miércoles, 6 de abril de 2016

LA CRÓNICA TAURINA DE FERNANDO GELÁN.- Manuel Jesús "El Cid" y Joselito Adame merecieron más premio ante los toros de Las Ramblas que se lidiaron en la Real Maestranza de Sevilla

















Había ganas en la afición taurina de Sevilla y del mundo mundial por ver en esta corrida a tres grandes maestros de la Fiesta Nacional.
El cartel tenía su poder de convocatoria, aunque como siempre sucede en los festejos de vísperas de este ciclo continuado de la Feria de Sevilla no se cubriera la plaza totalmente.
El esfuerzo de Ramón Valencia al frente de la Empresa Pagés, con todos los elementos mediáticos que ha organizado, debería tener más tirón popular. Pero todo llegará cuando se aproximen los días de las mantillas, los trajes de flamencas y los sombreros de ala ancha, que ya se preparan en los hogares de los sevillanos.
Mientras tanto llegan estos días más festivos, las corridas siguen su marcha ascendente en el Coso del Arenal. Además, con buen tiempo y con temperatura primaveral. En el cartel de este miércoles 6 de abril figuraban, y los nombres de Miguel Abellán, que se presentó en Sevilla hace ya 16 años; Manuel Jesús “El Cid”, que también es un veterano en hacer el paseíllo en el coso maestrante, y Joselito Adame, un mexicano que tiene un buen historial en el mundo de los toros.
Los tres, con tesón, con profesionalidad, calidad, valor, arte y entrega, lucharon frente a los irregulares toros de Las Ramblas. Las reses de la ganadería albaceteña dieron diversos tonos de bravura y de raza. A veces fueron sosos en las embestidas por su mansedumbre y otras veces mordieron el anzuelo tendido por los diestros en las faenas de muleta.
Los dos toreros que más brillaron en esta jornada taurina fueron Manuel Jesús “El Cid” y Joselito Adame. El sevillano y el mexicano aprovecharon la bondad y la buena marcha de los dos morlacos de sus segundos lotes y a punto estuvieron de alcanzar un mejor premio que las dos vueltas al ruedo. Pero vayamos por el orden de siempre.

El primer espada en ponerse delante del primer toro que salió de los chiqueros fue Miguel Abellán. Se enfrentó el madrileño a “Tajante”. Pero no hubo fortuna a la hora de crear ambiente para hacer saltar las primeras chispas. Abellán lo intentó por la derecha y por la izquierda con la franela roja. Cambiando de mano la muleta hizo buenos guiños al toro. Superó el apagón y la sosería del morlaco dentro de un buen orden profesional. La estocada de Abellán fue directa y efectiva.
En el segundo de su lote, el torero madrileño se enfrentó esta vez a “Jabonero”, de 600 kilos. Pero tampoco tuvo fortuna Miguel Abellán para desarrollar una lidia positiva. El público, además, estuvo más atento a los sones de los clarines del miedo, que tras unos problemas de toques, todo fue superado de forma brillante y justa armonía. Abellán siempre estuvo firme y entregado, pero el animal de Las Ramblas no dio la respuesta adecuada y esperada. El torero fue, como en el primero de la tarde, eficaz y efectivo con el estoque.

Y llegó “El Cid” Campeador. En el primero de su lote ejecutó buenas verónicas, con adecuado remate. Luego, desde la suerte de picar hasta la última banderilla colocada al toro, el tiempo se hizo muy largo. En este toro fue atropellado el “Alcalareño”, que no midió bien el último esfuerzo para clavar las banderillas. El morlaco lo derribó y se puso encima del subalterno. El susto fue tremendo, porque el toro buscó el cuerpo del banderillero, que resultó con heridas en el rostro. Sin embargo, con sangre en la cara colocó el tercer par en esta suerte. Luego se pasó por la enfermería. Y ya en calma, “El Cid” pudo comprobar que el morlaco no tenía ninguna gracia. Se rajó el de Las Ramblas a pesar de dominar y controlar la lidia el torero de Salteras. Pero a “Tarrina” le faltó gasolina. A pesar de una buena serie de muletazos, con calidad y templanza, el toro quedó para el arrastre. “El Cid” mató de estocada positiva.
En el segundo de su lote, el de Salteras pudo armar el taco. Si “Opaco” se llamaba el toro de Las Ramblas, “El Cid” toreó con enorme claridad. Estuvo muy ajustado con el capote y trasteó de forma acertada para poner firme al morlaco. Luego, ya con la muleta, el torero sevillano ofreció todo un gran espectáculo con suaves muletazos para romper toda la mala racha. “El Cid” dominó la lidia y ganó con temple la batalla ante el toro de Las Ramblas. Sonó la música. Hay orgullo y pasión. Se palpa el gran triunfo. Manuel Jesús toreó con soltura a un animal que siguió el ritmo marcado por el matador. Es otra historia totalmente soñada. Faroles y remates artísticos para poner la plaza a revienta calderas. “El Cid” tocó hasta los cuernos del toro, que domina y controla. Hay raza en el de Las Ramblas para poder culminar con éxito la lidia. Pero no tiene suerte el diestro sevillano con el estoque. Pinchazo y descabello para liquidar a “Opaco”. Algunos pañuelos en los tendidos y solo el premio de la vuelta al ruedo.

Y el tercer espada de la tarde soleada. Joselito Adame. Llegó de México lindo este buen profesional que es también un veterano en este mundo de los toros. Pero en el primer de su lote, “Sorprendido”, quien se llevó la mala sorpresa fue el diestro azteca. Trasteó Adame para iniciar con la muleta la lidia, pero el toro perdió las manos. El torero se mantuvo firme y decidido, sacando petróleo con su entrega y su porfía. Pero “Sorprendido” no respondió y Adame tuvo que coger el estoque de verdad para que el morlaco pasara a mejor vida. Pinchó a la primera y ejecutó la suerte con una estocada.
Adame se enfrentó al último toro de la tarde. “Vidriera”, de 549 kilos. Se luce el mexicano con ajustadas verónicas. En la suerte de banderillas se lucieron Jarocho y Sánchez. Y hay aplausos para el torero cuando brinda al público. Muy firme estuvo siempre Adame con la muleta. Ejecutó buenos naturales y está seguro y sereno ante el toro. Sonó la música. Usó la derecha y mandó con temple y entrega. Ofreció buenos trincherazos y su lidia tuvo compromiso y mucho arte. Todo lo está provocando Joselito Adame. Pero a la hora de la suerte suprema se precipitó al querer matar recibiendo. La estocada fue defectuosa y queda haciendo guardia. En animal cayó con el primer descabello. Se le escapó a Adame el trofeo que había merecido por su lucida faena. La vuelta al ruedo fue el premio que puso epílogo a una tarde llena de variados contrastes taurinos.

FICHA DE LA CORRIDA:
En este festejo del ciclo continuado se lidiaron reses de Las Ramblas, bien presentados, pero complicados en las embestidas para todos los deseos de los matadores.

* Miguel Abellán, silencio y silencio.
* Manuel Jesús "El Cid", palmas y vuelta al ruedo.
* Joselito Adame, silencio y vuelta al ruedo.

Hubo algo más de media entrada en la Plaza de Toros de Sevilla, en tarde muy primaveral. El banderillero el "Alcalareño", fue arrollado por el primer toro del lote de "El Cid" tras poner un par de rehiletes, siendo atendido tras llevar a cabo su trabajo en la plaza con sangre en el rostro. Saludaron los banderilleros de la cuadrilla de Joselito Adame, "Jarocho" y Fernando Sánchez. (Fotos: EP).

FERNANDO GELÁN

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