En el Estadio Vicente Calderón, en la capital de España, se jugó la final de la Copa del Rey de la temporada 2015-2016 entre el Sevilla Fútbol Club y el Fútbol Club Barcelona. El encuentro finalizó con el resultado de dos a cero (2-0) a favor del cuadro azulgrana. Se proclamó campeón de este trofeo el equipo que prepara Luis Enrique, que marcó los goles del triunfo en la prórroga. El Rey de España, Don Felipe VI, que estuvo en el estadio madrileño acompañado de la Reina Doña Letizia, entregó el tradicional trofeo al capitán del equipo de la Ciudad Condal.
El Sevilla llegó al Vicente Calderón con todo su poderío. Tras la brillante conquista de la quinta Copa de Europa, la tercera consecutiva con Emery, el equipo quería más y más. Y tenía que arrollar a los azulgranas. Bailar bien las sevillanas ante los hombres de Luis Enrique. Todos a una como en Fuenteovejuna. Presión, intensidad, fe, casta, coraje, responsabilidad y entrega al cien por cien. El Sevilla totalmente dispuesto a ganar esta nueva batalla. Un suma y sigue para ese lunes de apoteosis por las calles de la ciudad de la Giralda. Durante 90 minutos, los hombres de blanco fueron superiores, mandando en el terreno de juego, buscando el área azulgrana para sorprender a Stegen. El cuadro de Emery hizo sufrir al cuadro catalán. Pero en la prórroga, el Barcelona logró superar a los hombres de Emery, que con la expulsión de Banega perdió su buen nivel, su audacia y su fuerte energía.
DOMINIO Y CONTROL SEVILLISTA
A los cinco minutos del primer tiempo, Gameiro tuvo una gran oportunidad para batir a Stegen y marcar un gol en el portal azulgrana. Controló el Sevilla la situación ante un Barcelona que se defendía de los ataques del cuadro blanco. Piqué fue el hombre que solucionó los grandes problemas de su equipo ante un Sevilla que mantenía un ritmo bastante poderoso. A los 17 minutos fue Vitolo quien tuvo otra ocasión de gol para el cuadro de Nervión. La presión del equipo blanco fue constante y positiva, con un adecuado control para superar a un Barcelona sin rumbo. Los de Emery, muy superiores a los azulgranas, forzaron la máquina para llegar con posibilidades ante Stergen.
En el minuto 35 fue expulsado Mascherano. El defensa derribó violentamente a Gameiro cuando enfilaba el área con posibilidades de gol. El Barcelona se quedó con diez para seguir batallando ante un Sevilla que estaba en la cresta de la ola. La falta a Gameiro la lanzó Banega, pero Stegen desvió el balón a córner. Hasta el minuto 44 no llegó el Barcelona con claridad al área del Sevilla. En el lanzamiento de un saque de esquina, Piqué remató de cabeza un balón que se fue por encima del larguero de la portería defendida por Sergio Rico. A pesar de las ocasiones que tuvo el cuadro sevillano para golpear a los azulgranas, los primeros cuarenta y cinco minutos finalizaron con empate a cero.
EL SEVILLA MANTUVO SU BUEN RITMO EN EL SEGUNDO TIEMPO
Siguió el Sevilla mandando, controlando y creando ocasiones de gol en este segundo tiempo. El equipo de Emery, que desde el minuto 35 jugaba con un hombre más, intentó sacar provecho de esta superioridad numérica. Batalló con ambición en todo momento. A los 49 minutos hubo un remate de Banega que desvió Piqué, dando el balón finalmente en el poste. Sufría el Barcelona ante el acoso de los blancos de Nervión. Pero toda la fuerte ofensiva sevillista fue siempre controlada por la zaga azulgrana, donde destacaba la labor de Piqué. En el minuto 65 hubo una clara ocasión de gol para Krychowiak, pero el balón no quiso entrar en el portal del afortunado Stegen. El Sevilla, ya en la recta final de este segundo periodo, fue a por todas. Emery quitó a Mariano del campo y puso a Konoplyanka para darle más mordiente a la delantera. Pero el Sevilla no sabía cómo sacar fruto de su dominio y de sus ocasiones de gol. Tal vez faltaba frescura y más poder físico para poder encarrillar el triunfo que merecía.
A pesar de esa superioridad numérica, el equipo de Emery no logró dar el zarpazo adecuado ante Stergen. Y al final del tiempo reglamentario, en los minutos de descuento, fue expulsado Banega al derribar a Neymar cuando se iba solo hacia el marco de Sergio Rico. Como pasó con Mascherano, el argentino fue expulsado con la roja directa. El Sevilla, como el Barcelona, se quedó con diez hombres en el terreno de juego.
LOS GOLES LLEGARON EN LA PRÓRROGA
Se jugó la media hora de prórroga al terminar con ese cero-cero que de forma injusta campeaba en el marcador del Vicente Calderon. El Sevilla se había merecido mucho más. Tener amarrada esta final. A los siete minutos de este tiempo añadido llegó el primer gol del Barcelona. Messi colocó un balón adelantado a Jordi Alba. El defensa superó el marcaje de Vitolo y sorprendió a Sergio Rico para el 1-0.
El Sevilla siguió peleando bravamente. Pero le faltaba un hombre clave en la organización. Este era Banega, expulsado en el minuto 91. El equipo azulgrana jugó en este periodo con más intensidad. Despertaron Messi y Neymar --Suárez ya estaba fuera del campo por lesión desde el minuto 57--, y el Barcelona, bajo la batuta incansable de Iniesta, encontró el camino del gol. A los 105 minutos, Sergio Rico atajó un duro balón rematado por el exsevillista Alves. El juego en este periodo se endureció y Del Cerro Grande comenzó a sacar excesivas tarjetas al cuadro de Emery. A los 117 minutos, otra vez Sergio Rico se lució en un remate de Neymar, muy suelto en la prórroga, cuando recibió un balón colocado por Iniesta, que fue el jugador estrella del partido.
A los 120 minutos, el Sevilla, con los nervios, se quedó en el terreno de juego con nueve hombres. Carriço fue expulsado por doble amarilla. La superioridad azulgrana en estos minutos finales del encuentro fue grande. Nunca se rindió el Sevilla. Peleó con mucha casta y con mucho orgullo. Pero el Barcelona logró aumentar su ventaja. Jugada de Messi en el minuto 122 y remate de Neymar para el 2-0. Y ahí acabó todo. Un gran Sevilla, un poderoso Sevilla que había tenido contra las cuerdas a todo un campeón de Liga 2015-/16, acabó perdiendo de forma injusta esta final de la Copa del Rey. Pero los 20.000 seguidores blancos que estaban en las gradas del Vicente Calderón y que animaron de forma continua a su equipo, finalizaron gritando con fuerza a su equipo ¡Campeones! ¡Campeones!
Agradecían de esta forma al equipo de sus amores su entrega y su ambición, porque el Sevilla estuvo muy cerca de alcanzar el doblete tras el espectacular triunfo en la final Europa League en Basilea. Habrá otro duelo entre el Sevilla y el Barcelona en la Supercopa de España. Habrá una gran oportunidad para la revancha y poder derribar al cuadro azulgrana.
FICHA DEL PARTIDO:
Fútbol Club Barcelona: Ter Stegen; Alves, Piqué, Mascherano, Alba; Busquets, Rakitic (Mathieu, minuto 46), Iniesta; Messi, Neymar y Luis Suárez (Rafinha, minuto 56).
Sevilla Fútbol Club: Sergio Rico; Mariano (Konoplyanka, minuto 78), Rami, Carriço, Escudero, Krychowiak, Iborra (Llorente, minuto 105); Coke, Banega, Vitolo, y Gameiro.
Goles.
1-0, minuto 97, Jordi Alba; 2-0, minuto 122, Neymar.
Árbitro:
Del Cerro Grande, del colegio madrileño. Expulsó con roja directa a Mascherano (minuto, 35) y Banega (minuto, 91), y por doble cartulina a Carriço (minuto, 120). Mostró amarillas Ramí, Vitolo, Jordi Alba, Iniesta, Alves, Iborra, Konoplyanka, Escudero y Gameiro.
Incidencias.
Lleno total en el Vicente Calderón para contemplar el partido de la final de la Copa del Rey de la temporada 2015-16. Asistieron más de 20.000 seguidores sevillistas, que animaron de forma constante al equipo. Asistieron al encuentro los Reyes de España, Don Felipe VI y Doña Letizia. El monarca entregó la Copa al triunfador del partido. Estuvieron presentes en este choque deportivo la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, y el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, entre otras autoridades nacionales, regionales y representaciones. (Fotos: CR y SFC).
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