El documento consta de 154 páginas, que están disponibles en la sección ‘Portal de Transparencia’ de la web diocesana. Contiene un recuento pormenorizado de las cuentas de explotación de las instituciones comprendidas en la Archidiócesis hispalense, desde el Arzobispado hasta la Casa Sacerdotal Santa Clara, pasando por las parroquias, el Cabildo Catedral o Manos Unidas.
“La transparencia y la rendición de cuentas es una prioridad para la Iglesia”, ha destacado el arzobispo, que ha recordado que la de Sevilla fue la primera en implantar un organismo con esta finalidad. Monseñor Saiz ha agradecido la contribución de los fieles a la Iglesia a través de las colectas, suscripciones, legados y la equis en la casilla de la Iglesia en la declaración de la renta. “Gracias a todas estas colaboraciones y recursos es posible seguir llevando a cabo toda la actividad que lleva adelante la Iglesia”.
Por su parte, el ecónomo diocesano ha afirmado que “hoy podemos decir que hemos superado los peores momentos de una crisis de la que no hemos salido indemnes”. “Las Cáritas han tenido que reforzar la atención a las personas”, ha añadido. También ha explicado que “la economía son recursos al servicio de la vida y de una actividad apostólica”, y que “detrás de estos números está el trabajo de mucha gente que trabaja en equipo y de forma coordinada”. Alberto Benito ha enumerado los ejes de la actividad económica en la Archidiócesis de Sevilla: transparencia, austeridad, control y eficacia, y ha recordado que “cada euro que se gasta lo fiscalizan previamente seis personas”. De cara al futuro, ha adelantado que la Archidiócesis va a levantar cinco complejos parroquiales.
Las principales magnitudes que se incluyen en esta Información Económica revelan una actividad ingente, en la que destaca -dentro del balance consolidado- el empleo del 33,75 % en la conservación de edificios y gastos de funcionamiento, y el 21,02 % que se ha destinado a acciones pastorales y asistenciales. En cuanto a los ingresos, el 51,08 % se incluye en la partida de ‘otros ingresos corrientes’. Le siguen las aportaciones voluntarias de los fieles, con el 26,70 %, y la asignación tributaria (a través del Fondo Común Diocesano) con el 16,09 % de lo que se ingresó el año 2023. En este último apartado se ha experimentado un aumento de casi un millón de euros respecto a lo ingresado en 2022.
Aumenta el balance del Cabildo Catedral
Por instituciones, el balance de la Archidiócesis llega a los 19.629.780,15 euros, tres millones y medio más que en 2022. Las cuentas del Cabildo Catedral también arrojan datos significativos. La cuenta anual se ha saldado con 22.552.843,97 euros, cinco millones y medio más que en el ejercicio anterior. Es una cantidad que se justifica por el aumento, en esa misma cuantía, de los ingresos por la visita cultural (que suponen el 98 % de los ingresos de la Catedral). De esa cantidad, el Cabildo asignó el pasado año casi siete millones a la conservación del templo y más de cuatro millones y medio a iniciativas pastorales y asistenciales.
Por su parte, Cáritas Diocesana ha presentado un balance de 7.050.688,68 euros (con el 64,3 % de los ingresos procedentes de las aportaciones de los fieles: colectas, suscripciones y otros ingresos), la Casa Sacerdotal Santa Clara 860.778 euros, Manos Unidas 1.537.527,77 euros (el 73,1 % procedente de colectas y socios), el Seminario 555.401,91 euros (con un descenso de 74.273,69 respecto al ejercicio 2022) y las Obras Misionales Pontificas 604.409,82 euros (con el dato curioso de que el 100 % de lo gastado ha sido aportado por los fieles).
Importancia de las aportaciones de los fieles
Por otro lado, las parroquias han arrojado una cuenta de explotación total que ha ascendido a 14.492.877,07 euros, 893.763,74 más que en 2022. De esa cantidad, unos siete millones se han destinado a la conservación de los edificios (unos setecientos mil euros más que en el ejercicio anterior) y más de cuatro millones a pastoral y acción social, con un ligero aumento respecto al año 2022. ¿De dónde han salido estas cantidades computables en el balance de las parroquias? Fundamentalmente -y de nuevo- de las aportaciones de los fieles, en una cantidad más que estimable: 11.021.520,85 euros, unos ochocientos mil euros más que el año anterior.
Aportaciones de las hermandades
Esta Información Económica ofrece también datos que atañen a las hermandades de la Archidiócesis. Uno de ellos es la aportación de estas corporaciones al Fondo Común Diocesano. Si en 2022 fueron 141 las hermandades que han realizado ingresos a este fondo por un importe de 144.025,52 euros, el último ejercicio lo hicieron dos hermandades menos, arrojando una cifra prácticamente igual (141.723,93 euros).
“La transparencia y la rendición de cuentas es una prioridad para la Iglesia”, ha destacado el arzobispo, que ha recordado que la de Sevilla fue la primera en implantar un organismo con esta finalidad. Monseñor Saiz ha agradecido la contribución de los fieles a la Iglesia a través de las colectas, suscripciones, legados y la equis en la casilla de la Iglesia en la declaración de la renta. “Gracias a todas estas colaboraciones y recursos es posible seguir llevando a cabo toda la actividad que lleva adelante la Iglesia”.
Por su parte, el ecónomo diocesano ha afirmado que “hoy podemos decir que hemos superado los peores momentos de una crisis de la que no hemos salido indemnes”. “Las Cáritas han tenido que reforzar la atención a las personas”, ha añadido. También ha explicado que “la economía son recursos al servicio de la vida y de una actividad apostólica”, y que “detrás de estos números está el trabajo de mucha gente que trabaja en equipo y de forma coordinada”. Alberto Benito ha enumerado los ejes de la actividad económica en la Archidiócesis de Sevilla: transparencia, austeridad, control y eficacia, y ha recordado que “cada euro que se gasta lo fiscalizan previamente seis personas”. De cara al futuro, ha adelantado que la Archidiócesis va a levantar cinco complejos parroquiales.
Las principales magnitudes que se incluyen en esta Información Económica revelan una actividad ingente, en la que destaca -dentro del balance consolidado- el empleo del 33,75 % en la conservación de edificios y gastos de funcionamiento, y el 21,02 % que se ha destinado a acciones pastorales y asistenciales. En cuanto a los ingresos, el 51,08 % se incluye en la partida de ‘otros ingresos corrientes’. Le siguen las aportaciones voluntarias de los fieles, con el 26,70 %, y la asignación tributaria (a través del Fondo Común Diocesano) con el 16,09 % de lo que se ingresó el año 2023. En este último apartado se ha experimentado un aumento de casi un millón de euros respecto a lo ingresado en 2022.
Aumenta el balance del Cabildo Catedral
Por instituciones, el balance de la Archidiócesis llega a los 19.629.780,15 euros, tres millones y medio más que en 2022. Las cuentas del Cabildo Catedral también arrojan datos significativos. La cuenta anual se ha saldado con 22.552.843,97 euros, cinco millones y medio más que en el ejercicio anterior. Es una cantidad que se justifica por el aumento, en esa misma cuantía, de los ingresos por la visita cultural (que suponen el 98 % de los ingresos de la Catedral). De esa cantidad, el Cabildo asignó el pasado año casi siete millones a la conservación del templo y más de cuatro millones y medio a iniciativas pastorales y asistenciales.
Por su parte, Cáritas Diocesana ha presentado un balance de 7.050.688,68 euros (con el 64,3 % de los ingresos procedentes de las aportaciones de los fieles: colectas, suscripciones y otros ingresos), la Casa Sacerdotal Santa Clara 860.778 euros, Manos Unidas 1.537.527,77 euros (el 73,1 % procedente de colectas y socios), el Seminario 555.401,91 euros (con un descenso de 74.273,69 respecto al ejercicio 2022) y las Obras Misionales Pontificas 604.409,82 euros (con el dato curioso de que el 100 % de lo gastado ha sido aportado por los fieles).
Importancia de las aportaciones de los fieles
Por otro lado, las parroquias han arrojado una cuenta de explotación total que ha ascendido a 14.492.877,07 euros, 893.763,74 más que en 2022. De esa cantidad, unos siete millones se han destinado a la conservación de los edificios (unos setecientos mil euros más que en el ejercicio anterior) y más de cuatro millones a pastoral y acción social, con un ligero aumento respecto al año 2022. ¿De dónde han salido estas cantidades computables en el balance de las parroquias? Fundamentalmente -y de nuevo- de las aportaciones de los fieles, en una cantidad más que estimable: 11.021.520,85 euros, unos ochocientos mil euros más que el año anterior.
Aportaciones de las hermandades
Esta Información Económica ofrece también datos que atañen a las hermandades de la Archidiócesis. Uno de ellos es la aportación de estas corporaciones al Fondo Común Diocesano. Si en 2022 fueron 141 las hermandades que han realizado ingresos a este fondo por un importe de 144.025,52 euros, el último ejercicio lo hicieron dos hermandades menos, arrojando una cifra prácticamente igual (141.723,93 euros).
Informa finalmente la Archidiócesis de Sevilla que otra partida es la del dinero que las hermandades han aportado al sostenimiento del Seminario. Aquí se han experimentado otras subidas: 106.428 euros por los 88.165 de 2022, y 39 hermandades, cinco más que en el ejercicio económico inmediatamente anterior. Monseñor Saiz Meneses ha agradecido esta contribución de las hermandades a la Iglesia diocesana, y ha clausurado el acto con un dato preocupante: “La pandemia ha servido para que las distancias entre ricos y pobres se amplíe”. Frente a esta realidad, “la Iglesia debe mantenerse fiel a la esperanza y la alegría a la hora de presentar su mensaje”. (Foto: AS).-
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