Se celebró en la mañana del domingo 1 de diciembre en el Estadio Benito Villamarín el partido correspondiente a la 15ª jornada de la Liga BBVA entre el Real Betis Balompié y el Rayo Vallecano. Los dos colistas, aunque el cuadro madrileño por encima de los béticos, se jugaban en este choque del torneo de la regularidad algo más que tres puntos de oro para mirar hacia arriba. El encuentro finalizó con el resultado de empate a dos goles. Aunque el cuadro de Mel tuvo muchas ocasiones para lograr un resultado positivo en este duelo dramático, no supo apuntillar porque sus hombres de ataque no tuvieron fortuna a la hora del remate a puerta. Molina y Rubén Castro –éste remató de cabeza un balón que dio en el larguero--, no acertaron a poner el balón en el fondo de las mallas del equipo visitante, cuando ya se cantaba el gol en las gradas. Un empate que deja muy hundido moralmente al cuadro verdiblanco, porque, además, realizó una espléndida primera parte. Y aunque sufrió en la segunda mitad del partido, no mereció, por oportunidades de gol, este duro revés, este resultado en contra.
Betis-Rayo. El farolillo rojo con otro que también viste y calza en ese trío de la bencina que arde para salir del pozo y de las tinieblas. Pepe Mel, el entrenador de los verdiblancos, tenía una enorme responsabilidad en este choque futbolero porque la imagen del equipo no está alcanzado el nivel deseado por los aficionados. Está respirando en Europa, pero tiene un fuerte catarro en la Liga española. Los béticos del Villamarín tenían la ventaja de jugar en casa ante un equipo, como el Rayo, que también anda en el campeonato nacional con más sombras que luces. Al equipo de Mel le falla, de forma especial, el gol. La lesión de Rubén Castro estaba perjudicando la pegada de los béticos, porque no hay delantero con más puntería, Molina pone voluntad y marca, pero el equipo verdiblanco necesita romper los moldes para derribar a los contrarios. Así, pues, Betis-Rayo a revienta calderas. Y así fue. Un partido dramático en todos los sentidos. Un encuentro que tuvo dos caras muy diferentes y un Rayo, que en tiempo de descuento, se llevó un punto cuando la grada ya disfrutaba con el 2-1. Un segundo gol bético marcado de forma prodigiosa por Verdú, pero que al final no le ha servido al cuadro bético para salir del pozo. Bueno, goleador rayista en la matinal y autor del tanto del empate en la prórroga, deja muy tocados al equipo de Pepe Mel.
REAL BETIS BALOMPIÉ, 2; RAYO VALLECANO, 2.-
Dominó y controló el Betis todo el primer tiempo, con un juego eficiente y muy superior al de sus rivales. Fueron unos cuarenta y cinco minutos de un fútbol brillante por parte de los verdiblancos, que logró un gol a los 27 minutos de este periodo. En un córner botado por Nono, Amaya, de cabeza, metió el balón fuera del alcance del potero rayista. La fiesta fue grande en el Villamarín, porque, además, el Betis de Pepe Mel estaba huyendo de los fantasmas. Con una defensa segura –el equipo de Jémez inquietó poco en este periodo--, el centro del campo bético contó con el buen oficio de Salva Sevilla para organizar un puñado de buenas acciones ofensivas. Pepe Mel quería a toda costa el gol y colocó juntos, como puntas de lanzas, a Rubén Castro y Molina. Éste pudo consolidar el resultado, porque contó con dos o tres ocasiones para batir al portero del Rayo. También pudo pitar penalti el juez de la contienda cuando en un saque de esquina, lanzado en el minuto 33, fue trabado Amaya cuando iba a rematar, pero el colegiado de turno dejó seguir la jugada. Desde luego siempre se notó la alta tensión en este duelo dramático, porque en el minuto 28 hubo un duro altercado entre algunos jugadores, siendo Salva Sevilla el más perjudicado. A pesar de toda la tensión, el Betis, con el gol de Amaya, mantenía un buen ritmo para poder seguir dominando este duro duelo.
La segunda mitad fue muy diferente. El Rayo, que marcó a los cinco minutos de la reanudación del partido –en el 50--, por mediación de Bueno y aprovechando un mal rechace de Sara, se creció y metió al Betis en la tumba. Aunque Mel hizo cambios –en esta segunda parte saltaron al terreno de juego Verdú, Juan Carlos y Chuli--, el equipo bético siempre estuvo incómodo y vulnerable. Perdía balones incomprensiblemente y dejaba, además, una enorme laguna en el centro del campo, donde no tenía control. Fue el Rayo quien se aprovechó de la ansiedad y de la fragilidad de los verdiblancos. Los de Jémez desarmaron en este periodo a un Betis que quedó desconcertado con el primer gol de Bueno.
Pero a pesar de que el Rayo estaba haciendo sufrir al Betis, en una de las acciones ofensivas de los locales llegó el 2-1. Era el minuto 81 cuando llegó el gol del centrocampista bético Verdú, marcando de forma espectacular un rechace del portero rayista ante el acoso de Rubén Castro. Con este resultado a favor del equipo del Villamarín todo parecía que estaba atado y bien atado. Pero llegó la fatídica recta final para los verdiblancos, cuando ya la grada estaba celebrando la victoria. Pero el Betis no supo apuntillar el resultado para machacar a su rival. Los verdiblancos, en el minuto 89, tuvieron a su favor una jugada crucial. Centró Amaya al área, pero Rubén Castro no supo rematar al fondo de las mallas con toda la puerta abierta para el canario. Sin embargo, en el 92, en la prórroga, Bueno se aprovechó de un fallo defensivo para fusilar ante Sara y poner la igualada en el marcador. Aunque hubo cuatro minutos de prolongación, el Betis, que intentó reaccionar, no pudo darle la vuelta al marcador. Al final el 2-2 para reventar a un Betis que no mereció este resultado. Por dos veces se adelantó con los goles de Amaya y Verdú y, en numerosas ocasiones, falló goles cantados ante el marco rayista para poder apuntillar y salir victorioso del drama. Pero el Rayo fue más hábil y tuvo más fortuna. El Betis sigue en el pozo. Está al borde del abismo. Y Mel puede estar al caer...
FICHA TÉCNICA:
Alineaciones:
Real Betis Balompié: Sara; Juanfran, Amaya, Jordi Figueras, Nacho; Lolo Reyes, Nono, Salva Sevilla (Juan Carlos, minuto 58); Vadillo (Chuli, minuto 66), Jorge Molina (Verdú, minuto 56), Rubén Castro.
Rayo Vallecano: Cobeño; Tito, Saúl, Galeano, Nacho; Baena, Trashorras (Adrián, minuto 64); Lass, Jonathan Viera, Iago Falque (Bueno, minuto 22); Larrivey (Castillo, minuto 69).
Goles:
1-0 minuto 27, Amaya, 1-1; minuto 50, Bueno; 2-1; minuto 81, Verdú. 2-2 y minuto.92, Bueno.
Árbitro:
José Antonio Teixeira Vitienes (Colegio Cántabro) Mostró tarjeta amarilla a Saúl (minuto 9), Baena (minuto 21), Larrivey (minuto 28), Jonathan Viera (minuto 56), Salva Sevilla (minuto 57), Nono (minuto 78), Chuli (minuto 79), Tito (minuto 91).
Incidencias:
Partido disputado en jornada matinal en el estadio Benito Villamarín ante más de 30.000 espectadores. Antes de comenzar el encuentro se guardó un minuto de silencio por la muerte del ex jugador José Nebot y el ex técnico Cayetano Re. (Foto: Liga BBVA).-
Betis-Rayo. El farolillo rojo con otro que también viste y calza en ese trío de la bencina que arde para salir del pozo y de las tinieblas. Pepe Mel, el entrenador de los verdiblancos, tenía una enorme responsabilidad en este choque futbolero porque la imagen del equipo no está alcanzado el nivel deseado por los aficionados. Está respirando en Europa, pero tiene un fuerte catarro en la Liga española. Los béticos del Villamarín tenían la ventaja de jugar en casa ante un equipo, como el Rayo, que también anda en el campeonato nacional con más sombras que luces. Al equipo de Mel le falla, de forma especial, el gol. La lesión de Rubén Castro estaba perjudicando la pegada de los béticos, porque no hay delantero con más puntería, Molina pone voluntad y marca, pero el equipo verdiblanco necesita romper los moldes para derribar a los contrarios. Así, pues, Betis-Rayo a revienta calderas. Y así fue. Un partido dramático en todos los sentidos. Un encuentro que tuvo dos caras muy diferentes y un Rayo, que en tiempo de descuento, se llevó un punto cuando la grada ya disfrutaba con el 2-1. Un segundo gol bético marcado de forma prodigiosa por Verdú, pero que al final no le ha servido al cuadro bético para salir del pozo. Bueno, goleador rayista en la matinal y autor del tanto del empate en la prórroga, deja muy tocados al equipo de Pepe Mel.
REAL BETIS BALOMPIÉ, 2; RAYO VALLECANO, 2.-
Dominó y controló el Betis todo el primer tiempo, con un juego eficiente y muy superior al de sus rivales. Fueron unos cuarenta y cinco minutos de un fútbol brillante por parte de los verdiblancos, que logró un gol a los 27 minutos de este periodo. En un córner botado por Nono, Amaya, de cabeza, metió el balón fuera del alcance del potero rayista. La fiesta fue grande en el Villamarín, porque, además, el Betis de Pepe Mel estaba huyendo de los fantasmas. Con una defensa segura –el equipo de Jémez inquietó poco en este periodo--, el centro del campo bético contó con el buen oficio de Salva Sevilla para organizar un puñado de buenas acciones ofensivas. Pepe Mel quería a toda costa el gol y colocó juntos, como puntas de lanzas, a Rubén Castro y Molina. Éste pudo consolidar el resultado, porque contó con dos o tres ocasiones para batir al portero del Rayo. También pudo pitar penalti el juez de la contienda cuando en un saque de esquina, lanzado en el minuto 33, fue trabado Amaya cuando iba a rematar, pero el colegiado de turno dejó seguir la jugada. Desde luego siempre se notó la alta tensión en este duelo dramático, porque en el minuto 28 hubo un duro altercado entre algunos jugadores, siendo Salva Sevilla el más perjudicado. A pesar de toda la tensión, el Betis, con el gol de Amaya, mantenía un buen ritmo para poder seguir dominando este duro duelo.
La segunda mitad fue muy diferente. El Rayo, que marcó a los cinco minutos de la reanudación del partido –en el 50--, por mediación de Bueno y aprovechando un mal rechace de Sara, se creció y metió al Betis en la tumba. Aunque Mel hizo cambios –en esta segunda parte saltaron al terreno de juego Verdú, Juan Carlos y Chuli--, el equipo bético siempre estuvo incómodo y vulnerable. Perdía balones incomprensiblemente y dejaba, además, una enorme laguna en el centro del campo, donde no tenía control. Fue el Rayo quien se aprovechó de la ansiedad y de la fragilidad de los verdiblancos. Los de Jémez desarmaron en este periodo a un Betis que quedó desconcertado con el primer gol de Bueno.
Pero a pesar de que el Rayo estaba haciendo sufrir al Betis, en una de las acciones ofensivas de los locales llegó el 2-1. Era el minuto 81 cuando llegó el gol del centrocampista bético Verdú, marcando de forma espectacular un rechace del portero rayista ante el acoso de Rubén Castro. Con este resultado a favor del equipo del Villamarín todo parecía que estaba atado y bien atado. Pero llegó la fatídica recta final para los verdiblancos, cuando ya la grada estaba celebrando la victoria. Pero el Betis no supo apuntillar el resultado para machacar a su rival. Los verdiblancos, en el minuto 89, tuvieron a su favor una jugada crucial. Centró Amaya al área, pero Rubén Castro no supo rematar al fondo de las mallas con toda la puerta abierta para el canario. Sin embargo, en el 92, en la prórroga, Bueno se aprovechó de un fallo defensivo para fusilar ante Sara y poner la igualada en el marcador. Aunque hubo cuatro minutos de prolongación, el Betis, que intentó reaccionar, no pudo darle la vuelta al marcador. Al final el 2-2 para reventar a un Betis que no mereció este resultado. Por dos veces se adelantó con los goles de Amaya y Verdú y, en numerosas ocasiones, falló goles cantados ante el marco rayista para poder apuntillar y salir victorioso del drama. Pero el Rayo fue más hábil y tuvo más fortuna. El Betis sigue en el pozo. Está al borde del abismo. Y Mel puede estar al caer...
FICHA TÉCNICA:
Alineaciones:
Real Betis Balompié: Sara; Juanfran, Amaya, Jordi Figueras, Nacho; Lolo Reyes, Nono, Salva Sevilla (Juan Carlos, minuto 58); Vadillo (Chuli, minuto 66), Jorge Molina (Verdú, minuto 56), Rubén Castro.
Rayo Vallecano: Cobeño; Tito, Saúl, Galeano, Nacho; Baena, Trashorras (Adrián, minuto 64); Lass, Jonathan Viera, Iago Falque (Bueno, minuto 22); Larrivey (Castillo, minuto 69).
Goles:
1-0 minuto 27, Amaya, 1-1; minuto 50, Bueno; 2-1; minuto 81, Verdú. 2-2 y minuto.92, Bueno.
Árbitro:
José Antonio Teixeira Vitienes (Colegio Cántabro) Mostró tarjeta amarilla a Saúl (minuto 9), Baena (minuto 21), Larrivey (minuto 28), Jonathan Viera (minuto 56), Salva Sevilla (minuto 57), Nono (minuto 78), Chuli (minuto 79), Tito (minuto 91).
Incidencias:
Partido disputado en jornada matinal en el estadio Benito Villamarín ante más de 30.000 espectadores. Antes de comenzar el encuentro se guardó un minuto de silencio por la muerte del ex jugador José Nebot y el ex técnico Cayetano Re. (Foto: Liga BBVA).-
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