lunes, 8 de diciembre de 2014

LIGA ADELANTE.- El Betis reacciona en la segunda parte y con el gol de Rennella logra tres valiosos puntos ante el Mallorca en el Benito Villamarín para seguir el camino del ascenso a Primera (1-0)


LIGA ADELANTE.- 

En el Estadio Benito Villamarín se celebró el partido correspondiente a la 16ª jornada de la Liga Adelante entre el Real Betis Balompié y el Real Club Deportivo Mallorca. El encuentro finalizó con el resultado de uno a cero (1-0) a favor del equipo verdiblanco. Mucho trabajito le ha costado el cuadro que transitoriamente dirige Juan Merino para ganar a un Mallorca que dio más lata de la esperada. El Betis realizó un horrible primer tiempo. En este periodo, el once visitante, que dirige Valeri Karpin, fue quien dominó el juego, porque los verdiblancos estaban fundidos, desinflados y descontrolados. Pero el equipo de Heliópolis reaccionó en la segunda parte para demostrar sobre el terreno de juego más deseo y más ganas que su rival. La entrada al campo de Dani Ceballos fue fundamental para el crecimiento futbolístico de los verdiblancos en la segunda parte. Creó más acciones de peligro, controló mejor el centro del campo y batalló con fuerza en la retaguardia. En una magnífica contra del Betis, con lanzamiento del balón de Kadir a Rubén Castro, llegó el gol de la victoria que vale unos tres puntos de oro. El canario llegó con muchas posibilidades de remate peligroso ante el meta Cabrero y lanzó un zarpazo impresionante para coronar de forma brillante la jugada. Pero el portero balear rechazó el balón, que afortunadamente fue rematado por Rennella, que había corrido hasta el área para fortalecer este mortal contragolpe. Un 1-0 muy trabajado, pero merecido. Porque en esta segunda parte, el Betis tuvo muchas más ocasiones para aumentar la ventaja, aunque el Mallorca jamás se rindió y hasta pudo empatar en una jugada en la que Adán y Jordi Figueras salvaron la dramática situación. El Betis con Merino en la liga Adelante ha logrado seis puntos de seis y está ese quinto puesto de la tabla para seguir con muchos altos vuelos hacia el ascenso directo a la División de Honor.        

Tras la irregular actuación del Betis en el partido de la Copa del Rey, jugado días pasados en el estadio de Heliópolis ante el Almería, donde hubo reacción final para poder maquillar la hecatombe deportiva, el Betis, aún bajo la dirección de Juan Merino, volvía este lunes de la Inmaculada a la competición de la regularidad de la Liga Adelante. Se presentaba, por tanto, la ocasión de ofrecer una mejor imagen y lograr, al menos, un positivo resultado frente al Mallorca. El técnico verdiblanco deseaba, al menos, el poder ofrecer las buenas sensaciones de Palamós ante el Llagostera y en cuyo encuentro se agarró una victoria muy importante.
Sobre el papel, el Betis tenía y tiene una mejor situación que el equipo mallorquín en la Liga Adelante. Los verdiblancos se colocaron en el quinto puesto de la clasificación, a cinco puntos del ascenso, y el equipo de la ciudad de las famosas ensaimadas está en el puesto 14, a tres puntos del descenso. Por tanto, el técnico transitorio en el club bético tenía la obligación de ordenar claramente un zafarrancho de combate para ganar al Mallorca y romper con los altibajos y los malos mengues.  

UN BETIS SIN IDEAS PARA CREAR PELIGRO
En el primer periodo de juego, el fútbol de los verdiblancos fue desesperadamente malo. Los futbolistas béticos deambularon por el campo sin ton ni son, provocando, lógicamente, las protestas de los aficionados. Fue el Mallorca de Valeri Karpin el equipo que más dominó el juego, controlando la pelota y creando las acciones más peligrosas con el fin de sorprender al guardameta Adán. En estos primeros cuarenta y cinco minutos ni la presencia del goleador Rubén Castro hizo tambalear los cimientos defensivos del cuadro balear. El Mallorca se defendió con orden y siempre supo atajar cualquier intento ofensivo de los locales. En este primer tiempo, el Betis estuvo muy descoordinado sobre el terreno de juego y con una falta de ideas claras para poder superar la situación. Sin mando, sin control y sin una actitud adecuada, el cuadro del Villamarín se perdía en un mar de confusiones ante un Mallorca que luchó con mucha fe y constancia para tener las riendas del partido. Salvo un lanzamiento desde lejos de Molinero, el Betis apenas inquietó al meta Cabrero. Sin embargo, Adán tuvo que intervenir en varias ocasiones para poder evitar sorpresas inesperadas. Menos mal que los remates del Mallorca eran tan blanditos como las famosas ensaimadas de la tierra balear. .      

REACCIÓN BÉTICA Y CON DE RENNELLA
Todo cambió en la segunda parte. Merino le tuvo que leer la cartilla a sus hombres en el vestuario, porque los jugadores verdiblancos comenzaron a jugar en este periodo con más ardor y más deseos. Superó el cuadro bético la frialdad y la mandanga del primer tiempo y se puso a realizar una adecuada y efectiva labor para ganar si o si este encuentro frente a los hombres de Karpin. Fue fundamental en esta transformación verdiblanca la salida de Dani Ceballos por Cejudo. Desde la entrada de este futbolista llegó la esperada transformación. El centro del campo ya era controlado por el Betis y mandaba con más firmeza sobre el terreno de juego.
Ante la codicia, la fuera de voluntad, la entrega y el espíritu de lucha de los béticos llegó a los 55 minutos de juego el gol de Rennella, el gol que significaría a la larga y al final del choque, el tanto de la victoria para sumar tres puntos más en esta dura Liga Adelante. La jugada se inició tras un saque de esquina del Mallorca. El balón despejado por la defensa bética llegó hasta Kadir, que desde el centro del campo mallorquín lanzó a tumba abierta a Rubén Castro. El canario, con velocidad, temple y garra, llegó hasta el área visitante para lanzar un duro remate al marco de Cabrero. Pero el portero balear rechazó el balón, que quedó en poder de Rennella, que había corrido la tira para participar, si era preciso, en esta contra. Y su remate fue prodigioso porque el balón llegó al fondo de la portería del Mallorca. Pedazo de jugada y oportunísimo remate de Rennella. Era el 1-0. Podía bastar, pero aún quedada un mundo por delante. Sin embargo, fue siempre el Betis quien siguió con su línea mortal para intentar sumar nuevos goles a su favor. Hasta Jordi Figueras, en el minuto 60, pudo sorprender a Cabrero al lanzar un pícaro balón al marco balear. También Kadir, en el 69, tuvo otra oportunidad de gol. Pero la más clara ocasión fue para NDiaye, en el minuto 82, que salvó sorprendentemente Cabrero, cuando se cantaba el gol en las gradas. Aunque el Betis era el equipo con más poder sobre la yerba, el Mallorca siguió luchando para romper el marcador de los béticos. Y los hombres de Karpin dieron el susto en el minuto 89. Menos mal que Adán tuvo una mano prodigiosa y que Jordi Figueras estaba atento a la jugada en la misma línea de gol de la portería bética. Tras el susto, el Betis controló el partido hasta el final del tiempo reglamentario.
Afortunadamente, el Betis reaccionó a tiempo tras la mala imagen de la primera parte. En la segunda mitad del partido, los hombres de Juan Merino demostraron que hay garra y ambición para no pasarlas tan canutas. Un magnífico triunfo para que ese futuro de gloria que desean todos los aficionados vediblancos.    

FICHA DEL PARTIDO:
Real Betis: Adán; Molinero, Jordi, Bruno, Varela; Kadir (Piccini, minuto, 86), Xavi Torres, N'Diaye, Cejudo (Dani Ceballos, minuto, 48); Rennella (Jorge Molina, minuto, 75) y Rubén Castro.
RCD. Mallorca: Cabrero; Cendrós, Kasim, Bigas, Gulan; Arana (Markovic, minuto, 86), João, Bustos (Javi Ros, minuto, 67), Pereira; Marco Asensio y Abdón (Scepovic, minuto, 61).
Gol:
1-0: minuto 55, Rennella. .
Árbitro: 
Valdés Aller (Colegio Castellano-Leonés). Mostró cartulinas amarillas al jugador del Betis, Molinero (minuto, 78), y los del Mallorca, Pereira (minuto, 43), Bigas (minuto, 70), Pau Cendrós (minuto, 76), y Arana (minuto, 84).
Incidencias: 
Se jugó en el Villamarín el partido correspondiente a la 16ª jornada de la Liga Adelante entre el Betis y el Mallorca. Antes del partido se rindió un emotivo y espectacular homenaje al delantero del Betis, Rubén Castro. El jugador canario ha logrado pasar a la historia del club verdiblanco por lograr, con sus 95 goles, ser el máximo goleador de la entidad de Heliópolis por delante de Domínguez, Rincón, Rogelio y Alfonso. En los vídeo marcadores del estadio se proyectaron jugadas y goles de Rubén Castro, con la entrega de una camiseta de recuerdo por este récord y en las gradas del estadio se mostraron pancartas en las que se recogía el nombre de Rubén Castro como jugador leyenda. Asistieron al encuentro más de 25.000 espectadores. Tarde fría y despejada. (Foto: RBB).

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