LIGA BBVA.- Solo un empate a cero pudo lograr el Betis en el pobre partido que realizó ante el Valladolid en Zorrilla

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Llegó el 4 de enero de 2014 y, en la recta final de las fiestas, también llegaron los partidos de la Liga de las Estrellas. Tras el parón de darle al balón por las fiestas navideñas, ahora toca comerse el rosco de reyes y buscar la sorpresa-sorpresa. El Real Betis Balompié viajó hasta la ciudad del Pisuerga para jugar el partido de la 18ª jornada del torneo BBVA frente al Valladolid. Sevilla y Valladolid son ciudades de grandes pasiones semanasanteras. Betis y Valladolid tenían que preparar la pasión según los goles para llevarse los tres puntos y poder seguir a flote en la tabla clasificatoria del torneo de la regularidad.

Así, pues, en el Nuevo Zorrilla se celebró el partido correspondiente a la 18ª jornada de la liga BBVA entre al Real Valladolid y el Real Betis. El partido finalizó con el resultado de empate a cero. El empate del miedo. Porque los dos equipos jugaron mayormente a no perder. Ha sido un partido jugado horrorosamente por ambas partes. Juego con muchas imprecisiones, errores, lento, sin ritmo y sin apenas remates. El Betis buscó con peligro goles en el primer tiempo, pero en la segunda parte apenas inquietó al Valladolid, que fue el equipo que en esta segunda mitad pudo sorprender varias veces a Sara. Pero ninguno de los delanteros de los dos equipos supo hacer esta fructífera labor. Además, en el cuadro de Garrido, Rubén Castro no está en su mejor nivel de juego y su olfato de gol está bastante atascado. Al menos, el empate, el reparto de punto, el puntito de oro, es un pequeño pasito adelante. Ha sido el primer punto de la era Garrido. Pero aún queda mucho por resolver en el equipo hasta que todo este tinglado que tiene encima el Betis se pueda enderezar de forma más conveniente.

El Betis, para salir del pozo, para dejar el farolillo rojo, tenía que empezar ganando en el Nuevo Zorrilla para dejar de ir dando tantos tumbos. En los primeros meses de la temporada, el cuadro verdiblanco ha sufrido una enormidad y la afición del manque pierda quiere que el equipo gane sí o si para dejar de tener la soga al cuello. Muchas críticas recibió la directiva que preside Guillén –Rey Baltasar en la Cabalgata del Ateneo que se espera que llegue desde Oriente en la carroza de la esperanza--, por las malas andaduras del equipo que costó la destitución de Pepe Mel, el despido de Stosik y la llegada de Garrido para poder salvar los muebles hasta el final de la temporada.

Por tanto, había un compromiso muy serio y fuerte de los verdiblancos de Garrido en el Nuevo Zorrilla. El equipo buscó un buen regalo de Reyes, pero el preparador del club de Heliópolis, aún no ha encontrado la fórmula de quitar a los hombres de la plantilla el terrible peso del drama que les machaca. El empate a cero en Valladolid es una renta pobre. Es un punto más. Pero la imagen del equipo en el terreno pucelano ha sido muy deprimente. Salvo un par de jugadas en el primer tiempo y el remate de Juan Carlos casi en el minuto 90, el Betis ha estado horrorosamente mal.

REAL VALLADOLID, 0; REAL BETIS BALOMPIÉ, 0,.
En el primer tiempo, tanto el Valladolid como el Betis, intentaron controlar el juego y el balón para no sufrir sorpresas inesperadas. Aunque el terreno de juego estaba bastante resbaladizo por la lluvia, los dos equipos, al menos, intentaron poner corazón y garra porque saben que están en complicadas situaciones clasificatorias. El Valladolid está momentáneamente por encima de la cola, pero no puede perder el compás si quiere salvar el pellejo. El Betis, que está con el farolillo rojo, era el equipo que más se jugaba en este choque inaugural del año 2014. Y quiso empujar lo indecible para llegar con algún peligro al área de los pucelanos. Fue, además, un primer tiempo de muchos saques de esquinas –el Valladolid lanzó 7 sobre el portal de Sara y el Betis 4 contra el área local--, pero ninguno de estos lanzamientos creó un serio peligro para los equipos. Aunque el Valladolid fue quien llegó en este periodo con más continuidad al área verdiblanca –vestidos hoy con camiseta verdinegra--, fue el equipo de Juan Carlos Garrido quien estuvo más cerca del gol. A los 19 minutos Jorge Molina tuvo una ocasión clara para superar a Mariño –no lo consiguió porque el balón lo detuvo el portero vallisoletano--, y a los 44, en la recta final de estos primeros cuarenta y cinco minutos, fue Verdú quien quiso sorprender al meta local cuando sacó un balón en falta desde el borde del área pucelana. Pero era tan pobre el juego que se estaba desarrollando en el Nuevo Zorrilla que hasta el juez de la contienda, el madrileño Velasco Carballo, pitó un minuto antes el final del primer tiempo.

En la segunda mitad, dentro de la flojedad del choque, las imprecisiones, la falta de rimo y de peligro en las áreas, el Betis perdió algo el rumbo del juego y fue el Valladolid quien manejó mejor la contienda a su favor. El cuadro pucelano fue en este periodo más ambicioso ante un Betis desdibujado y atemorizado. Sara, en varias ocasiones –en especial en el minuto 77 de partido--, desvió a córner un peligroso lanzamiento de Peña al portal bético. En estos cuarenta y cinco minutos, y a medida que el tiempo iba transcurriendo, el cuadro de Garrido –ya con Salva Sevilla y Nono en el terreno de juego que relevaron a Matilla y Verdú--, se dedicó más a amarrar el empate para, al menos, agarrar un punto. Esta forma de afrontar el partido permitió al Valladolid dominar el juego, controlar el balón y llegar con cierto peligro a los dominios de Sara. Menos mal que los delanteros pucelanos no acertaron a meter la bolita dentro de las redes del equipo de la Palmera. Ya en la recta final, Juan Carlos pudo sorprender a Mariño, pero el balón pasó por delante de la portería y se perdió por la banda.

Mal el Betis. Dio en Valladolid una pobre impresión. Hizo mal juego y ofreció una mala imagen. El juego del cuadro bético fue impreciso y decepcionante. Faltó remate y faltaron ideas. Hubo poca organización. Fue muy deficiente el centro del campo y no hubo apenas mordiente en la delantera. Se salvó la defensa y el portero. Pero poco más. Hasta Garrido, que no estuvo fino en la alineación, fracasó. El preparador bético ha de trabajar muy en profundidad para salvar al equipo de males mayores. La alarma sigue en el Betis.

FICHA TÉCNICA:

Alineaciones:
Real Valladolid: Mariño; Rukavina, Valiente, Rueda, Peña; Rossi (Rama, minuto 92), Rubio, Víctor Pérez; Larsson (Manucho, minuto 82), Omar (Óscar, minuto 75) y Javi Guerra.
Real Betis Balompié: Sara; Chica, Paulao, Amaya, Dídac; Verdú (Nono, minuto 75), Matilla (Salva Sevilla, minuto 60); Lolo Reyes, Juan Carlos; Castro (Chuli, minuto 86) y Jorge Molina.
Árbitro:
Carlos Velasco Carballo (Comité Madrileño). Amonestó a Rubio.
Incidencias:
Estadio Nuevo Zorrilla, con asistencia de casi 15.000 espectadores. El terreno de juego muy resbaladizo por la lluvia. (Foto: Liga BBVA).-