Tanto el asesino confeso de Marta del Castillo como los implicados y cómplices han vuelto al Juzgado de Instrucción de Sevilla, para volver a declarar ante el juez sobre la desaparición y homicidio de la menor que desapareció el 24 de enero del presente 2009.
Hubo bastantes ciudadanos en el Prado de San Sebastián para ver y gritar a los acusados, que ingresaron en prisión desde que fueron detenidos por la Policía.
Pero se enreda la ya complicada madeja de este terrible suceso. Aunque Miguel C.D, el presunto asesino, mantiene todo cuanto confesó a los agentes de la Policía, los implicados y cómplices de este homicidio, en especial El Cuco, de 15 años, se han vuelto atrás, pues dice que realizó las primeras declaraciones presionado por la Policía y que les contó lo que había visto por televisión.
Miguel C.D. sigue diciendo que mató a Marta con el cenicero y que junto a Samuel y Javier cogió el cuerpo de la joven para lanzarlo al Guadalquivir.
Por otra parte, hasta ahora no han dado ningún resultado positivo los trabajos realizados en el río desde Camas hasta su desembocadura en Sanlúcar de Barrameda. Incluso agentes especializados, con perros amaestrados, han removido montañas de arenas procedentes de las excavaciones realizadas por esta zona para la construcción del metro.
Asimismo, la actual novia de Miguel ha vuelto a declarar, en todo este torbellino de contradicciones, que estuvo estudiando con Miguel hasta las doce y media de la noche en la casa del crimen, en León XIII, y que nada extraño observó y contempló en la vivienda.
Así están las cosas y todo se complica y se enreda aún más. Por otra parte, el nuevo ministro de Justicia ha dicho que no es partidario de restituir la pena de muerte en España.
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