Enrique Ponce, que fue el maestro de la ceremonia del doctorado de Pablo Aguado, solo pudo demostrar sus buenas cualidades en el segundo toro de su lote. Pero falló con la espada para poder lograr la merecida oreja. Al finalizar la gran faena, con emotiva dedicación al picador de su cuadrilla, Manuel Quinta, que se retiraba de los ruedos tras 27 años junto al maestro, el torero de Chiva invitó a Quinta a compartir la vuelta al ruedo en el Coso del Arenal de Sevilla.
Ambiente de lujo en la Plaza de Toros de la Real Maestranza. Buena bulla por los alrededores del Coso del Baratillo en este sábado del mes de septiembre. Parecía que estábamos en plena Feria de Abril. Acierto pleno de la Empresa Pagés, con un cartel de enorme tirón, dentro de la programación de las dos corridas de la Feria de San Miguel 2017.
En el cartel del primer festejo y junto a Enrique Ponce y Alejandro Talavante, Pablo Aguado fue el gran protagonista. El sevillano, todo corazón y entrega, tomó la alternativa. Aguado estuvo muy cerca de cortar orejas y hasta de salir por la Puerta del Príncipe en este tarde-noche taurina en el Arenal. Falló con la espada en los dos toros de su lote, cuando ya acariciaba los merecidos trofeos.
VUELTA AL RUEDO PARA EL NUEVO MATADOR DE TOROS
Como era día de alternativa, el sevillano Pablo Aguado fue el primer espada que pisó la arena cuando saltó al albero de la Maestranza el primer todo de la corrida. El sevillano se enfrentó en este día de su alternativa a un morlaco de Garcigrande llamado “Recobero”, de 503 kilos. Aguado no tuvo oportunidad de lucirse con el capote. Solo pudo ejecutar el sevillano unas cortas verónicas. Y llegó la hora clave. Ponce le entregó los tratos de matar, con Talavante de testigo, y Aguado se abrazó al de Chiva porque ya formaba parte de escalafón de matadores de toros. El sevillano, con la muleta en la mano, se fue a por todas ante un toro protestado por parte del público en el primer tercio. Aguado se hizo el fuerte. Fue valiente y decidido ante “Recobero”. Con temple, muy firme sobre el albero, llevó a cabo tandas bien rematadas. Aguado dominó la faena y el público estuvo siempre con el sevillano. Sonó la música y el torero ofreció su mejor versión del toreo. Tandas de naturales, derechazos y remates hasta con la muleta bailándola delante de la cara del toro. Pero Aguado no tuvo fortuna en la suerte suprema cuando estaba ya cerca de la gloria. Solo fue premiado con una gran ovación y con la vuelta al ruedo.
En el segundo de su lote --el sexto de la corrida--, el nuevo matador de toros quiso armar el taco ante “Cañí”, de 539 kilos. Pablo Aguado se lució en verónicas en estos primeros momentos de su faena. Brindó al público y buscó con enorme afán e intensidad dominar la situación. Ejecutó buenos naturales, realizó acertados cambios de mano con la muleta, y logró, ya con la muleta baja, desarrollar los mejores momentos de la lidia. Sonó la música y el público se emocionó viendo lo que el sevillano hacía en el Coso del Baratillo. Pero tampoco acertó con la espada y perdió un posible premio.
EL MAESTRO PONCE SOLO TUVO UN TORO
Poco pudo hacer Enrique Ponce ante el primer toro de su lote. El de Chiva se encontró con un complicado morlaco que se quedó tieso ante el maestro. Los intentos del torero fueron totalmente inútiles para la lidia. Era un toro manso, huidizo y parado. Ponce se fue a por la espada de verdad y liquidó al desastroso animal con una media estocada. El toro tardó en caer y se murió de aburrimiento.
En el segundo de su lote --cuarto del festejo--, las cosas tomaron un rumbo bien distinto para Enrique Ponce. En este toro picó Manuel Quinta por última vez, porque cerraba en la Plaza de de la Maestranza su carrera profesional. Ponce le brindó el toro a Quinta. Y el diestro de Chiva demostró bien su gran maestría. Arriesgó Ponce y logró series de mucha calidad. Aunque el astado mostraba sus irregularidades, el torero de Chica sacó oro en la lidia. Sonó la música --Suspiros de España--, y la Maestranza cargó sus pilas viendo la gran faena, el valor y la maestría de Enrique Ponce. Pero la espada no respondió a todos los buenos y grandes deseos del torero. Pinchó dos veces y clavó medio estoque en el segundo intento. El toro cayó sin puntilla. Ponce, acompañado de Manolo Quinta, dio la vuelta al ruedo en esta emotiva despedida de los toros del veterano picador de la cuadrilla del valenciano.
LA ÚNICA OREJA FUE PARA TALAVANTE
Fue Alejandro Talavante --que repetirá el domingo al sustituir a José María Manzanares--, el único que cortó oreja en esta corrida de la Feria de San Miguel. Tuvo la buena fortuna de lidiar los dos mejores toros de la corrida. El diestro de Badajoz, en el primero de su lote, manejó con mucho arte la capa, ejecutando firmes y artísticas verónicas. Talavante, ya muleta en mano, asombró con sus series ligadas y perfectamente rematadas. Sonó la música. El pacense volvió a encantar con los cambios de mano de la muleta ante la carita del toro. Su faena, ajustada y firme, alcanzó un buen nivel. Fue desarmado, pero en la recta final de la lidia bordó el toreo ante un público entusiasmado. Talavante, ya en la suerte suprema, mató de media estocada traserilla. Tardó en caer el toro, pero la petición de un premio fue unánime y cortó una oreja.
En el segundo de su lote --quinto de la corrida--, Talavante fue en busca de más premio ante “Repartidor”, de 512 kilos. El torero de Badajoz estuvo magistral en una serie de muletazos por la derecha que remató, cambiando de mano, con espléndidos pases de pecho. Aunque el toro fue perdiendo gas, Talavante, apretando su lidia, logró ejecutar unos buenos naturales. Mató de estocada caída efectiva.
Y esto fue todo cuanto ocurrió en esta primera corrida de la Feria de San Miguel 2017. Los tres toreros, cada uno a su estilo y sus formas, ofrecieron un buen espectáculo. Pudo haber muchas orejas si Aguado y Ponce aciertan con la espada. Pero la afición salió contenta y satisfecha de la Plaza de Toros de Sevilla por todo cuanto había contemplado sobre el dorado albero.
FICHA DEL FESTEJOSe celebró en la Plaza de Toros de Sevilla la primera corrida de la Feria de San Miguel 2017. Era el festejo número 22 del abonos de la temporada taurina. Se lidiaron toros de Gracigrande muy irregulares. El toro del primer lote de Enrique Ponce fue pitado en el arrastre.
* Enrique Ponce, silencio y vuelta al ruedo.
* Alejandro Talavante, oreja y ovación con petición de oreja.
* Pablo Aguado, vuelta al ruedo en el primer toro de su alternativa, y ovación, tras aviso, en el segundo.
Incidencias:
Hubo casi lleno en el Coso del Baratillo. El torero sevillano, Pablo Aguado, tomó la alternativa. Enrique Ponce fue el maestro de esta ceremonia, con Alejandro Talavante como testigo. El torero valenciano, tras matar al segundo de su lote, fue asistido en la enfermería de la plaza de toros. El parte del doctor Octavio Mulet fue el siguiente: Contractura con posible desgarro del abductor derecho. La lesión fue pronosticada por el cirujano jefe como leve. Saludaron en banderillas Juan José Trujillo y Sergio Aguilar. (Fotos: Toromedia).
FERNANDO GELÁN.-
Resumen Maestranza 23 Septiembre 2017 internet
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