Los toros de El Pilar tuvieron buena presencia y buenas hechuras, pero fueron muy desiguales en las embestidas para que los diestros desarrollarán unas faenas completas.
Pepe Moral se entregó a los dos toros. El diestro sevillano puso siempre mucha voluntad ante las dos reses. Aunque el de Los Palacios peleó mucho ante el segundo de su lote, porque tuvo buenos principios, buena embestida y mucha casta, luego, ya en la faena de muleta de Moral, el toro, que mantuvo su casta y bravura, perdió continuidad en la embestida y el sevillano no pudo rematar bien la lidia. Este toro fue ovacionado en el arrastre.
Por otra parte, el jerezano Ginés Marín , a pesar de la buena presencia de los toros que le tocó en suerte, no pudo desarrollar la faena soñada. Ambos morlacos perdieron fuerza y ritmo, y tuvieron muy poca respuesta a todos los buenos deseos del jerezano.
Álvaro Lorenzo fue único que pudo ejecutar unas faenas muy ajustadas a sus dos toros --los mejores del festejo--, ofreciendo momentos de calidad y de torería. En especial, en el primero de su lote, el toledano aprovechó la buena embestida del toro. Muy firme, Lorenzo supo llevar bien el ritmo para que morlaco entrara con bravura a la muleta. Sonó la música y culminó la lidia de forma muy positiva. Pero pinchó al primer intento, perdió la muleta y fue achuchado por el toro, pero volvió a entrar a matar, logrando una buena estocada. Hubo ligera petición de oreja y Álvaro Lorenzo, finalmente, solo pudo dar una vuelta al ruedo. En el segundo de su lote. el diestro toledano también expuso al máximo para alcanzar un mejor premio ante este toro. Pero su embestida fue siempre sosa e irregular. Remató con manoletinas la desigual lidia, que finalizó con aviso y estocada final. Fue premiado con una fuerte ovación y saludos desde los medios montera en mano.
CRÓNICA DE UN FESTEJO GRIS CON FALTA DE AMBIENTE Y TOROS CON FALTA DE CHISPA Y DE TRANSMISIÓN
No fue el espectáculo totalmente deseado porque a los toros, bien presentados, les faltó chispa y remate para responder a los buenos deseos y a la entrega de los diestros que en esta jornada de farolillos de Feria de Sevilla se celebró en la Plaza de la Real Maestranza, que además, tras el no hay localidades del lunes, registró algo más de media entrada.
Los tres toreros --Pepe Moral, Álvaro Lorenzo y Ginés Marín--, estuvieron en el ruedo, ante las reses que les tocó en suerte, con muchas ganas. Se entregaron y lucharon con mucha fe para poder superar las dificultades. El segundo toro que lidió Pepe Moral, el cuarto del festejo, fue uno de los más destacados en casta y bravura, pero en el último tercio no mantuvo las buenas sensaciones que dio en los primeros momentos de la lidia, especialmente en el tercio de varas. Asimismo, Álvaro Lorenzo lidió dos toros de gran presencia y buena embestida, y el toledano estuvo a punto de lograr una oreja en el primero de su lote.
Pero vayamos por parte. La corrida comenzó con el sevillano Pepe Moral sobre el ruedo de la Maestranza con muchas ganas de triunfar. Pero desde un principio el toro --“Medicina”, de 549 kilos--, fue creando dificultades. Hasta los banderilleros tuvieron sus problemas para redondear la suerte. El torero de Los Palacios, ya con la muleta, citó al toro pegado a las tablas de la barrera. Moral comenzó haciendo su labor para poder dominar la situación y logró, con entrega, dar algunos muletazos a “Medicina”. Pero el toro no responder a los deseos del diestro sevillano. Con pinchazo y estocada, Pepe Moral puso fin a la lidia que realizó al primer toro del festejo.
En el segundo de su lote --“Mirador”, de 540 kilos--, Pepe Moral se lució con las verónicas. Dominó el diestro sevillano en este comienzo de la lidia ante un toro de El Pilar que daba buenas sensaciones. El picador Juan Antonio Carbonell se lució en esta suerte, citando al toro desde lejos.
El de Los Palacios, tras brindar la muerte de “Mirador” a Juan José Padillla que estaba en la primera fila de barrera, cogió con muchas ilusiones la muleta por las buenas sensaciones que había dando en los tercios anteriores. Pepe Moral ejecutó unos buenos muletazos, con mucha calidad. Pero, desgraciadamente, el toro se fue viniendo abajo y el diestro sevillano no pudo lograr todos sus buenos propósitos. “Mirador” dio un giro total para que Moral pudiera rematar la lidia. El sevillano logró por el pitón izquierdo algunos acertados muletazos cuando el morlaco subió algo el ritmo en su embestida. Pero, a pesar de las buenas sensaciones que dio “Mirador”, el toro se vino abajo y perdió gas. Pepe Moral mató de estoca. Hubo ovación para el toro en el arrastre y un nuevo silencio para el diestro sevillano.
Álvaro Lorenzo estuvo muy cerca de cortar alguna oreja. En especial, en el primero de su lota --“Tontillo”, de 561 kilos--. Logró el toledano ejecutar unas buenas verónicas. Banderillas. Con la muleta, Lorenzo, con la mano baja, llevó a cabo una faena de gran calidad ante un toro que acudía a las citas del torero. Hubo temple en los buenos pases y ajustados y precisos remates de pecho. Sonó la música y la lidia alcanzó mayor dimensión. Por la derecha y por la izquierda, Álvaro Lorenzo se recreó ante “Tontillo” para culminar una faena muy positiva. En la suerte suprema, al dar un pinchazo, el toledano perdió la muleta y fue arrollado por el toro. Luego, Lorenzo, con una precisa estocada, culminó su gran faena al toro del El Pilar. Hubo ligera petición de oreja y al final dio una vuelta al ruedo.
En el segundo de su lote --“Alambrisco”, de 574 kilos--, el joven Álvaro Lorenzo, a pesar de sus buenos deseos y de buscar un premio gordo en la corrida, se encontró con un toro complicado. El toledano, con la muleta, intentó obligar al toro a la embestida, logrando algunos buenos pases. Aunque el toro era noble, tenía una embestida corta y sosa. Lorenzo llegó a ejecutar algunas series con cierto mando y temple, pero al toro le falto chispa. ´Tas una larga faena, el toledano remató con unas manoletinas y un doble pase de pecho antes de entrar a matar. Mató de estocada, escuchó un aviso, y fue ovacionado, respondiendo el torero desde los medios. Dejó su huella Álvaro Lorenzo.
Ginés Marín se enfrentó al primer toro de su lote --“Portillo”, de 561 kilos--, ejecutando unos buenos lances con la capa. Al toro se le partió el pitón izquierdo. Con la muleta, el jerezano obligó al toro a la embestida, pero “Portillo” perdió las manos varis veces. Muy despacio, Marín, ante un toro con pocas fuerzas, logró algunos buenos muletazos. Remató la faena de muleta con pases por alto. Pero con una escasa respuesta de la res. Mató de estocada --el toro cayó y se levantó y se volvió a caer--, y el jerezano escuchó algunos aplausos.
En el segundo de su lote --“Sopetillo”, de 555 kilos--, Marín llevó a cabo unas lucidas y templadas verónicas. Ya con la franela roja, el jerezano, a dos manos y con los pies juntos y clavados en el albero, ejecutó unos precisos estatuarios. Pero “Sopetillo” tenía dos velocidades y complicó la lidia a Ginés Marín. La faena no alcanzó el buen nivel deseado por el diestro jerezano. Hubo falta de transmisión y de ligazón. “Sopetillo” finalizó con una marcha menos y con un irregular comportamiento. Marín mató de pinchazo hondo y estocada.
Y así acabó esta corrida del ciclo continuado de la Feria de Sevilla 2019. Los toros de El Pilar no dieron el juego deseado por los toreros. Se salvaron algo el cuarto y los dos que lidió Álvaro Lorenzo. Pero faltó chispa, algo de transmisión.
FICHA DE LA CORRIDA
Se lidiaron toros de la ganadería de El Pilar. Bien presentados, pero de irregular comportamiento en el ruedo. Destacaron el segundo toro que lidió Pepe Moral y los dos toros que le tocó en suerte a Álvaro Lorenzo.
* Pepe Moral, silencio en los dos toros.
* Álvaro Lorenzo, vuelta al ruedo y ovación con saludos.
* Ginés Marín, aplausos en el primero y silencio en el segundo de su lote.
Saludó el picador Juan Antonio Carbonell tras colocar las puyas en el primer toro de Pepe Moral. El cuarto toro fue ovacionado en el arrastre.
INCIDENCIAS:
Se celebró en la Plaza de Toros de la Real Maestranza de Sevilla la novena corrida del abono de la temporada --sexta del ciclo continuados de la Feria de Sevilla 2019--. No se llenó el Coso del Baratillo, con mucho vacío en los tendidos de sol. Pepe Moral brindó la muerte del segundo toro de su lote a Juan José Padilla que estaba en la primera fila de barrera. (Fotos: Toromedia).
* FERNANDO GELÁN.-
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