Los datos demuestran que durante el estado de alarma ha habido mucho más control al Ejecutivo que en periodo ordinario y desmontan las acusaciones de la oposición, en este sentido.
Las cantidades son elocuentes. En poco más de cinco meses de la actual XIV legislatura, en 170 días, el Gobierno ha respondido a 20.221 preguntas escritas presentadas en el Congreso y en el Senado. Esto supone que, de las 27.930 iniciativas de control escrito planteadas, ya se ha contestado al 72,40%, buena parte de ellas durante el estado de alarma. Solo entre el 1 y el 15 de mayo se han presentado 4.114 preguntas. En ese mismo período de 2018, el número de iniciativas fue de 673.
Las cifras demuestran un notable incremento no solo de las preguntas realizadas sino también de la capacidad de respuesta del Gobierno, si la comparamos con legislaturas anteriores.
Durante los primeros 170 días de la X legislatura (2011-2012) se plantearon 9001 preguntas escritas y fueron contestadas 4951, esto es, el 55%. En el mismo periodo de la XII legislatura (2016) se plantearon 12118 preguntas escritas y fueron contestadas 3220, esto es, un 26,57%.
Estos datos suponen que, a pesar del aumento excepcional de preguntas, el porcentaje de contestación del Gobierno es, actualmente, más elevado que nunca, ya que se ha multiplicado por cuatro el número de iniciativas escritas contestadas, comparado con el mismo período 2011-2012, o por seis en el caso del año 2016.
Se da la circunstancia de que a pesar de que la avalancha de preguntas se está produciendo en medio de una emergencia sanitaria sin precedentes, el trabajo de los servicios de Relaciones con las Cortes ha sido extraordinario, respondiendo a más preguntas durante el estado de alarma que en período ordinario.
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