Ha jugado el Real Betis Balompié en esta segunda jornada de la Liga BBVA
2015-2016 en el Santiago Bernabéu frente al Real Madrid de Cristiano Ronaldo. Hace ahora cien años del primer partido que jugó el club verdiblanco con sus nuevas señas de identidad. Los béticos se enfrentaron en 1915 al Unión Andalucía
Recreativo. En éste encuentro ya se eligieron los colores verde y blanco como
distintivo del club. Ese mismo año, el Real Betis se proclamó campeón de la
Copa de Sevilla, venciendo en la final al Sevilla en los terrenos de la
Enramadilla. En aquella época se fundó la Federación Española y Andaluza de Fútbol
para la institucionalización del balompié andaluz.
Curioso fue lo que sucedió en un partido
entre el Real Betis y el Sevilla en 1918. Durante un encuentro de la Copa de
Andalucía varios jugadores verdiblancos, entre ellos Canda y Artola, que realizaban
el servicio militar no lograron el esperado permiso para poder jugar este derbi
local. Los directivos béticos, en señal de protesta, alinearon ante el Sevilla
a los juveniles que perdieron por 22-0. Pura anécdota en la larga historia de
la rivalidad local.
Pero
casi cien años después, la historia es la historia y el Betis actual está ya
centrado en la realidad de este 2015 con Pepe Mel y su plantilla. Tras empatar
con buena actitud frente al Villarreal
en el Villamarín, los verdiblancos se enfrentaron a un Real Madrid que comenzó
el torneo con poco tino a la hora de rematar adecuadamente al marco rival. Los
verdiblancos estaban dispuestos a meter bien la directa y aprovechar que los
blancos del Bernabéu estuvieron muy cortitos de pegada en su primer partido de la temporada ante el
Sporting de Gijón en el Molinón. Pero el Real Madrid sorprendió a los béticos con terribles cañonazos.
Ya
lo dijo el propio Pepe Mel al finalizar el partido con ese contundente 5-0 a
favor del cuadro de Rafa Benítez. A los verdiblancos, a los dos minutos del
partido y con el gol de Bale se les cayó el “chiringuito”. El partido siempre
tuvo color blanco. Tanto en el tiempo que dominó al completo como en los
minutos que bajó al acelerador para respirar tras tener el control y ejercitar con potencia su terrible pegada. El Madrid sorprendió a los béticos nada más comenzar el
choque. Llegó primero ese tanto del galés en un error defensivo de los hombres
de Mel. Y más tarde, a los 39 minutos, el segundo tanto local, obra
impresionante de James en tiro directo a la portería de Adán. El árbitro de la contienda pitó una falta fuera del
área de Molinero a Cristiano. Pepe Mel mostró su disconformidad
porque entendió que el delantero portugués había arrollado a Molinero. Pero Hernández
Hernández, además de señalar el lugar donde el Madrid tenía que lanzar la
inexistente falta pidió calma al técnico verdiblanco, que no dejó de protestar la errónea decisión arbitral. En el lanzamiento de este castigo, James sorprendió con un tiro directo a
puerta. El balón dio por dentro de la madera y se coló en la portería de Adán.
Era el 2-0.
Hasta
este tanto y tras el tempranero gol de Bale a los dos minutos, el Betis intentó
superar el duro golpe ejecutado por el jugador madridista. Pero la BBC funcionaba con
muchas ideas y peligrosidad y fue Adán quien salvó duros remates de los
delanteros madridistas. Aunque el dominio era blanco, el cuadro verdiblanco logró
centrarse un poco en el terreno de juego para presentar su batallita ante el
cuadro del Bernabéu. A los 24 minutos hubo una acción ofensiva de Rubén Castro,
pero sin resultado positivo. Y con los contragolpes de Vargas y los intentos del
delantero canario llegó esa acción entre Molinero y Cristiano Ronaldo en la que
el juez de la contienda pitó esa falta inexistente. Lanzada a los 39 minutos
por James, el trallazo del colombiano se convirtió en el segundo tanto
local. Sin embargo, en este primer tiempo, a los 42 minutos de juego, Castro
tuvo una clara ocasión de marcar para poder acortar distancias, pero Keylor Navas,
con mucha fortuna, le quitó el balón al canario cuando el delantero bético iba a
rematar al marco madridista. De un posible 1-1, el primer tiempo finalizó con ese 2-0 a favor de los locales.
Otra
vez fue sorprendida la defensa del Betis a los dos minutos de comenzar la
segunda parte --47 de partido--. El Madrid marcaba el 3-0. Centró Bale y
Benzemá, de cabeza, mandó el balón al fondo de las redes de la portería
defendida por Adán. Pepe Mel hizo cambios --Molina salió en esta segunda parte y
Ceballos dejó su puesto a Digart en el 51--, porque el Betis quería morir, al menos, con las
botas puestas. Pero fue el Madrid, revolucionado, quien manejaba el choque a su
aire y a sus buenas maneras. Tres minutos después del tanto del francés de Lyon llegó la
chilena de James para poner el 4-1 en el marcador del Bernabéu. Hubo excesivos
titubeos en la defensa bética, y el jugador madridista, de chilena, marcó el cuarto tanto local. Adán llegó a rozar el balón,
pero no pudo evitar la tragedia. Sin embargo, el portero bético salvaría ante
Cristiano un mano a mano, con todo a favor del portugués en el minuto 59.
El
Betis, a pesar del 4-0, buscó la forma de salvar el honor en el Bernabéu. A los
60 minutos hubo un penalti de Varane a Molina. El defensa local derribó al delantero
bético dentro del área y Hernández Hernández señaló la marca de los once
metros. Pero Keylor Navas paró el balón lanzado en este máximo castigo por
Rubén Castro. Todo estaba en contra del equipo de Pepe Mel en el Bernabéu. Mientras
el Betis se movía por el campo en un mar de dudas y sin fortuna a la hora
de poder superar los malos mengues, el Madrid, que serenó algo su ímpetu
arrollador, estuvo cerca de marcar un quinto gol en el minuto 88, cuando Sergio
Ramos remató de chilena ante el marco de Adán. El balón dio en el poste y lo
controló el Betis. Y aunque a los 87 minutos volvió a fallar Cristiano en un mano
a mano con Adán, un minuto después, en el 88, llegó ese quinto tanto, que no fue nada malo para
el Madrid, marcado por Bale. El galés lanzó un duro zarpazo desde fuera del
área. El balón, tras dar en el interior del poste, llegó al fondo del marco
bético.
Duro varapalo del cuadro de Benítez al de Pepe Mel. El técnico
verdiblanco también tuvo fallos en el planteamiento del partido y en la
elección de los hombres claves para poder defender mejor y con más ideas este
fuerte choque liguero. El Betis se achicó en el gran estadio madridista. Jugó
con cierto complejo de inferioridad. Es cierto que el segundo gol del Madrid
llegó en una falta inexistente y que Castro pudo marcar dos goles –uno fue el
del penalti--, pero el equipo del Villamarín cometió muchos errores en defensas
y no hizo un trabajo correcto en el centro del campo para poder controlar a un
Madrid que saltó al terreno de juego con la idea fija de golear a su rival. Mucho
ha de trabajar Pepe Mel para que este Betis no sufra tanto.
FERNANDO
GELÁN
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