Este choque, que era fundamental para que el club de Nervión continuara con buena vida en la máxima competición europea, finalizó con el resultado de uno a tres (1-3) a favor del líder de la Liga Inglesa. Se adelantó el equipo de Manuel Pellegrini con los goles de Sterling --minuto 8--, y Fernandinho –minuto 11--. A pesar de los dos zarpazos del Manchester, el Sevilla buscó con enorme afán y espíritu de lucha una buena respuesta con el fin de poder estar a la altura del cuadro inglés. A los 25 minutos redujo distancias en el marcador con un gol realizado por el defensa Tremoulinas, pero poco después, en plena revolución visitante, Bony, en el minuto 36 y a pase del exsevillista Jesús Navas, marcó un nuevo tanto para poner el marcador en el 1-3. Aunque los hombres de Unai Emery trataron por todos los medios de enmendar la plana, ese resultado a favor de los ingleses se mantuvo hasta que el juez de la contienda, el noruego Moddvar Moen, pitó el final del encuentro.
El Sevilla, a pesar de esta derrota, tiene aún sus posibilidades de clasificarse para seguir en la Liga de Campeones. El equipo de Emery tendría que ganar al Borussia en Alemanía y la Juventus perder en su casa ante el Manchester en la próxima jornada. Si se dieran estos resultados todo quedaría pendiente del encuentro final del Grupo que el Sevilla ha de jugar en el Sánchez Pizjuán ante el cuadro italiano y que, por supuesto, está obligado a ganar. Si las complicadas cuentas salen positivas porque el equipo responde a los dos retos podría lograr la segunda plaza.
33 AÑOS MENOS
En mi memoria está aquel trascendental encuentro de Copa de la UEFA que el Sevilla jugó en el Sánchez Pizjuán frente al Paok de Salónica el 3 de noviembre de 1982. Curiosamente hace ahora 33 años de este choque europeo. Los blancos, entrenados por el coriano Manolo Cardo, perdieron en el partido de ida por dos a cero. También fui testigo de este encuentro en Grecia para escribir la crónica como enviado especial de ABC de Sevilla. En nuestra ciudad, ese 3 de noviembre del 82, se jugaba la vuelta de estos dieciseisavos de final con todas las esperanzas del mundo sevillista. Este partido se celebró dos días antes de la beatificación de Sor Ángela de la Cruz por el Papa Juan Pablo II en el campo de la Feria. El equipo que mandaba Cardo realizó ante el Paok un partido redondo en el Sánchez Pizjuán. La afición gozó con la clara y contundente victoria lograda por el cuadro sevillista para continuar en este torneo europeo. Marcaron Santi, López, Magdaleno y el recordado Pintiño. Cuatro goles al Paok para dejarlo K.O. Desde la grada se gritaba con fuerza aquel día aquello de “Así, así, así se juega aquí”.
DOS GOLES DEL MANCHESTER EN TRES MINUTOS
El Sevilla tenía que poner en este choque de la Liga de Campeones toda la carne en el asador. Superar a los ingleses del Manchester en todas las líneas. Fajarse al ciento por ciento. No tener piedad del rival. El objetivo de los hombres de Emery estaba bastante claro desde que el juez de la contienda hizo sonar su silbato para que comenzara este partido de la gran esperanza. El once de Nervión necesitaba si o si la victoria para alcanzar una justa clasificación en la Liga de Campeones y no quedarse en el alambre. Para el Sevilla era vital dar un definitivo paso adelante.
Pero sorprendió el equipo de Pellegrini desde que comenzó el primer tiempo. A los 8 minutos se adelantó el Manchester con gol de Sterling, aprovechando dudas defensivas blancas. Quiso reaccionar pronto el Sevilla, pero en el minuto 11, el cuadro inglés volvió a marcar un segundo tanto, obra de Fernandinho. La escuadra sevillista cometía muchos errores en defensa en beneficio de los visitantes, que sorprendían de forma constante a la contra. La escuadra de Nervión quiso reaccionar y encontró el fruto a sus deseos con un gol marcado por Tremoulinas en el minuto 25. El defensa blanco remató un balón centrado al área inglesa por Coke. Pero el Manchester, con más oficio, intensidad, pegada, mejor ritmo y más talento superó siempre todos los buenos deseos de los locales que siempre mostraron excesivas carencias. Aprovechando las dudas defensivas, el cuadro inglés volvió a batir a Sergio Rico. El delantero del Manchester, Bony, en el minuto 35, fue esta vez el hombre gol para el 1-3. En la recta final del primer periodo, el Sevilla luchó con mucho pundonor e intentó corregir todos sus males. Pero no hubo fortuna a la hora de sacar provecho de todas las buenas intenciones desarrolladas sobre la yerba.
EL SEVILLA SUFRIÓ HASTA LA PITADA FINAL
En la segunda parte continuaron las debilidades en el equipo de Unai Emery. Aunque no se movió el marcador, el Manchester fue siempre el equipo que tuvo más ocasiones de gol para aumentar su clara y rotunda ventaja. El Sevilla, que continuamente fue desbordado por el cuadro inglés, quiso poner orden en sus ideas, pero las dudas continuaron en la defensa --menos mal que Sergio Rico atrapó más de un balón que se colaba en su portal--; el centro del campo, salvo algunas maniobras de Vitolo --Banega no tuvo su noche--, apenas entró en juego para meter balones a los delanteros. Fernando Llorente --que fue cambiado por Immobile--, y Konoplyanka tampoco tuvieron claras ocasiones para dar algún susto en el área inglesa.
En esta segunda mitad no tuvo fruto la entrega de los hombres sevillistas. El equipo de Emery, a pesar de los cambios --Mariano sustituyó a Coke en el minuto 55--, nunca encontró los caminos adecuados para sorprender al Manchester, que estuvo muy fuerte en defensa, espléndido en el centro del campo y peligroso en la ofensiva. En el cuadro de Pellegrini, Jesús Navas se lució ante sus paisanos con su velocidad y sus fintas. El Sevilla, poco consistente, sufrió de forma dolorosa el dominio inglés. Hombres como Sterling, Yayá Touré, Fernandinho y Bony pudieron aumentar de forma escandalosa la cuenta goleadora del Manchester. El Sevilla no supo jugar esta vez en el Sánchez Pizjuán ante la firme escuadra de Pellegrini para poder superar toda su gran calidad y su enorme superioridad técnica y táctica. Además, la pegada de los ingleses fue tremendamente letal.
Esta derrota ante el cuadro de Pellegrini complica la clasificación para seguir jugando en la Liga de Campeones. El Sevilla está obligado a ganar al Borussia de Mönchengladbach a domicilio --porque además está en juego la Europa League--, y esperar que la Juventus no saque los tres puntos en su casa ante el Manchester City, que ya está clasificado. De suceder esto, habrá que realizar muchas cuentas, porque en la última jornada de esta Fase se juega en el Sánchez Pizjuán un Sevilla-Juventus que puede ser vital para la clasificación del Sevilla en la siguiente ronda europea. Hasta podría quedar en el segundo puesto del Grupo de la Champions League. (Foto: SFC).
FERNANDO GELÁN
* Después de los partidos del Grupo D de la Liga de Campeones disputados este martes 3 de noviembre de 2015 la clasificación actual en la siguiente: 1º.- Manchester City, con 9 puntos; 2º.- Juventus, 8 puntos; 3º.- Sevilla FC, 3 puntos, y 4º.- Borussia, 2 puntos.
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