jueves, 6 de junio de 2024

El PSOE denuncia que el alcalde de la capital hispalense, José Luis Sanz (PP), ha paralizado "sine die" la construcción del pabellón deportivo de Sevilla Este tras retrasar adrede su adjudicación casi un año para que caducaran las condiciones fijadas en los contratos de obras y dos meses después de que se aprobara una modificación presupuestaria para aumentar su inversión

* El concejal socialista Juan Tomás de Aragón lamenta que Sanz ya tuviera adoptada la decisión de antemano para que no saliera adelante este proyecto socialista licitado y con presupuesto de 2023 y destaca el perjuicio que causa a los vecinos y vecinas de Sevilla Este.
* El Grupo Municipal Socialista recuerda que hace sólo dos meses se aprobó, con los votos del PSOE, una modificación presupuestaria por 4 millones para el IMD para incrementar la inversión destinada al pabellón de Sevilla Este y ahora se paraliza la construcción, “lo cual da idea del nivel de improvisaciones y de rectificaciones de este equipo de gobierno”.

El Grupo Municipal Socialista ha denunciado que, tras realizar un paripé con la adjudicación de las obras y una modificación presupuestaria para aumentar la inversión, José Luis Sanz ha paralizado ‘sine die’ el proyecto de construcción del nuevo pabellón deportivo de Sevilla Este, licitada durante el anterior mandato con un presupuesto de 3,1 millones de euros. El Consejo de Gobierno del Instituto Municipal de Deportes, IMD, somete mañana a aprobación el desistimiento de esta licitación, «que Sanz ya había tomado de antemano, y así lo denunciamos en noviembre pasado. No tenía interés alguno en seguir adelante con este proyecto socialista. Primero paralizó la adjudicación. Más tarde, tras nuestra denuncia, hizo amago de adjudicar la obra al reunir a la mesa de contratación, donde se constató que había cuatro empresas interesadas y todas cumplían los requisitos, de ahí que el proceso podía continuar. Ahora, casi un año después, tras dejar caducar las condiciones de los pliegos de contratación, se busca excusas sobre cuestiones de agua o electricidad que pueden ser subsanables o que no se habían previsto los equipamientos interiores, cuando el diseño final y la distribución interior del edificio por prácticas deportivas se iban a consensuar con las entidades deportivas y asociaciones de Sevilla Este», según ha explicado el concejal Juan Tomás de Aragón, responsable del Distrito Este-Alcosa-Torreblanca en el PSOE municipal.
La realidad, según ha abundado el concejal, es que el retraso de Sanz en la adjudicación provocó que a finales de 2023 concluyera el contrato de servicio de la dirección de las obras y dirección de ejecución –es decir, el equipo de arquitecto y aparejador– que debían hacerse cargo del proyecto y, además, quedaran desactualizados los precios del mismo (materiales, mano de obra, etcétera). «Pero, además, hace sólo dos meses, los votos del PSOE permitieron al gobierno una modificación presupuestaria de 4 millones para el IMD para elevar la inversión en el pabellón deportivo de Sevilla Este, lo cual da idea del nivel de improvisaciones y rectificaciones de este equipo de gobierno», ha agregado.
«En suma, Sanz ya tenía decidido paralizar el pabellón pese a la envergadura de la inversión y la importancia para la práctica deportiva de esta amplia y poblada zona de Sevilla, cuyos vecinos y vecinas demandan instalaciones deportivas para el barrio y quienes además iban a participar del diseño final las instalaciones, optando por unos deportes u otros. Y ese equipamiento interior se podría haber ido licitando a la par de las obras, pero tanto esto como solucionar cuestiones de Emasesa o Endesa se hacen un mundo para este gobierno municipal. Así, con la paralización se casi un año en la adjudicación de las obras, Sanz ha actuado adrede, de mala fe, para que caducaran las condiciones establecidas en los contratos. Al final los perjudicados son los vecinos y vecinas de Sevilla Este», según ha remarcado.
A tenor del proyecto diseñado, planificado y licitado por el gobierno de Muñoz, las obras del nuevo Pabellón Polideportivo de Sevilla Este tenían un presupuesto de 3,1 millones de euros y un plazo de ejecución de doce meses, a contar desde la adjudicación y la formalización del contrato de obras. Ese pabellón, que se ejecutaría sobre una parcela de 44.500 metros cuadrados situada en la calle Doctor Miguel Ríos Sarmiento, implicaba un moderno complejo caracterizado por su multifuncionalidad, los nuevos materiales que favorecen la ventilación y la luz natural, la eficiencia energética, y sobre todo, la aplicación de tecnologías de última generación para la práctica de diferentes modalidades deportivas con las máximas garantías y experiencias de juego. Además de convertirse en epicentro de la actividad deportiva del barrio, incorporaba una terraza mirador con vistas al barrio y un parking de 3.421 metros cuadrados con capacidad para 134 vehículos.
El pabellón para Sevilla Este dispondría en su espacio principal de pista polideportiva cubierta con una dimensión de 48x32 metros y otras tres pistas transversales, más los vestuarios. Constructivamente se proponía un edificio compacto pero con funciones e itinerarios diferenciados para deportistas y público según dos niveles distintos: dos volúmenes de los que el inferior alberga usos deportivos. El cerramiento se proyectaba de manera que permitiera ventilación cruzada y la entrada de la luz natural y homogénea, con un impacto relevante en comodidad, confort climático y eficiencia energética acorde con las condiciones climáticas de la ciudad.
La configuración del espacio central permitía acoger diferentes pistas longitudinales y transversales a través de diferentes rotulaciones y divisiones que permite una definición de tres áreas deportivas distintas y simultáneas. El campo principal presentaba dimensiones de 40x20 m y serviría para las disciplinas deportivas de fútbol-sala y para balonmano. Dentro del mismo se iban a incluir otros campos de juego de baloncesto, voleibol y bádminton, según el sentido longitudinal de la pista. La banda lateral permitía el despliegue y la ocupación de cinco módulos de gradas telescópicas con 250 plazas de público opcionales que se suman a las 352 del graderío fijo hasta completar una capacidad de hasta 600 plazas. El proyecto incluía una amplia terraza panorámica sobre los vestuarios y zonas comunes del edificio, apta para actividades polivalentes.

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