El Aula Taurina de Loyola Andalucía ha comenzado su andadura en el Campus de Sevilla-Palmas Altas. Y lo ha hecho con curiosidades, anécdotas, vivencias y reflexiones compartidas con numerosos alumnos de grado y postgrado sobre el rico y complejo mundo del toro desde los ojos de un matador, Francisco Rivera Ordóñez, quien, con 1.500 corridas de toros en su haber, ha sido el primer invitado a esta nueva actividad puesta en marcha por iniciativa de un grupo de aficionados de la Universidad.
En un diálogo cercano y distendido de casi dos horas ante un auditorio de 60 jóvenes, el diestro se ha sincerado y ha respondido a todas las preguntas planteadas por los estudiantes. Ante la pregunta de qué haría para inculcar entre los jóvenes la afición a los toros, Rivera Ordóñez ha asegurado que “el respeto es fundamental, la base, porque no puedes convencer a nadie de que le guste algo. Simplemente les diría, ve sin prejuicios y vívelo, el toreo es un arte vivo que transmite sensaciones únicas en momentos que no vuelven a repetirse nunca”.
El binomio miedo-valor también ha despertado la curiosidad de los presentes, “claro que los toreros sentimos miedo, quien diga lo contrario miente, pero somos conscientes del riesgo y lo asumimos”, ha asegurado; así como su visión del torero y el toreo “es lo más bonito que me ha pasado en la vida, aunque ser torero significa anteponer el toro a todo, porque el toro te entrega su vida, pero tú también tienes que dedicarle la tuya por entero”. Por eso, sobre su retirada como matador de toros ha reconocido que después de una unión tan “brutal” siempre se sentirá “mutilado, porque lo que sentía delante del toro no volveré a sentirlo nunca en ninguna otra faceta”.
Sobre la situación actual de la fiesta también ha dado su opinión. “Estamos en el peor momento para ser torero. Sobran toros, festejos y, por supuesto toreros. Va a haber una criba natural muy fuerte hacia la calidad”. (Fuente: L.A)
En un diálogo cercano y distendido de casi dos horas ante un auditorio de 60 jóvenes, el diestro se ha sincerado y ha respondido a todas las preguntas planteadas por los estudiantes. Ante la pregunta de qué haría para inculcar entre los jóvenes la afición a los toros, Rivera Ordóñez ha asegurado que “el respeto es fundamental, la base, porque no puedes convencer a nadie de que le guste algo. Simplemente les diría, ve sin prejuicios y vívelo, el toreo es un arte vivo que transmite sensaciones únicas en momentos que no vuelven a repetirse nunca”.
El binomio miedo-valor también ha despertado la curiosidad de los presentes, “claro que los toreros sentimos miedo, quien diga lo contrario miente, pero somos conscientes del riesgo y lo asumimos”, ha asegurado; así como su visión del torero y el toreo “es lo más bonito que me ha pasado en la vida, aunque ser torero significa anteponer el toro a todo, porque el toro te entrega su vida, pero tú también tienes que dedicarle la tuya por entero”. Por eso, sobre su retirada como matador de toros ha reconocido que después de una unión tan “brutal” siempre se sentirá “mutilado, porque lo que sentía delante del toro no volveré a sentirlo nunca en ninguna otra faceta”.
Sobre la situación actual de la fiesta también ha dado su opinión. “Estamos en el peor momento para ser torero. Sobran toros, festejos y, por supuesto toreros. Va a haber una criba natural muy fuerte hacia la calidad”. (Fuente: L.A)
No hay comentarios:
Publicar un comentario