El cuadro que prepara Pablo Machín tiene mucha fortaleza en Nervión y en casa está superando los duros golpes que recibe como visitante.
En la pasada jornada de los octavos de final de la Copa del Rey, el equipo sevillista fue duramente goleado por el FC Barcelona en el partido de vuelta, recibiendo en el Camp Nou nada menos que seis goles.
Para nada sirvieron los dos goles de ventaja que marcó el cuadro blanco en el Ramón Sánchez Pizjuán en el primer partido de esta jornada copera.
El Sevilla mantiene una buena clasificación en la Liga con los resultados que ha logrado en su propio terreno. Sin embargo, en estas últimas jornadas, el equipo de Machín no ha podido continuar su buen ritmo para poder derribar a sus rivales. En los últimos seis encuentros del torneo de la regularidad, el Sevilla solo pudo golear en casa al Levante por cinco a cero, perdiendo fuera ante el Celta, Real Madrid y Athlétic de Bilbao, y empatando ante el Atlético de Madrid en casa y ante el Leganés en Butarque.
Asimismo, tras el duro golpe recibido en el torneo del KO ante el cuadro de Ernesto Valverde, el Sevilla, además tener la obligación de golpear este domingo al Eibar para continuar en zona Champions, en la próxima semana jugará en Roma, ante la Lazio, el encuentro de ida de los dieciseisavos de final de la Liga Europa con el fin de poder mantener todas sus máximas aspiraciones en este torneo.
Pero este domingo en Nervión, el Sevilla afrontaba un partido fundamental para seguir entre los cuatro mejores de la Liga española.
En este duelo frente al Eibar en el Sánchez Pizjuán, el cuadro que dirige Pablo Machín no realizó un buen partido. El cuadro vasco fue más efectivo en su juego, realizando un buen control para dominar la situación en todos los terrenos. El Sevilla encontró muchas dificultades ante los hombres de Mendilibar que realizaron una efectiva primera parte. Fruto a este intenso trabajo llegó en la primera parte el gol de Orellana para sembrar el pánico en el Sánchez Pizjuán. Cuando parecía que el Sevilla iba a reaccionar en la segunda parte, logrando dominar la situación en algunos momentos de este periodo, el Eibar volvió a marcar con gol de Charles para poner el 0-2 en el marcador. El descontento en las gradas del coliseo de Nervión fue total.
Los hombres de Machín no encontraban la forma de darle una mejorar con urgencia la situación. Con los cambios que hizo el técnico, con el deseo de que todo diera un vuelco a favor del Sevilla, el cuadro de Nervión puso toda la carne en el asador, peleó de forma titánica, y encontró fruto a sus deseos y ambiciones.
Aunque el colegiado expulsó a Banega por doble amarilla en el minuto 84, el Sevilla, a pesar de jugar con diez, luchó con ambición y en la recta final de los trepidantes momentos del duelo pudo empatar. Marcó el 1-2 a los 88 minutos Ben Yedder. Posteriormente, el VAR ratificó un tanto anulado por el colegiado al Eibar por fuera de juego. Como el choque se alargó por el tiempo perdido, el Sevilla, en el tiempo de descuento, en el minuto 90+2 encontró el tanto del empate. Al final hubo reparto de puntos en el Sánchez Pizjuán. Los de Mendilibar no se lo podían creer cuando el árbitro pitó el final del encuentro. Los jugadores del Sevilla se abrazaron porque habían ganado un punto en un épico final para seguir en clasificación para jugar la Champions League.
El partido finalizó con el resultado de dos a dos --2-2--. Marcaron los goles por el Sevilla FC: Ben Yedder (minuto 88) y Sarabia (minuto 90+2). Por el Eibar: Orellana (minuto 22), y Charles (minuto 63).
GOL DEL EIBAR Y PITADA DE LA AFICIÓN AL SEVILLA
Aunque Sarabia, a los tres minutos, estuvo a punto de batir a Riesgo, el Eibar puso en marcha su férrea táctica con una fuerte presión y un fútbol dominante para llevar a cabo acciones ofensivas hacia el área del cuadro de Machín y probar el remate ante Vaclik.
Con este fútbol total, el equipo vasco llegó a forzar hasta cuatro saques de esquinas de forma continuada. Los aficionados del Sevilla protestaron el juego de su equipo que estaba falto de lucidez y de mordiente. Ni el entrenador ni el equipo eran capaces de impulsar el fútbol que era necesario para poder superar la atosigante presión del equipo de Mendilibar, que, además, tuvo su premio con el gol de Orellana. A los 22 minutos, el delantero del equipo vasco, en una acción ofensiva, superó a la defensa local, recortando las entradas de Kjaer y de Carriço para batir a Vaclik y poner el 0-1 en el marcador del Sánchez Pizjuán.
El Sevilla, ante este negro panorama, tenía que dar un giro importante a la complicada situación si el objetivo, de momento, era encontrar el gol del empate.
Pero el Eibar se defendió bien, controlando con efectividad el centro del campo y su retaguardia y, además, organizando sus contras para poder aumentar su ventaja.
A los 30 minutos, el Sevilla encontró una ocasión para batir a riesgo. Escudero probó fortuna en una contra de los de Nervión, pero el balón no encontró el fondo de las redes de la meta defendida por Riesgo.
En los intentos que el cuadro de Machín realizó en la recta final de esta primera parte, a los 40 minutos, el guardameta del Eibar salvó un balón de gol a los pies de Ben Yedder, que no pudo culminar la buena faena ofensiva del Sevilla.
Con este 0-1 finalizó el primer periodo del partido. Los aficionados del cuadro de Nervión siguieron mostrando su disconformidad por el juego que desarrolló su equipo durante estos cuarenta y cinco minutos.
EL SEVILLA, CON GOL DE SARABIA, LOGRÓ EMPATAR EN EL TIEMPO DE DESCUENTO
Parecía que el cuadro que dirige Pablo Machín iba a coger otro ritmo para poder trabajar a fondo y llegar con más continuidad al área del Eibar y poder rematar a gol y abrir la cuenta a su favor. Hubo unos minutos en los que el Eibar sufrió ante los buenos deseos de los blancos para remontar la situación.
Pero no llegó el premio deseado y fue nuevamente el cuadro vasco quien marcó para aumentar su ventaja.
A los 63 minutos, en el lanzamiento de un saque de esquina sobre la puerta de Vaclik, Arbilla le puso un balón de oro a su compañero Chales, que de cabeza logró batir al meta sevillista.
El cuadro de Mendilibar se colocaba con un 0-2 a su favor, formando el desconcierto en las filas sevillistas y el descontento en las gradas del Sánchez Pizjuán. Además, el colegiado mostró la roja --segunda amarilla--, a Banega, que tuvo que abandonar el terreno de juego. A los 84 minutos, el Sevilla se quedó con diez hombres en el terreno de juego. Pero esta complicada situación la superó el cuadro de Nervión con enorme entrega y con una lucha titánica. A los los 83 minutos, con larga consulta al VAR, fue anulado un gol al Eibar, marcado por Kike García. Se apreció fuera de juego.
El Sevilla fue a por todas en esta recta final. Y fue superando todos los obstáculos y marcando un fuerte y trepidante ritmo de acción y de remate. Y como premio a la constancia llegó el gol de Ben Yedder, marcado a los 88 minutos de juego. El Sevilla acortaba distancias. Y esta recta final, con seis minutos de descuento, fue vibrante. Un solo equipo mandaba en el terreno de juego. Y este era el de Nervión.
Le entró las prisas al cuadro blanco y encontró premio al esfuerzo final. A los 90+2 llegó el empate a dos, fabricado por Promes y con un remate de Sarabia que mandó el balón fuera del alcance de Riesgo. Fue el 2-2. En la grada, los seguidores blancos celebraban este tanto. Al menos, tras una mala primera parte del Sevilla, en esa recta final del partido, los de Machín pudieron salvar los muebles con los goles de Ben Yedder y Sarabia.
El deseo de los sevillistas es que la crisis no afecte a los partidos en el Sánchez Pizjuán. Este empate, logrado con enorme esfuerzo en los momentos en los que se consumía el tiempo de juego, ha sido un buen premio. No valía perder. Salvó un punto en esa bendita prolongación. Y un punto es un punto. Sobre todo cuando se ha logrado forzando la máquina cuando ya se acercaba la pitada final.
FICHA DEL PARTIDO:
Alineaciones:
Sevilla FC:: Vaclík, Carriço (Bryan, minuto 74), Kjaer, Wöber, Promes, Sarabia, Banega, Roque Mesa (Franco Vázquez, minuto 62), Escudero (Jesús Navas, minuto 60), Ben Yedder y André Silva.
SD Eibar: Riesgo, Rubén Peña, Ramis (Paulo, minuto 58), Arbilla, Cote, Orellana, Diop, Jordán, Cucurella, Charles (Kike García, minuto 82) y Sergi Enrich (Escalante, minuto 72).
Goles.
0-1, minuto 22: Orellana; 0-2, Charles: minuto 63; 1-2, minuto 88: Ben Yedder, y 2-2: Sarabia, minuto 90+2.
Árbitro:
Árbitro:
Ignacio Iglesias Villanueva, (Colegio Gallego) Mostró tarjetas amarillas a los jugadores del Sevilla: Escudero (minuto 38); Jesús Navas (minuto 88); Ben Yedder (minuto 88), y al futbolista del Eibar: Jordán (minuto 52). Expulsó por doble amonestación al centrocampista del equipo blanco: Banega (minuto 84).
Incidencias.
Incidencias.
Se jugó en el Estadio Ramón Sánchez Pizjuán el partido de la 23ª jornada de LaLiga Santander entre el Sevila FC y la SD Eibar. Asistieron más de 35.000 espectadores, con numerosa presencia de seguidores del equipo vasco. Antes del comienzo del partido se guardó un minuto de silencio por los fallecidos en la Ciudad Deportiva del Flamengo (Brasil). (Fotos: SFC).
* CRÓNICA DE FERNANDO GELÁN.-
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