sábado, 29 de noviembre de 2014

LIGA ADELANTE.- El Betis cantó la victoria bajo la lluvia ante el Llagostera en la piscina de Palamós con los goles de Rubén Castro y Rennella (0-2)



LIGA ADELANTE.-

En el Nuevo Estadio de Palamós Costa Brava se celebró el partido correspondiente a la 15ª jornada de la Liga Adelante entre la Unión Deportiva Llagostera y el Real Betis Balompié. El encuentro finalizó con el resultado de cero a dos (0-2) a favor del cuadro verdiblanco. Sufrida victoria del conjunto que transitoriamente prepara Juan Merino, porque la lluvia que cayó durante todo el partido convirtió el estadio de Palamós en una auténtica piscina donde fue difícil controlar bien el juego y poder desarrollar un fútbol en condiciones. Pero el Betis superó todos los complicados elementos meteorológicos para ganar en buena lid este partido que era fundamental para superar todos los últimos acontecimientos. Desde que comenzó el partido el terreno no estaba apto para poder practicar un fútbol adecuado. Palamós era una charca y los jugadores tuvieron que batallar en el campo realizando un tremendo esfuerzo físico ya que era complicado el control de la pelota, el marcaje y el desarrollo de ideas tácticas. Pero en esta pelea, que a las bravas frente al diluvio desarrollaron los dos equipos, el Betis fue más positivo a la hora de rentabilizar sus ganas, su fe y su mayor intensidad. La competición fue dura por parte de los dos equipos. Sin embargo, el cuadro de Juan Merino encontró las fórmulas precisas para lograr la victoria. A los 51 minutos marcó Rubén Castro el 0-1, y en el 79, Rennella logró el 0-2 para que el Betis, frente a la durísima tempestad del día, llegara las glorias de un triunfo merecido y justo. El equipo de Heliópolis cantó bien bajo la lluvia de Palamós y abre una nueva línea de esperanza en este debut de Merino al frente del equipo.

Revolución total en el club verdiblanco. Las aguas bajaban algo turbias y era necesario un cambio radical para que el timón fuera manejado por gente más competente. Hay nuevo presidente –Juan Carlos Ollero--, y entrenador transitorio o provisional, Juan Merino, tras la destitución de Julio Velázquez y a la espera de superar este bache y lograr el rumbo adecuado y firme para que todo se desarrolle con normalidad y se alcance el objetivo del ascenso.
Mientras la nueva directiva verdiblanca se asienta y toma cuerpo todos sus planes, aún está por decidir quién se hará cargo de forma oficial de la dirección técnica del equipo que está dando tantos tumbos. La moneda está en el aire y tiene dos caras: Pepe Mel y Lorenzo Serra Ferrer. Hasta que llegue el acuerdo con el entrenador fijo y que de más esplendor al Betis, en medio de todo este tumulto, se jugó el encuentro con el Llagostera, que podía servir para tapar las heridas abiertas.
El club de la Costa Brava está el puesto penúltimo de la tabla de clasificación y se presentaba como una perita en dulce para que los verdiblancos sacaran una buena tajada y poder superar las nervioseras. La Unión Deportiva de Llagostera, con cartel incluido, presentó este choque como el enfrentamiento del David –el cuadro local--, y Goliat –el Betis--, con onda preparada en manos de un futbolista de Llagostera para lanza la piedra contra el gigante verdiblanco que portaba lanza y escudo.

LAS CHARCAS EN EL ESTADIO DE PALAMÓS
Pero el agua fue protagonista desde que comenzó el partido. En la primera parte, la lluvia convirtió el terreno de juego en una charca impracticable para poder jugar al fútbol. Los dos equipos lucharon con toda la voluntad posible para poder superar todas los elementos en contra, pero los balones se quedaban parados sobre los charcos y los jugadores tenían que jugar al patadón y al tentetieso. No había forma de controlar el balón, porque el agua provocaba muchos enredos porque el enorme encharcamiento general del campo que descontrolaba a los futbolistas en su deseo de dominar el juego. Pocas filigranas se podían realizar con tanta agua sobre la yerba. Ningún jugador se arriesgaba porque era complicarse la vida sobre una auténtica piscina. Sin embargo, dentro de todas las complicaciones, fue el Betis quien más cerca estuvo de la portería en este primer periodo, con acciones realizadas por un positivo Kadir, y las acciones de NDiaye y Dani Ceballos. Pero no hubo acierto final en el remate. Lo intentó Ceballos desde lejos y Cejudo por dos veces, pero el balón no llegó con peligro al marco de Maragón.

LOS GOLES DE CASTRO Y RENNELLA
La segunda parte fue una batalla gigante sobre la charca de Palamós, que además, a medida que fue pasando el tiempo, se fue convirtiendo en un auténtico barrizal. Pero los dos equipos estaban dispuestos a dejarse la piel sobre la piscina y el choque fue trepidante y espectacular bajo el diluvio universal. Con poco juego, pero con enorme suspense porque el balón hacía jugarretas sobre el agua, los jugadores tenían que superar la situación metidos en agua hasta los tobillos. Pero en esta lucha acuática el Betis fue más pícaro. A los 51 minutos de juego, en jugada de Rennella por la izquierda –que acababa de salir el campo--, con intervención de Kadir por la derecha, permitió un remate de cabeza de Rubén Castro, impecable, para batir a Maragón. Llegaba bajo la lluvia el 0-1, festejado por todo el equipo verdiblanco por el esfuerzo colectivo de todos los hombres.
No se achicó el Llagostera por el golpe recibido y hasta provocó un susto en el área bética --minuto 67--, porque un balón fue desviado por un defensa bético, al intentar despejar un centro de Tarradellas, terminó dando en el larguero y atrapado finalmente por Adán. La lluvia fue más intensa aún en la recta final del partido para poner más impracticable el terreno de juego. Pero en la batalla acuática volvió a marcar el Betis. En el minuto 79, Rennella, a pase magistral de Rubén Castro, que superó antes la entrada de un defensa, colocó el 0-2 en el marcador del estadio de la Costa Brava.
En la recta final, con la que estaba cayendo sobre la yerba, era ya buscar el salvavidas. El Betis aguantó bien todo el chaparrón y logró una victoria importante para darle el cambio que tanto esperan los aficionados verdiblancos. Además, Merino supo ajustar bien el equipo, meterlos en el camino adecuado y acertando en los cambios para tener siempre el partido controlado. No cabe duda que el esfuerzo de los futbolistas béticos fue genial para alcanzar esta gran victoria. Feliz debut del transitorio Merino, que supo darle más alma al equipo. Goliat --el Betis--, venció a David --el Llagostera-- porque los verdiblancos se agigantaron bajo el diluvio.

FICHA TÉCNICA:
Alineaciones:
Unión Deportiva Llagostera: Moragón; Aimar, Alcalá, Jorge, Ruymán (Imaz, minuto, 62); Diego Rivas, Tito; Tarradellas (Pitu, minuto, 70), Eloy Gila (Sergio León, minuto, 62), Ríos; Querol
Real Betis Balompié: Adán; Molinero (Piccini, minuto, 64), Bruno, Jordi, Varela; Xavi Torres; Ceballos (Rennella, minuto, 48); Kadir (Caro, minuto, 71), Ndiaye, Cejudo; y Rubén Castro
Goles:
0-1, minuto, 51: Rubén Castro, y 0-2, minuto, 79, Rennella.
Árbitro:
Sagués Oscoz. Amonestó a Eloy Gila (minuto, 33) y Alcalá (46), por el Llagostera; y Jordi Figueras (minuto, 34); Varela (56), Bruno (minuto 69), por el Betis.
En el estadio de Palamós, con el terreno de juego en pésimas condiciones por las fuertes lluvias, se jugó el partido correspondiente a la 15ª jornada de la Liga BBVA entre el Llagostera y el Real Betis. Asistieron a este encuentro cerca de 4.000 seguidores béticos (Fotos: UELL y LFP).


* PULSAR PARA VER EL VÍDEO DEL PARTIDO REALIZADO POR LA LIGA DE FÚTBOL PROFESIONAL (LFP) DE LA LIGA ADELANTE:
Sábado 29 de noviembre 2014Llagostera (0-2) R. Betis

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