “la gran marcha del retorno”. Los soldados israelíes dispararon munición real contra población civil desarmada que se manifestaba pacíficamente en Gaza.
El desempleo en Gaza tiene una de la tasas más elevadas del mundo, estimado en alrededor de un 44%. El 80% de los habitantes de la Franja dependen de la ayuda humanitaria para sobrevivir.
Tras una década de bloqueo, la falta de combustible y la destrucción durante los bombardeos del 2014 de la única central eléctrica de Gaza, han provocado una grave crisis energética que, entre otras cosas, impide el tratamiento de las aguas residuales contaminando de esta forma el mar en Gaza y suponiendo un grave riesgo sanitario para la población. A su vez la falta de combustible ha derivado en una crisis sanitaria. A la falta de medicamentos y equipamiento se suma la decisión de Israel de no conceder más permisos de salida a los pacientes terminales de Gaza para recibir tratamiento.
“La Flotilla defiende el derecho internacional, protesta por los crímenes contra la humanidad cometidos por Israel --finaliza la información Participa Sevilla--, y se solidariza con una población con la que se está cometiendo un verdadero genocidio. Exigimos que se acabe el bloqueo ilegal, que toda la población palestina de Gaza tenga libertad de movimiento y derecho a un futuro digno en su tierra” ha declarado Honorato. (Foto: PS).
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