Se celebró en la Plaza de toros de Calaasparra (Murcia), la tercera novillada de la Feria. En este festejo, Antonio Puerta cortó dos orejas y Pablo Aguado una oreja.
FICHA DEL FESTEJO:
Plaza de toros de Caslasparra. 3ª novillada con picadores de abono de la XXVI Feria del Arroz. Dos tercios de entrada.
Seis novillos toros de Cebada Gago. El cuarto premiado con la vuelta al ruedo.
* Antonio Puerta, saludos tras petición y dos orejas con petición de rabo y dos vueltas al ruedo.
* Alejandro Marcos, silencio y ovación con saludos.
* Pablo Aguado, silencio y oreja.
Incidencias: Lluvias intermitentes en tarde fresca. Saludaron en banderillas Antonio Cama y Salvador Lobato. Antonio Puerta salió en hombros por la puerta grande.
COMENTARIO:
La tercera novillada de la Feria del Arroz anunciaba uno de los hierros favoritos de la afición de Calasaparra, el de Cebada, y al novillero ganador de la Espiga de Oro 2014, Antonio Puerta. El de Cehegín volvió con la sana intención de defender el trofeo y volver a llevarse la Espiga de Oro.
Sorteó en primer lugar un colorao que remató en lo burladeros. Lo lanceó ceñido a la verónica y comenzó su faena de muleta con un pase cambiado en el mismo centro del anillo en el que el pitón le pasó rozando la taleguilla. Firmó dos tandas de toreo en redondo muy ligadas y templadas, que conectaron con la grada, pero al tomar la zurda el novillo se rajó y la faena decayó en intensidad. Comenzó a llover, lo que pobló el tendido de paraguas. Pese a ello hubo suficiente petición de oreja.
La faena de la tarde fue la realizada al cuarto. Un saludo vibrante con la capa, pegado a tablas, a un novillo astifino fue el preludio de una faena de muleta de impecable colocación y seria apuesta. A un comienzo de rodillas en el centro del anillo le siguieron ya de pie y descalzo series de mucha naturalidad con ambas manos. El novillero acabó ganándose el favor de la grada pisando los terrenos de verdadero compromiso y acabó toreando al natural con las dos rodillas en tierra. Además se fue detrás de la espada. Se le pidieron los máximos trofeos, paseó dos orejas y tuvo que dar dos vueltas al ruedo. El palco premió al pupilo de Cebada con la vuelta en el arrastre
Mostró buenas maneras el salmantino Alejandro Marcos. Le faltó chispa al primero de su lote, al que le arrancó con buen pulso naturales templados y con la diestra firmó dos derechazos de figura desmayada de bella composición. Falló con el verduguillo perdiendo la posibilidad de triunfo. Al quinto lo trató con mimo pese a ser novillo de embestida brusca, en un voluntarioso trasteo.
En tercer lugar actuó Pablo Aguado. Abrevió con su primero, que se defendió y fue complicado. Se desquitó ante el noble novillo que cerró plaza. Se lució a la verónica y en el galleo por chicuelinas para llevar al astado al caballo. Con la muleta entendió bien al bovino, que acusó un fuerte puyazo, y lo toreó por ambos pitones, a media altura, con elegantes formas, cortando una merecida oreja. (Fotos: Toromedia).
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