A partir de las cinco de la tarde de este sábado 5 de noviembre se ha celebrado en la Catedral de Sevilla la misa estacional del Jubileo de las Hermandades y Cofradías de la Archidiócesis con motivo del Año de la Misericordia.
Este pontifical fue presidido por la imagen de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, que el pasado jueves fue trasladado desde la Basílica de la Hermandad en la Plaza de San Lorenzo hasta el templo metropolitano.
La misa en el Altar del Jubileo del templo hispalense fue oficiada por el arzobispo de la Archidiócesis de Sevilla, monseñor Juan José Asenjo, concelebrada con el obispo auxiliar monseñor Santiago Gómez Sierra.
En la ceremonia jubilar han estado presentes el nuevo ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido; la subdelegada del Gobierno en Andalucía, Felisa Panadero, y el delegado de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Carlos Cabrera; el presidente del Consejo de Cofradías de Sevilla, Joaquín Sainz de la Maza, entre otras autoridades y representaciones.
(El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, no asistió porque se encuentra en Londres con motivo de los actos de presentación de la exposición de Murillo y Velázquez que tendrá lugar en nuestra ciudad).
HOMILÍA DEL ARZOBISPO DE SEVILLA
El arzobispo de Sevilla, que en su homilía realizó una llamada al compromiso de los cofrades para que sean orantes, comprometidos santos y misericordiosos, dijo que “El Jubileo nos invita a salir de la tibieza, la mediocridad y el aburguesamiento espiritual, y a restaurar la soberanía de Dios en nuestra vida, porque admitir la primacía de Dios es plenitud de sentido y de alegría para la existencia humana, porque el hombre ha sido hecho para Dios y su corazón estará inquieto hasta que descanse en Él”
Asimismo, el prelado hispalense afirmó: “Si de algo podéis estar ciertos en esta tarde, es que la ayuda de Dios nunca os va a faltar. Él es el Señor del Gran Poder, pero es al mismo tiempo el Dios fiel, el Dios compasivo y misericordioso, que nos mira con ternura. Contad también con la ayuda de la madre Iglesia, que nos sostiene y acompaña en nuestro camino de fe. Ante quienes os apunten con el dedo por ser cofrades, por acudir a Misa los domingos, por confesar y comulgar con frecuencia, o por llevar a vuestros hijos a la catequesis, en definitiva, por ser hijos de la Iglesia, sentíos orgullosos de pertenecer a ella, pues si es verdad que en ella hay manchas y arrugas por los pecados de sus miembros, tened por cierto que la luz es infinitamente más intensa que las sombras y que el heroísmo de tantos hermanos y hermanas nuestros es mucho más fuerte que nuestro pecado, nuestra cobardía y nuestra mediocridad”
Finalmente dijo monseñor Asenjo que “Tampoco os va a faltar la ayuda maternal de Santa María, venerada en vuestras Hermandades con los más hermosos títulos. Que ella, reina y madre de misericordia, como la invocamos en la Salve, nos aliente en nuestra conversión y nos conceda gozar de la alegría que es consustancial a la gracia jubilar”.
MARCHAS COFRADIERAS EN LA MISA JUBILAR
La misa en el Altar del Jubileo del templo hispalense fue oficiada por el arzobispo de la Archidiócesis de Sevilla, monseñor Juan José Asenjo, concelebrada con el obispo auxiliar monseñor Santiago Gómez Sierra.
En la ceremonia jubilar han estado presentes el nuevo ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido; la subdelegada del Gobierno en Andalucía, Felisa Panadero, y el delegado de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Carlos Cabrera; el presidente del Consejo de Cofradías de Sevilla, Joaquín Sainz de la Maza, entre otras autoridades y representaciones.
(El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, no asistió porque se encuentra en Londres con motivo de los actos de presentación de la exposición de Murillo y Velázquez que tendrá lugar en nuestra ciudad).
HOMILÍA DEL ARZOBISPO DE SEVILLA
El arzobispo de Sevilla, que en su homilía realizó una llamada al compromiso de los cofrades para que sean orantes, comprometidos santos y misericordiosos, dijo que “El Jubileo nos invita a salir de la tibieza, la mediocridad y el aburguesamiento espiritual, y a restaurar la soberanía de Dios en nuestra vida, porque admitir la primacía de Dios es plenitud de sentido y de alegría para la existencia humana, porque el hombre ha sido hecho para Dios y su corazón estará inquieto hasta que descanse en Él”
Asimismo, el prelado hispalense afirmó: “Si de algo podéis estar ciertos en esta tarde, es que la ayuda de Dios nunca os va a faltar. Él es el Señor del Gran Poder, pero es al mismo tiempo el Dios fiel, el Dios compasivo y misericordioso, que nos mira con ternura. Contad también con la ayuda de la madre Iglesia, que nos sostiene y acompaña en nuestro camino de fe. Ante quienes os apunten con el dedo por ser cofrades, por acudir a Misa los domingos, por confesar y comulgar con frecuencia, o por llevar a vuestros hijos a la catequesis, en definitiva, por ser hijos de la Iglesia, sentíos orgullosos de pertenecer a ella, pues si es verdad que en ella hay manchas y arrugas por los pecados de sus miembros, tened por cierto que la luz es infinitamente más intensa que las sombras y que el heroísmo de tantos hermanos y hermanas nuestros es mucho más fuerte que nuestro pecado, nuestra cobardía y nuestra mediocridad”
Finalmente dijo monseñor Asenjo que “Tampoco os va a faltar la ayuda maternal de Santa María, venerada en vuestras Hermandades con los más hermosos títulos. Que ella, reina y madre de misericordia, como la invocamos en la Salve, nos aliente en nuestra conversión y nos conceda gozar de la alegría que es consustancial a la gracia jubilar”.
Han asistido a este acto un total de 560 hermandades y cofradías de la provincia. También se concentraron en las naves de la Catedral sevillana miles de cofrades y de fieles. En este pontifical intervino la Coral Polifónica de la Catedral hispalense, que antes del inicio de la celebración del pontifical interpretó desde el órgano marchas procesionales "Nuestro Padre Jesús", "Jesús de las Penas" e "Ione".
Finalmente, con la interpretación de la marcha "Coronación de la Macarena", realizada por el padre José Enrique Ayarra finalizó la solemne Misa del Jubileo de las Hermandades. (Fotos: AS).
Finalmente, con la interpretación de la marcha "Coronación de la Macarena", realizada por el padre José Enrique Ayarra finalizó la solemne Misa del Jubileo de las Hermandades. (Fotos: AS).
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