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* “Es muy injusto que la empresa para la que has trabajado toda la vida te la rompa de esta manera” ha destacado Távora.
Pilar Távora (PA), acompañada de algunos militantes andalucistas de la capital, así como de la Vicesecretaria General del PA, Marta Mejías, y del Secretario General de Juventudes Andalucista, Francisco Benítez, estuvieron acompañando al grupo de trabajadores del Horno San Buenaventura despedidos el último año, que lleva 35 días manifestándose en la puerta del establecimiento que tiene la empresa en la Avenida de la Constitución de la capital andaluza. En total, la sección de hostelería de la empresa ha despedido a 11 trabajadores, y alrededor de 70 del departamento de confitería, panadería y transporte.
Según los afectados, la empresa Horno San Buenaventura y Tiendas San Buenaventura adeuda con los despedidos una media de 4 pagas extras y su liquidación, el salario de dos meses, los atrasos del IPC de 3 años, y en todos los casos, el finiquito. Además añaden que sus compañeros que conservan el puesto de trabajo no han cobrado la última paga extra.
La candidata andalucista ha expresado su “indignación” ante situaciones tan sangrante como esta. Távora ha dicho que “no tiene ni pies ni cabeza que esta gente esté viviendo una situación kafkiana después de años de entrega y trabajo para esta empresa, sin que esta se preste si quiera a reunirse con ellos en busca de una solución. Los despedidos ya han expresado su voluntad de negociar los pagos, pero ni por esas”. Además, Távora ha añadido que “hay historias muy crudas entre los despedidos, como la Mª Jose, que después de 39 años trabajando para Horno San Buenaventura se ve en la calle, o la de David, que tras 15 años en la empresa, sin contar con el dinero que le deben y le corresponde, se ve en la calle con dos hijos de 11, uno con hidrocefalia y otro con hemiplejia, esta última una complicada y costosa enfermedad cuyo tratamiento, imprescindible a esta edad para evitar secuelas futuras, sus padres no pueden seguir pagando. Es para llorar”.
Finalmente, Pilar Távora ha instado a “todos los grupos municipales en el Ayuntamiento a que se sumen al PA y respalden a estos trabajadores a los que les están desahuciando la vida, y que hagan lo posible lo que esté en su mano para ayudar a estos ciudadanos, al menos, a cobrar lo que es suyo”.
Pilar Távora (PA), acompañada de algunos militantes andalucistas de la capital, así como de la Vicesecretaria General del PA, Marta Mejías, y del Secretario General de Juventudes Andalucista, Francisco Benítez, estuvieron acompañando al grupo de trabajadores del Horno San Buenaventura despedidos el último año, que lleva 35 días manifestándose en la puerta del establecimiento que tiene la empresa en la Avenida de la Constitución de la capital andaluza. En total, la sección de hostelería de la empresa ha despedido a 11 trabajadores, y alrededor de 70 del departamento de confitería, panadería y transporte.
Según los afectados, la empresa Horno San Buenaventura y Tiendas San Buenaventura adeuda con los despedidos una media de 4 pagas extras y su liquidación, el salario de dos meses, los atrasos del IPC de 3 años, y en todos los casos, el finiquito. Además añaden que sus compañeros que conservan el puesto de trabajo no han cobrado la última paga extra.
La candidata andalucista ha expresado su “indignación” ante situaciones tan sangrante como esta. Távora ha dicho que “no tiene ni pies ni cabeza que esta gente esté viviendo una situación kafkiana después de años de entrega y trabajo para esta empresa, sin que esta se preste si quiera a reunirse con ellos en busca de una solución. Los despedidos ya han expresado su voluntad de negociar los pagos, pero ni por esas”. Además, Távora ha añadido que “hay historias muy crudas entre los despedidos, como la Mª Jose, que después de 39 años trabajando para Horno San Buenaventura se ve en la calle, o la de David, que tras 15 años en la empresa, sin contar con el dinero que le deben y le corresponde, se ve en la calle con dos hijos de 11, uno con hidrocefalia y otro con hemiplejia, esta última una complicada y costosa enfermedad cuyo tratamiento, imprescindible a esta edad para evitar secuelas futuras, sus padres no pueden seguir pagando. Es para llorar”.
Finalmente, Pilar Távora ha instado a “todos los grupos municipales en el Ayuntamiento a que se sumen al PA y respalden a estos trabajadores a los que les están desahuciando la vida, y que hagan lo posible lo que esté en su mano para ayudar a estos ciudadanos, al menos, a cobrar lo que es suyo”.
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