El Grupo Municipal de Izquierda Unida pretende que el próximo Pleno del Ayuntamiento de Sevilla muestre su apoyo a las Marchas de la Dignidad convocadas este 28 de mayo en todas las capitales de provincia para denunciar las consecuencias que la crisis-estafa está provocando en millones de personas y los recortes en los servicios públicos y en el ámbito local.
Así lo ha señalado este lunes el portavoz municipal de IU en el Ayuntamiento de Sevilla, Daniel González Rojas, quien ha anunciado la presentación de una moción al Pleno de este viernes para que el Consistorio hispalense haga suyas las reivindicaciones de Pan, Techo y Trabajo de las Marchas de la Dignidad al objeto de “mejorar las condiciones de vida de nuestro pueblo”. El objetivo –ha dicho- es “sumar fuerzas” para acabar con “las políticas neoliberales que están machacando literalmente a la mayoría social de este país”.
Rojas ha asegurado que “sobran las razones” para salir de nuevo a la calle porque “nada ha cambiado a mejor” desde que estalló la crisis y porque las políticas de recortes impuestas por la Troika “están dejando a la ciudadanía sin trabajo, sin casa, sin sanidad, sin pensiones, sin educación y sin futuro”.
En la moción de IU se hace referencia al aumento de la pobreza “con millones de personas en situación de extrema necesidad que han perdido sus empleos, sus viviendas, que no perciben renta alguna y que no pueden hacer frente a gastos vitales como los suministros energéticos o medicamentos”. Igualmente, se insiste en la necesidad de “recuperar los derechos quebrados con la excusa de la crisis económica”.
En concreto, Izquierda Unida propone manifestar desde el Ayuntamiento el apoyo a las movilizaciones previstas el 28 de mayo y declarar a Sevilla como Municipio opuesto al TTIP. Un tercer acuerdo de la moción pasa por exigir al Gobierno de España que “no asuma un solo recorte más en sus presupuestos” y, finalmente, se insta a éste y a la Junta de Andalucía a “poner en marcha políticas que antepongan el bienestar de las personas sobre el interés económico y, en particular, las reclamaciones de las Marchas de la Dignidad. Entre ellas, destacan el no pago de la deuda “ilegal, ilegitima y odiosa”; la derogación del artículo 135 de la Constitución y de todas las reformas laborales; garantizar trabajos y salarios dignos con empleo estable y derechos básicos como el acceso a la vivienda, la luz, el agua o el gas; paralización inmediata de todos los desahucios; reversión de las privatizaciones, etcétera.
Desde la formación de izquierdas confían en obtener el máximo respaldo del Pleno a esta moción, al tiempo que llaman a los colectivos sociales y a la población en general a sumarse a esta nueva movilización para que el 28 de mayo sea un “clamor ciudadano contra el austericidio, que sólo beneficia a unos pocos y perjudica a la clase trabajadora”.
Cabe recordar que las Marchas de la Dignidad supusieron el 22 de marzo de 2014 en Madrid una de las mayores movilizaciones de la historia de este país, en la que participaron millones de personas. Este espíritu de lucha social y de protesta del pueblo se quiere levantar de nuevo el próximo 28 de mayo con las manifestaciones locales que se están preparando.
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