El delegado del Gobierno de España en Andalucía, Pedro Fernández, ha presidido hoy la inauguración de la rehabilitación del conjunto fortificado de La Guardia de Jaén, unas obras de adecuación, consolidación y conservación que han contado con una aportación del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) --con cargo a fondos del programa del 1,5% Cultural-- de 617.468,22 euros, lo que supone el 70% del presupuesto total de la actuación, que ha ascendido a 882.097,45 euros.
Fernández, que ha estado acompañado de la subdelegada del Gobierno en Jaén, Catalina Madueño; del presidente de la Diputación jiennense, Francisco Reyes, y del alcalde de La Guardia, Juan Morillo, ha explicado que esta actuación “demuestra el compromiso del Gobierno de recuperar y proteger el Patrimonio Cultural jiennense, pues “se incluyen en los más de 5 millones de euros en 7 actuaciones de rehabilitación en la provincia dentro del Programa del 1,5% Cultural, 2,28 millones de euros correspondientes a las cuatro ya finalizadas más otros tres proyectos que actualmente están en desarrollo, con una inversión de 2,8 millones”.
En concreto, se tratada de las obras para la restauración, consolidación y puesta en valor de las cisternas romanas de ‘La Calderona’, en Porcuna (1,13M€), la restauración de las cubiertas y rehabilitación del ala este del Palacio Vázquez de Molina de Úbeda (1,59M€) y la restauración y acondicionamiento de la Torre del Homenaje en Higuera de Calatrava (73.598€).
“Gracias a la apuesta del Gobierno por destinar el 1,5% de los contratos de las obras públicas a la conversación del patrimonio, podemos rescatar y disfrutar nuestra historia, autóctonos y foráneos, dándole un valor añadido a nuestros pueblos, generando empleo en el sector de la construcción y ampliando su atractivo turístico”, un doble objetivo que, en palabras de Fernández, “se verá incrementado próximamente tras el acuerdo entre el Mitma y el Ministerio de Cultura y Deporte para aumentar del 1,5% al 2% la financiación de estos trabajos”.
El Gobierno de España financia un total de 74 actuaciones de rehabilitación que suman 62,7 millones en los últimos cinco años. Del total, 32 proyectos están en activos, por valor de 23,2 millones de euros, a los que se suman los 29,8 millones de las 39 actuaciones finalizadas desde 2018 y tres más en tramitación por valor de 9,27 millones.
La actuación finalizada en el castillo medieval ha consistido en la limpieza, consolidación y estabilización de los elementos existentes en los edificios pertenecientes al alcázar e iglesia de Santa María, así como de algunos tramos de muralla, tanto emergentes como resultantes de la intervención arqueológica. Estas actuaciones han sido supervisadas en todo momento por el equipo arqueológico, efectuándose el pertinente y preceptivo seguimiento de la retirada de enlucidos y elementos constructivos.
El Castillo de La Guardia de Jaén
El castillo, declarado Bien de Interés Cultural con la categoría de monumento en 1993, se asienta sobre la ladera del Cerro de San Marcos. Se trata de un enclave estratégico que alberga numerosos hallazgos arqueológicos y monumentos que componen su rico patrimonio histórico y cultural, testimonio de los pueblos y culturas que, a lo largo de la historia, desde el Neolítico hasta la actualidad, decidieron establecerse en ella.
La época de construcción del conjunto fortificado posiblemente sea anterior al siglo XI, pero es de este periodo del que se conservan los restos arquitectónicos más antiguos. El estudio arqueológico documenta cuatro fases históricas: Emiral, Almohade, Cristiana y Renacentista.
La fortaleza se estructura en dos espacios bien definidos y claramente diferenciados: por un lado, el castillo o alcázar; y, por otro, un recinto de murallas que lo circunda. Asimismo, el recinto externo está formado por una serie de lienzos de muralla con trazado quebrado, lo que crea multitud de ángulos de defensa, haciendo innecesaria la construcción de torres, excepto la que protegía la puerta principal. Por su parte, conforman el recinto interior el aljibe, una torre de planta cuadrada, una torre de planta circular, las bodegas y la torre del homenaje.
La fortaleza estuvo habitada hasta la Guerra de la Independencia, cuando, en 1812, fue asaltado, ocupado e incendiado por las tropas napoleónicas.
La actuación finalizada en el castillo medieval ha consistido en la limpieza, consolidación y estabilización de los elementos existentes en los edificios pertenecientes al alcázar e iglesia de Santa María, así como de algunos tramos de muralla, tanto emergentes como resultantes de la intervención arqueológica. Estas actuaciones han sido supervisadas en todo momento por el equipo arqueológico, efectuándose el pertinente y preceptivo seguimiento de la retirada de enlucidos y elementos constructivos.
El Castillo de La Guardia de Jaén
El castillo, declarado Bien de Interés Cultural con la categoría de monumento en 1993, se asienta sobre la ladera del Cerro de San Marcos. Se trata de un enclave estratégico que alberga numerosos hallazgos arqueológicos y monumentos que componen su rico patrimonio histórico y cultural, testimonio de los pueblos y culturas que, a lo largo de la historia, desde el Neolítico hasta la actualidad, decidieron establecerse en ella.
La época de construcción del conjunto fortificado posiblemente sea anterior al siglo XI, pero es de este periodo del que se conservan los restos arquitectónicos más antiguos. El estudio arqueológico documenta cuatro fases históricas: Emiral, Almohade, Cristiana y Renacentista.
La fortaleza se estructura en dos espacios bien definidos y claramente diferenciados: por un lado, el castillo o alcázar; y, por otro, un recinto de murallas que lo circunda. Asimismo, el recinto externo está formado por una serie de lienzos de muralla con trazado quebrado, lo que crea multitud de ángulos de defensa, haciendo innecesaria la construcción de torres, excepto la que protegía la puerta principal. Por su parte, conforman el recinto interior el aljibe, una torre de planta cuadrada, una torre de planta circular, las bodegas y la torre del homenaje.
La fortaleza estuvo habitada hasta la Guerra de la Independencia, cuando, en 1812, fue asaltado, ocupado e incendiado por las tropas napoleónicas.
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