OPINIÓN.- El alcalde Zoido tiene la obligación de aclarar el whatsapp de Morante de la Puebla sobre su marcha atrás para torear en Sevilla

Todo parecía que la Empresa Pagés lo tenía atado y bien atado. Que el ambiente, a pesar de los nubarrones y las borrascas, estaba algo más despejado. Canorea y Valencia, que ya pidieron disculpas públicas a los G5 para poder pasar página por si este grupo de toreros se había sentido ofendido por ciertas declaraciones inoportunas en el pasado año, ya contaban con la vuelta de José María Manzanares y los deseos de Morante de la Puebla de torear nuevamente en Sevilla. Además, el cigarrero había comentado en algunos medios de comunicación su enorme deseo de estar presente en la temporada taurina de 2015. Pero el torero de La Puebla ha dado marcha atrás y ha roto el compromiso adquirido con la Empresa Pagés. Primero envió un whatsapp al alcalde de Sevilla para comunicarle que había tomado la decisión de no torear en el ciclo abrileño en la Real Maestranza y posteriormente redactó un breve escrito para difundir de forma oficial su nueva ausencia en los carteles taurinos de Sevilla. Canorea y Valencia le llegaron a ofrecer hasta cinco corridas, con el ganado que el torero quisiera, en la Feria de Sevilla y en San Miguel. Asimismo, los empresarios del Coso del Baratillo tuvieron contactos con los apoderados de Talavante, El Juli y Perera para cerrar algunas corridas, pero no hubo respuesta positiva y concreta para las contrataciones de estos diestros. Todos dijeron que lo pensarían. Pero el fuerte e inesperado zambombazo lo ha dado Morante de la Puebla. El torero, que ha sido siempre tan mimado y alentado por los aficionados de Sevilla, le ha dado un corte de mangas a esos miles de seguidores y a la ciudad de Sevilla. Dicen que detrás de toda la actuación de Morante en esta extraña espantada están las ambiciones del grupo de apoderados que forman el FIT. Su principal objetivo, al parecer, es añadir la gerencia de la Plaza de Toros de la Real Maestranza de Sevilla a la lista de cosos que ya gobiernan. Morante ha pasado de la afición de Sevilla y de la ciudad de Sevilla. Hasta se ha divulgado que el cigarrero quiso convencer a José María Manzanares, que ya estaba contratado por Pagés, para que también diera marcha atrás. Lo extraño de todo este lío taurino que ha formado Morante es el whatsapp que el torero de La Puebla envió al alcalde de Sevilla. Habría que preguntarse lo siguiente y analizar todo muy en profundidad: ¿Qué protagonismo tiene Juan Ignacio Zoido en todo este affaire taurino? ¿Busca el FIT el apoyo del político sevillano para forzar ante la Real Maestranza la salida de Canorea y Valencia con el fin de que el grupo que preside el apoderado de Morante tome las riendas de la empresa sevillana? El alcalde Zoido tendría que aclarar ese contacto con Morante, porque el contrato de la Empresa Pagés con la Real Maestranza de Sevilla está muy vigente.

FERNANDO GELÁN