De esta forma se ha organizado un día cargado de actividades en el que se ha decorado con farolillos el patio del centro de mayores y se ha servido un almuerzo típico de estas fechas (en las que no ha faltado por supuesto el “pescaíto” frito y el rebujito). Gracias a este tipo de iniciativas se consigue que las personas mayores residentes en el centro mantengan la conexión con el entorno, integrándose así en las fechas claves de su municipio. Igualmente estas actividades sirven para potenciar las habilidades sociales con otras personas, así como fortalecer esas relaciones y mejorar las capacidades cognitivas como la orientación temporal.
Estas actividades lúdicas son parte y un buen ejemplo del modelo de gestión por el que apuesta Gerón para sus residencias, en donde fomenta unos centros abiertos y participativos que estimulan un envejecimiento activo entre sus mayores. Y es que, las instalaciones de la Residencia Gerón acogen numerosas actividades que favorecen la integración de los residentes en la sociedad, así como cursos de formación, jornadas de puertas abiertas y talleres para familiares cuidadores de los que se beneficiarán tanto los usuarios y sus familiares, como en general todos los habitantes de la zona.
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