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Con este gol de oro para el Mallorca, el equipo de Caparrós se dedicó a defender con uñas y dientes esta corta ventaja, replegándose a una defensa a ultranza y buscando el contragolpe cuando más le convenía. No supo el Betis de Pepe Mel buscar la réplica para contrarrestar la picardía de los mallorquines. Buscó el preparador bético un Plan B y sacó a Beñat para poder fabricar juego en el centro del campo, ya que durante todo el primer tiempo no había existido en el cuadro de Heliópolis. Pero el Betis no encontró nunca la fórmula y, además, con la expulsión de Mario --minuto 74--, el panorama se ennegrecía para los verdiblancos. En este desastroso y caótico encuentro, con muchos errores, fallos, repetidas faltas y sin juego y sin orden --debutó Paulao y volvió Alex Martínez a la defensa--, el Betis quiso dejarse la piel alocadamente hasta el último minuto. En el Mallorca hubo dos expulsiones -- Ramis, minuto 84-- y Víctor Casadeús, minuto 92--, y aunque el mal juez de la contienda --Velasco Carballo--, prolongó hasta más de cinco minutos el partido --se llegó hasta los 96--, el Betis fue incapaz de marcar un gol, pese al sufrimiento que en este tiempo estaba padeciendo el cuadro mallorquín por el ataque ya enfurecido de los béticos, que veían cómo se les escapaban tres puntos de oro.
Mal el Betis y práctico el Mallorca. A partir de ahora, y tras los puntos perdidos en esta mala racha, los verdiblancos se van a mover muy cerca de la zona de descenso. En este último ciclo no ha podido ganar un partido el Betis ni en casa ni en campo ajeno. La situación del equipo que prepara Mel es, por tanto, muy preocupante. El peligro puede ser letal.
(Foto: Web Liga BBVA).
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