lunes, 15 de julio de 2024

El PSOE identifica medio centenar de barrios donde el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz (PP), concentrará la apertura de miles de viviendas turísticas con el riesgo de expulsión de vecinos y residentes al subir los precios de los alquileres y de venta

* La propuesta del equipo de Sanz sólo salva el Casco Antiguo, a excepción de San Julián y El Museo, “mientras que la mancha de aceite se extenderá a las barriadas periféricas de la propia Triana, más allá de su conjunto histórico, y hacia los distritos la Macarena, Nervión, San Pablo, Sur y Los Remedios, que conforman un primer cinturón en torno a los dos enclaves más turísticos de nuestra ciudad”, ha explicado el concejal socialista Francisco Javier Páez.
* “Quedan aún varios días para endurecer la limitación de los pisos turísticos para hacer realidad lo que todos compartimos, que en Sevilla no cabe ni una sola vivienda turística más, y llevar una propuesta más acorde con la realidad del problema al Pleno ordinario de este jueves”, ha remarcado Páez, quien insta a incorporar otros indicadores que permitan rebajar el porcentaje del 10 por ciento y alcanzar ‘de facto’ una suspensión de licencias en toda la ciudad.

El Grupo Municipal Socialista ha advertido hoy de que la propuesta de José Luis Sanz de mantener la puerta abierta a miles de pisos turísticos en la ciudad –hasta 23.305 más– trasladará la actual presión sobre el mercado de la vivienda residencial y los problemas de convivencia con los vecinos y vecinas que ejercen en el Casco Antiguo y el conjunto histórico de Triana principalmente hacia medio centenar de barriadas que las circundan. Sea por su cercanía o por una buena comunicación con ambos enclaves turísticos, este listado se extraje al analizar el documento que, por encargo de Emvisesa, es la base de la propuesta del gobierno del PP.
En concreto, y aunque Sanz ha manifestado que “no cabe ni una vivienda turística más en la ciudad”, lo cierto y verdad es que su propuesta del 10 por ciento de pisos turísticos sobre el conjunto de viviendas residenciales excluye casi todo el Casco Antiguo, a excepción de los barrios de San Julián y El Museo, pero mantiene la posibilidad de proliferación en la totalidad distritos, incluido el de Triana, donde el margen de nuevas aperturas es de 1.138. «En suma, la mancha de aceite se extenderá a las barriadas periféricas de la propia Triana, más allá de su conjunto histórico, hacia principalmente la Macarena, Nervión, San Pablo, Sur y Los Remedios, que conforman un primer cinturón en torno a los dos enclaves más turísticos de nuestra ciudad. Y este desplazamiento tensionará al alza los precios de los alquileres y para la venta de viviendas residenciales, con el riesgo de expulsión de residentes de sus propios barrios», ha explicado el concejal socialista Francisco Javier Páez, miembro del Consejo de Gobierno de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente por el PSOE municipal.
«Ese gran riesgo es precisamente el que le queremos trasladar al equipo de Sanz. Por eso debe ser valiente a la hora de atajar el problema de los pisos turísticos en la ciudad y plantear, como está haciendo Granada, restricciones más ambiciosas que la que tiene encima de la mesa. Les hemos planteado ya varias, desde una moratoria total, es decir, que no se conceda ni una sola licencia más, o reducir del 10 por ciento al 2,5 por ciento el porcentaje y que se aplique tanto a nivel de barrio como a nivel de ciudad, lo que, en la práctica, equivaldría a una suspensión de facto de nuevas licencias», ha explicado.
Páez ha recordado, asimismo, que el 10 por ciento establecido por Sanz está establecido por una consultora privada contratada por Emvisesa, y no con criterios legales establecidos en el decreto de regulación de las viviendas turísticas aprobado por la Junta de Andalucía y que se encuentra en vigor desde el pasado mes de febrero tras tres años de retraso desde que fuera anunciado por parte del gobierno autonómico.
Además de San Julián y El Museo en el Casco Antiguo, los barrios que asumirían la mayor parte de las 23.305 viviendas turísticas que caben en la propuesta de regulación local de viviendas turísticas que ha planteado Sanz son la zona antigua de Los Remedios; la Avenida de Llanes, Pío XII, Barriada de las Flores, Avenida Miraflores, Cruz Roja y entorno, Fray Isidoro de Sevilla León XIII, Hermandad del Trabajo y Entorno Glorieta Olímpica, en el Distrito Macarena. En el Distrito Nervión, donde el Metro y la ampliación del tranvía contribuirán al crecimiento de las viviendas turísticas, el problema afectaría sobre todo a San Bernardo, Luis de Morales, San Francisco Javier, Huerta del Pilar, Viapol, La Buhaira, Gran Plaza, Nervión Viejo, La Calzada, La Florida y San Roque.
En el caso del Distrito Santa Justa-San Pablo, la cercanía de la estación de trenes de Santa Justa y las buenas conexiones con el Casco Antiguo abriría el crecimiento de los pisos turísticos hacia el entorno de Santa Justa, San José Obrero, la Avenida de Kansas City, Huerta de Santa Teresa, La Corza, José Laguillo-Santa Justa, las Huertas, María Auxiliadora-el Fontanal, San Carlos, La Rosaleda, Árbol Gordo y Zodiaco. En Bellavista-La Palmera, todo el entorno de la Avenida de la Palmera.
En el Distrito Sur, las barriadas más proclives a la expansión de los pisos turísticos tras el cierre del Casco Antiguo serían El Plantinar –un barrio tradicionalmente destino de pisos destinadas a estudiantes, cuya oferta se reduciría–, así como el Porvenir, El Tiro de Línea, la Avenida de la Borbolla y Felipe II. Y en el Distrito Triana, la proliferación sería generalizada entre sus distintas barriadas desde Pagés del Corro hasta la Ronda de Tejares, con especial incidencia en la zona de San Jacinto hasta San Martín de Porres, Santa Cecilia, Ronda de Triana, Salado y entorno, Las Torres, Los Ángeles, Santa María, Montepirolo, Ronda de Triana, Turruñuelo, López de Gomara, San Gonzalo, El Tardón, Esperanza de Triana y el entorno del Cachorro-Plaza de Chapina.
«Este es el riesgo real que entraña la propuesta de Sanz y que, a día de hoy, no quiere ver. Al estar el Casco Histórico saturado, las viviendas turísticas, especialmente impulsada por fondos de inversión y grandes propietarios, tenderán a esas barriadas, reduciendo así la oferta del mercado residencial y subiendo los precios. Por tanto, desde el Grupo Socialista le insistimos en que reconsidere su propuesta e introduzca nuevos elementos que permitan rebajar el porcentaje del 10 por ciento o busque las fórmulas jurídicas que faciliten una suspensión total de nuevas licencias. Quedan aún varios días para endurecer la limitación de los pisos turísticos para hacer realidad lo que todos compartimos, que en Sevilla no cabe ni una sola vivienda turística más, y llevar una propuesta más acorde con la realidad del problema al Pleno ordinario de este jueves», ha concluido Francisco Javier Páez.

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