El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, junto al consejero delegado de Emasesa, Jaime Palop, la delegada del distrito Norte, Myriam Díaz, y el concejal David Guevara ha anunciado hoy el inicio de la redacción de los estudios y de los proyectos necesarios para dejar sin actividad la estación depuradora de San Jerónimo a través de una reestructuración de las estaciones depuradoras existentes en la red de Emasesa. El objetivo es que este proceso, que se va a llevar a cabo de forma paulatina, esté culminado antes de 2019.
La EDAR de San Jerónimo inició su actividad con una primera fase, ya sin uso, en 1984 y con una segunda fase que es la que está en estos momentos en funcionamiento a partir de 1992. Durante los últimos años se ha planteado en repetidas ocasiones su desmantelamiento, cuestión que llegó a estar incluso tramitada y adjudicada en el año 2011 a través de una operación de traslado y construcción de otras instalaciones.
“Tras cinco años de parón es el momento de retomar una medida necesaria porque la vida útil de esta estación ha llegado a su fin. Su funcionamiento es correcto pero se han producido una serie de modificaciones en la normativa y la declaración de zona sensible de este cauce que obligan a tomar una decisión entre dos opciones: realizar una importante inversión en la estación para adaptarla o cerrarla y buscar otras alternativas. Nuestra decisión es la segunda, cumpliendo así nuestro compromiso electoral”, explicó el alcalde de Sevilla.
En este sentido, anunció que este procedimiento se va a realizar a través de una medida distinta a la diseñada hace cinco años. “En estos momentos no planteamos la construcción de otra depuradora. Tras los estudios y trabajos iniciales, vamos a avanzar en el proceso para reestructurar las aguas residuales que son tratadas en esta estación entre el resto de equipamientos de la red de forma que la EDAR de San Jerónimo quede sin actividad”, explicó Juan Espadas, quien subrayó que se trata además de una demanda vecinal desde hace muchos años debido a la proximidad de las viviendas a la estación.
En los últimos años se han venido tomando medidas para reducir molestias como los olores entre la población como programas de desolorización, acciones de insonorización, una pantalla vegetal o servicios de atención y respuesta rápida a los vecinos y vecinas. No obstante, el desarrollo urbanístico de San Jerónimo provoca que la estación esté en las proximidades de núcleos residenciales.
Para realizar la reestructuración anunciada será necesaria una inversión, menor que en el caso de la construcción de un nuevo equipamiento, para la que se pretende diseñar un marco de colaboración entre administraciones con la Junta de Andalucía y el Gobierno central. Este proyecto será de hecho abordado en una próxima reunión con el Ministerio Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente.
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