Los
aficionados disfrutaron con el brillante final del ciclo continuado de la Feria
de Abril. Se lidiaron reses de la ganadería de Miura --75 años ininterrumpidos
con sus toros en esta fiesta taurina que se celebra en la Real Maestranza--, y
Eduardo Dávila Miura y Manuel Escribano cortaron merecidas orejas a los toros
del mítico hierro. Fue un gran espectáculo taurino porque las estocadas de los dos
toreros que recibieron los trofeos concedidos por el presidente del festejo,
Fernando Fernández- Figueroa, fueron las mejores del ciclo abrileño. El diestro
de Gerena casi tuvo a su alcance las dos orejas, porque el público pidió más
premio para este torero cuando mató de forma efectiva y sin puntillas a “Bandolero”,
de 656 kilos.
Para participar en esta efeméride volvió al ruedo maestrante por un solo día Eduardo Dávila Miura después de nueve años de retirada. El diestro sevillano quiso estar de forma muy directa en esta celebración y lidiar dos toros del hierro familiar. Desde los tendidos le dedicaron una fuerte ovación antes de salir el primer morlaco a la plaza. Dávila Miura respondió a estas muestras de cariño saludando desde el centro del ruedo e invitando a sus dos compañeros de cartel a vivir este grato momento.
El
primer toro de su lote fue “Marchenero” de 599 kilos. Fue un animal complicado.
El toro perdió las manos durante la lidia y Dávila Miura arriesgó en todo
momento para poder superar las dificultades. Valiente y decidido intentó
achuchar al toro para la embestida, pero el animal se revolvía y metía la cara
arriba. Abrevió la faena y mató de estocada que asomó, pinchazo y descabello.
Pero
en el segundo de su lote, Dávila Miura encontró a un toro --“Barbareto”--, que
funcionó para que el torero sevillano llevara a cabo una faena llena de emoción
y de torería. Dávila Miura se lució con unas verónicas muy ajustadas. Con la
muleta trasteó con la intención de obligar al toro a la embestida. El torero
dio buenos pases de pecho y dando distancia para citar al toro logró muletazos
muy brillantes. Fue una lidia vibrante por la gran actitud de Dávila Miura ante
“Barbareto”. La entrega del torero fue total y la faena tuvo mucha profundidad.
Mató de fulminante estocada. El toro cayó sin puntillas y el premio fue una
merecidísima oreja.
Manuel
Escribano fue el segundo torero de este cartel para la historia. De rodillas
recibió al primero de su lote “Trapero”, de 559 kilos. El torero de Gerena dio
una bella larga cambiada. También se lució con buenas verónicas ante un toro
con buenos movimientos. Fue brillante la suerte de varas porque el picador citó
de largo y el de Miura respondió con bravura. Hubo ovación para José Manuel
Quinta. Escribano también fue protagonista en el tercio de banderillas y en el
tercer par paró con la mano al toro demostrando sus grandes facultades físicas.
El diestro de Gerena, al coger la muleta, recibió al toro con pases cambiados por la espalda. Escribano realizó un toreo muy templado. La serie que enjaretó fue muy
aplaudida. Pero “Trapero” cambió el juego y terminó revolviéndose y buscando el
cuerpo del matador. Insistió el de Gerena ante el miura, pero la lidia se hizo
ya más problemática. Mató con un pinchazo
y una estocada caída.
En
el segundo de su lote, Escribano se fue a portagayola y resolvió como pudo, a
un toro que salió distraído, el intento de la larga cambiada. El de Gerena
ejecutó buenas verónicas. “Bandolero”, de 656 kilos, respondió con bravura a la
cita del picador en el tercio de varas. Volvió Escribano a coger las
banderillas. Se quitó las zapatillas para correr en esta suerte delante del
toro y clavar los palos con mucha profesionalidad y riesgo. Brindó la muerte
del toro a Eduardo Dávila Miura por esa vuelta a los ruedos por un solo día en
la efeméride de la ganadería de Miura en Sevilla. Escribano realizó con la
muleta una faena muy templada ante un toro muy noble. El torero estuvo siempre
decidido y firme y dando el tiempo justo para ligar buenos naturales rematados
con el de pecho. Sonó la música por todos los méritos de Escribano ante “Bandolero”.
El torero sevillano dominó la lidia y llegó a citar al toro de rodillas. Fue
también muy brillante los ayudados por alto. La faena del sevillano fue templada,
honda y muy torera ante el noble miura. Mató de estocada efectiva y se ganó la
oreja. El público, entusiasmado con el toreo de Escribano, pidió un segundo
trofeo. pero el presidente de la corrida no volvió a sacar el pañuelo.
El
tercer torero de esta corrida conmemorativa que tuvo tantos atractivos fue Iván
Fandiño. Pero al torero de Orduña se enfrentó a los toros que tuvieron menos
respuesta en el Coso del Baratillo. En el primero de su lote, Fandiño estuvo
muy firme con el capote y dio unos buenos lances con las manos por delante.
Pero el miura --“Romanero”, de 609 kilos--, fue excesivamente enrevesado para
desarrollar una buena lidia. Fandiño logró algunos muletazos y llegó a lucirse
con un pase de pecho. Pero el toro se revolvía ante todos los intentos del
matador vasco. Mató de estocada trasera y tres descabellos.
Tampoco
tuvo suerte Iván Fandiño con el segundo de su lote, sexto y última de la
corrida de Miura. Recibió a “Inquisidor”, de 572 kilos, de rodillas para dar
una larga cambiada. Luego realizó verónicas muy templadas. Hubo aplausos para
el picador Manuel José Bernal en la suerte de varas. Pero el toro, cuando
Fandiño cogió la muleta, no dio ninguna opción. “Inquisidor” se revolvía y buscó
con muy malas intenciones el cuerpo del torero vasco. Tuvo que abreviar Fandiño
porque todos los intentos fueron inútiles. Mató de pinchazo y estocada.
FICHA DEL FESTEJO:
En la última corrida del ciclo continuado de la Feria de Sevlla 2015 celebrada en la Plaza de Toros de la Real Maestranza se lidiaron seis toros de la ganadería de Miura, bien presentados y de juego variado. Destacaron el segundo, tercero y cuarto.* Eduardo Dávila Miura, palmas y saludos y oreja.
* Manuel Escribano, ovación y saludos y oreja con petición de la segunda.
* Iván Fandiño, silencio tras aviso y silencio.
Incidencias
En tarde desapacible --con lluvia, viento y sol--, hubo más de tres cuartos de entrada. Fueron ovacionados los banderilleros Alberto Zayas y Joselito Rus, y los picadores José Manuel Quinta y Manuel José Bernal.
FIN DEL CICLO CONTINUADO DE LA FERIA DE SEVILLA Y PRIMEROS PREMIOS 2015
Se acabó el ciclo taurino de la Feria de Abril. Además del triunfo de Espartaco en la jornada inaugural de la temporada celebrada el Domingo de Resurrección --con salida por la Puerta del Príncipe--, las corridas previas al festejo en el Real y las que se han celebrado en los días de farolillos han tenido muchos atractivos. El ciclo fue siempre a más y este año la plaza registró siempre una buena entrada, rozando muchas veces el lleno. Se han visto buenos toros de varias e importantes ganaderías y el triunfo de muchos toreros. La Feria tuvo como base la presencia de José María Manzanares. El torero alicantino, que se apartó del polémico G5, pudo vivir en directo el apoyo y el cariño de la afición de Sevilla. Asimismo, el rejoneador de La Puebla del Río, Diego Ventura, volvió a salir a hombros por la Puerta del Príncipe de la Real Maestranza para seguir marcando el récord.
Ya se han concedido los primeros galardones de las corridas celebradas en el ciclo de la Feria. Los premios son los que otorga el equipo médico de la Plaza de Toros de Sevilla. En esta XXXVI edición de los trofeos de los Doctores Vila, los premios del "Quite artístico" fue concedido al torero Antonio Ferrera, por la original forma de sacar el toro del caballo con un quite de chicuelina, verónica y revolera, dejando en suerte al toro Plantillero, de la ganadería de Victorino Martín, el día 23 de abril. El del "Quite providencial" fue para el banderillero sevillano José María Amores, por el quite realizado a José Gómez en la suerte de banderillas, en el tercer toro de Parladé en la corrida del día 22 de abril. Estos premios se entregarán en el arranque de la temporada taurina 2016. (Fotos: Toromedia).
En tarde desapacible --con lluvia, viento y sol--, hubo más de tres cuartos de entrada. Fueron ovacionados los banderilleros Alberto Zayas y Joselito Rus, y los picadores José Manuel Quinta y Manuel José Bernal.
FIN DEL CICLO CONTINUADO DE LA FERIA DE SEVILLA Y PRIMEROS PREMIOS 2015
Se acabó el ciclo taurino de la Feria de Abril. Además del triunfo de Espartaco en la jornada inaugural de la temporada celebrada el Domingo de Resurrección --con salida por la Puerta del Príncipe--, las corridas previas al festejo en el Real y las que se han celebrado en los días de farolillos han tenido muchos atractivos. El ciclo fue siempre a más y este año la plaza registró siempre una buena entrada, rozando muchas veces el lleno. Se han visto buenos toros de varias e importantes ganaderías y el triunfo de muchos toreros. La Feria tuvo como base la presencia de José María Manzanares. El torero alicantino, que se apartó del polémico G5, pudo vivir en directo el apoyo y el cariño de la afición de Sevilla. Asimismo, el rejoneador de La Puebla del Río, Diego Ventura, volvió a salir a hombros por la Puerta del Príncipe de la Real Maestranza para seguir marcando el récord.
Ya se han concedido los primeros galardones de las corridas celebradas en el ciclo de la Feria. Los premios son los que otorga el equipo médico de la Plaza de Toros de Sevilla. En esta XXXVI edición de los trofeos de los Doctores Vila, los premios del "Quite artístico" fue concedido al torero Antonio Ferrera, por la original forma de sacar el toro del caballo con un quite de chicuelina, verónica y revolera, dejando en suerte al toro Plantillero, de la ganadería de Victorino Martín, el día 23 de abril. El del "Quite providencial" fue para el banderillero sevillano José María Amores, por el quite realizado a José Gómez en la suerte de banderillas, en el tercer toro de Parladé en la corrida del día 22 de abril. Estos premios se entregarán en el arranque de la temporada taurina 2016. (Fotos: Toromedia).
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