Se jugó entre el viernes 21 y el domingo 23 de octubre la novena jornada de la Liga Santander. El Real Betis fue el primero en jugar.
Lo hizo en el Estadio de El Sadar de Pamplona y logró dar un buen zarpazo al Club Atlético Osasuna. Los verdiblancos, con goles del capitán Joaquín y de Felipe Gutierrez --con zapatazo desde más de 30 metros en el minuto 91--, lograron una interesante y necesaria vitoria para poder superar la mala racha y salir del atolladero, con un Poyet, el técnico del equipo de Heliópolis, que estaba muy cuestionada.
Por su parte, el Sevilla, que se enfrentó el domingo al Atlético de Madrid en el Sánchez Pizjuán, logró ganar al cuadro de Cholo Simeone por uno a cero. NZonzi fue el autor de un tanto que vale muchos quilates. El Sevilla, hasta que no finalizó el encuentro entre el Real Madrid y el Athletic de Bilbao en Bernabéu, estuvo a la cabeza de la clasificación del torneo de la regularidad. El gol del madridista Morata, marcado en el minuto 83, colocó en la segunda posición a los sevillistas. Pero la nave del equipo de Nervión va muy firme y a toda vela. BUENA VICTORIA BÉTICA EN PAMPLONA
Poyet puso salvar los muebles en Pamplona. El técnico verdiblanco, muy pitado y cuestionado por los últimos resultados --fue goleado en el Villamarín por el Madrid con un contundente 1-6--, llevó a cabo ligeros cambios para poder dar un golpe de efectos en El Sadar. Sorprendió que el goleador del equipo, Rubén Castro, se quedara en el banquillo. Pero el cuadro bético ofreció ante el Club Atlético Osasuna otra imagen. El trabajo de Petros y, especialmente, del veterano Joaquín, fue fundamental para alcanzar la meta deseada. El del Puerto de San María marcó con un gran gol, realizando un habilidoso remate a la salida del portero osasunista. De momento, en esa jugada, el Betis cobró mucha fuerza y mucha moral y el equipo verdiblanco alcanzó un gran nivel de juego. Aunque el cuadro de Pamplona empató al comenzar la segunda parte, el Betis, con el gol de Felipe Gutiérrez, logró el 1-2. Fue el gol de una victoria deseada. Llegó este tanto en el minuto 91, con un zapatazo del delantero bético desde más de 30 metros. Pero fue una victoria que aparca, de momento, las dudas y los temores. Poyet, naturalmente, tiene que buscar fórmulas más justas y adecuadas para que el Betis no tenga que sufrir tanto. La afición verdiblanca, que siempre está con el equipo y para el equipo y quiere que los hombres que defienden los colores del club se centren y que bajo una buena dirección desarrollen ese fútbol eficaz y positivo que todos esperan. En Pamplona se supo superar el bache en el tiempo de descuento. Pero la Liga es larga y Poyet tiene el gran compromiso de buscar el camino de la felicidad para los béticos.
EL SEVILLA FUE LÍDER HASTA EL GOL DEL MADRIDISTA MORATA
Nervión, el Ramón Sánchez Pizjuán, es un fortín. Un terreno inexpugnable. El Sevilla de Sampaoli realizó ante el Atlético de Madrid un fenomenal partido. Sobre todo, el fútbol de los blancos en la segunda parte fue espectacular. El invicto equipo colchonero de Simeone pudo ser goleado. Además del buen gol de NZonzi, tanto Nasri, que remató al palo, como Vitolo, pudieron ampliar la cuenta a favor de los sevillistas.
La primera parte estuvo muy igualada porque los dos equipos jugaron con muchas precauciones. En este periodo de juego asustó algo más el once de Simeone. Pero en la segunda parte --la fe mueve montañas--, el Sevilla hizo un fútbol de mucha calidad. Dominador en todas las parcelas, seguro en defensa, creativo en el centro del campo y peligroso y rematador en ataque, el Atlético se vio impotente para frenar el gran ímpetu del equipo de Sampaoli.
Aunque el gol de la victoria del cuadro de Nervión lo ejecutó NZonzi, al recibir un balón de Vietto, el Sevilla pudo golear a los colchoneros. Antes del tanto del francés, Nasri lanzó un balón que dio en la madera. Asimismo, Vitolo remató ante Oblak, que despejó el balón con dificultades. La lluvia de goles pudo llegar como la que estaba cayendo sobre el terreno de juego. Pero todo quedó, para fortuna del Atlético de Madrid que llegó como líder del torneo, en ese merecido 1-0 para el Sevilla.
El equipo de Nervión realizó en la segunda parte del encuentro un gran partido. Luchó con enorme intensidad, superado a los colchoneros que no pudieron controlar el juego y el dominio de los blancos. Hasta que no acabó el partido del Bernabéu entre el Real Madrid y el Athletic de Bilbao --Morata marcó el 2-1 en el minuto 83--, el Sevilla, con su buen resultado ante el Atlético de Madrid, era el líder de la Liga de Santander.
El Sevilla, de momento, está el segundo en la tabla. Y el equipo blanco de Nerión mira muy alto porque hay en la plantilla garra, compromiso, fe y pasión.
FERNANDO GELÁN.-
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