El servicio de Puntos Limpios de la empresa municipal de limpieza, Lipasam, ha recibido el premio ‘RAEEimplícate’ por su contribución a la mejora del medio ambiente y a la economía circular. Este galardón, entregado por la Federación Andaluza de Electrodomésticos y Otros Equipamientos del Hogar (FAEL), y que fue recogido por la Directora Gerente de Lipasam, Virginia Pividal, destaca la buena gestión y el tratamiento de los residuos eléctricos y electrónicos (RAEE) y la calidad y la importancia de un servicio que en lo que va de año ha recogido 338.360 Kg de material.
Con cuatro Puntos Limpios autorizados como productores de residuos peligrosos, habilitados también para la recogida de otros residuos municipales, Lipasam ha recogido y entregado para su tratamiento más de siete millones de kilogramos de RAEE desde el año 2005. Con este premio, la empresa municipal de limpieza ve recompensada la buena gestión de los puntos limpios Los Olivos, Los Pinos, Los Naranjos y Las Jacarandas.
La segunda edición de los Premios RAEEimplícate valora la trayectoria de la empresa pública de limpieza en la recogida de RAEE en sus cuatro Puntos Limpios, su mejora continua de los procesos de segregación de los residuos, así como la integración de sistemas de gestión de calidad y medio ambiente. Para Lipasam los puntos limpios son un servicio más con los que mantiene la limpieza de Sevilla de un modo eficiente, eficaz y sostenible para lograr su objetivo de hacer de Sevilla la ciudad más limpia, a la vez que se fomenta la colaboración ciudadana. En este sentido, cabe destacar que los puntos limpios cuentan con la acreditación EMAS de la Unión Europea que también reconoce esta buena gestión.
Colaboración ciudadana.
Para optimizar el funcionamiento de los Puntos Limpios y la limpieza de Sevilla, Lipasam recuerda que es necesario fomentar la colaboración ciudadana, un requisito necesario para mejorar la eficacia de los proyectos de innovación y desarrollo de los servicios de Lipasam.
Abiertos de lunes a sábado, los Puntos Limpios de Lipasam están situados en lugares de fácil acceso. Funcionan como una isla ecológica de gran tamaño en las que se deben depositar los productos contaminantes o los residuos grandes. En ellos, un operario ayuda a los usuarios a deshacerse de sus residuos en el lugar adecuado y vela para que no se sobrepase la cantidad máxima de residuos permitida por cada ciudadano al día. Los productos que se deben depositar en el punto limpio son aceites industriales usados, absorbentes y material contaminado, pinturas, chatarra, lámparas de bajo consumo, colchones… o residuos de grandes dimensiones. Todos los residuos son entregados a diferentes gestores para su tratamiento, destacando que más del 93% de los mismos se destinan a su reciclaje y valorización.
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