* Un trabajo que también ha desembocado en la elaboración, por parte de IU y Participa Sevilla, de una moción al próximo Pleno en el que se incluyen una batería de propuestas para mejorar la calidad ambiental y combatir el cambio climático.
Mejorar la calidad ambiental y luchar contra el cambio climático, promoviendo el empleo verde y la participación en la capital hispalense, es lo que proponen desde el ámbito social, empresarial, ecologista, universitario y político diferentes colectivos de la ciudad. Unas reivindicaciones que se han visibilizado gracias al manifiesto Por el empleo verde y la participación activa en la lucha contra el cambio climático en Sevilla que han promovido de forma conjunta organizaciones como Equo, Ecologistas en Acción, A Contramano, Red Sevilla por el Clima, Asociación de Empresas de la Economía Verde, Som Energía, Podemos, Laboratorio de Ideas sobre el Cambio Climático y el Laboratorio de Ideas de Ecología Política de Sevilla, Participa Sevilla e Izquierda Unida.
Un trabajo que, además, será ampliado gracias a la presentación por parte de Izquierda Unida y Participa Sevilla de una moción conjunta en el próximo Pleno del Ayuntamiento. El portavoz municipal de IU en el Ayuntamiento hispalense, Daniel González Rojas, y su homóloga de Participa, Susana Serrano, han presentado esta iniciativa con la que ambos grupos políticos buscan que el consistorio sevillano se tome en serio y priorice el impulso de políticas encaminadas a ver el cambio climático no como un problema, sino como una oportunidad para mejorar la calidad ambiental y crear empleo en nuestra ciudad. No por casualidad la rueda de prensa se ha desarrollado a los pies del panel informativo sobre calidad del aire que hay ubicado en la Avenida de El Cid, puesto que los niveles de contaminación atmosférica ya llegan a niveles perjudiciales para la salud pública en nuestra ciudad.
Así, entre las medidas defendidas por los colectivos sociales y partidos políticos destacan las de reactivar el Consejo Local de Medio Ambiente; poner en marcha una campaña de control urgente de la calidad del aire; restituir todas las fuentes de agua potable eliminadas en la ciudad; restablecer las políticas de movilidad sostenible (reducir del uso del vehículo en el centro, disminuir la velocidad de los automóviles, potenciar el uso de la bici…); o ampliar la participación social dentro de la Agencia de la Energía y para la Sostenibilidad de Sevilla.
De esta forma, la moción que presentan IU y Participa advierte de que está en manos del Ayuntamiento “encontrar soluciones para dar respuesta a la necesidad de proporcionar un entorno saludable al conjunto de la población” y que urge ir más allá de las buenas intenciones en este terreno porque “es mucho lo que nos estamos jugando”.
Una oportunidad para cambiar el modelo productivo y crear puestos de trabajo
Este manifiesto plantea la necesidad de aprovechar el Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible (PACES), recientemente aprobado por el Pleno del Ayuntamiento, para abrir un debate ciudadano sobre cómo afrontar los retos medioambientales actuales, movilizando para ello a la sociedad en su conjunto y definiendo unos objetivos, plazos y responsabilidades que no se especifican en dicho documento.
Quienes suscriben este manifiesto consideran que el PACES es un texto “claramente insuficiente” y que, una vez más, se limita a ser una declaración de buenas intenciones, que además adolece de numerosos errores de cálculo y deficiencias. Asimismo, abogan por no ver el cambio climático sólo como un problema, sino como una oportunidad para la diversificación productiva y la creación de empleo en la ciudad. En este sentido, hay que señalar que en la moción de IU y Participa se apuesta también por una revisión y actualización de este plan “con la elaboración participativa de un diagnóstico y una estrategia” que permitan cumplir los plazos de la agenda europea y que se enmarquen dentro del Pacto de los Alcaldes para el Clima y la Sostenibilidad.
Igualmente, en el manifiesto se pone énfasis en cómo el urbanismo disperso contribuye al aumento de emisiones y provoca una maximización del uso del automóvil privado. Además, se denuncia cómo las políticas de Zoido y Espadas perseveran irresponsablemente en este modelo de ciudad difusa, promoviendo la instalación de grandes superficies comerciales en la periferia de la ciudad, como IKEA, Palmas Altas o Sevilla Park, sin un mínimo de planificación y de un modo totalmente insostenible de cara al desarrollo urbano, la movilidad y el ahorro energético.
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