Se jugó en el Vllamarín el partido de vuelta de la Copa del Rey, entre el Betis (División de Honor de la Liga BBVA) y el Lérida (Segunda B), correspondiente a los dieciseisavos de final del torneo del K.O.
El Betis, que sigue en Europa y sin la casa sin barrer en la Liga Española, volvía de nuevo a Heliópolis en choque copero para armarse de moral para que al final salgan todas las cuentas. El entrenador actual, Garrido, que con protestas y polémicas relevó en el banquillo al deseado Pepe Mel, tiene por delante un complicado panorama futbolero de aquí a final de temporada. Garrido, ex del Villarreal y Brujas, ha de actuar con mano dura –deportivamente se entiende--, para encarrilar el camino hacia la esperanza, aunque todavía no se ha producido el deseado revulsivo.
Así, con con este panorama, el Real Betis jugó a las siete y media de la tarde de este jueves 18 de diciembre, en su estadio. Los verdiblancos empataron a dos ante el Lérida en este partido de vuelta, pero pasan a los octavos de final de la Copa del Rey por el global de 4-3 a su favor. El equipo de Juan Carlos Garrido ganó 1-2 en la la ida.
REAL BETIS BALOMPiÉ, 2; LLEIDA SPORTIU, 2.- (4-3 a favor del Betis en el total de la eliminatoria copera).-
A los diez minutos del esta supuesto trámite copero ya tenía el Betis dos goles en el zurrón, colocando en este primer periodo del partido un contundente 4-1 en el global de la eliminatoria. A los cinco minutos de juego marcó Paulao, al rematar de cabeza un saque de esquina. Después lo hizo Amaya, a los diez minutos de juego, cuando lanzó un balón con la zurda al fondo del marco de los visitantes. Las dos acciones ofensivas del cuadro de Garrido fueron a balón parado, porque se iniciaron en dos saques de esquinas. En el tanto de Amaya intervino en la jugada Rubén Castro. Curiosamente, los goles fueron marcados por dos defensas centrales. Siguió el Betis con mando y domino y Juanfran no acertó a marcar el que parecía el tercer gol. Aunque el extremo picó el balón ante la salida de Núñez, el guardameta leridano, salvó Barrera en la misma línea de puerta.
Desde esta jugada, que pudo ser ya definitiva para marcar el revulsivo, se pasó tristemente a la mandanga. El equipo verdiblanco se relajó y fue el Lérida quien comenzó a controlar el juego y a mandar en el partido. A los 38 minutos de este primer periodo lanzó Monforte una falta cometida por Nono y el balón se coló sorprendentemente en la meta de Sara. Quizás Osado peinó el cuero con el flequillo, pero ni la defensa ni el portero supieron atajar el remate. 2-1 al final del primer tiempo y con sustos y pitos desde la gradas por el conformismo de los verdiblancos.
Pero en la segunda parte del partido, el Lérida estuvo a punto de noquear a los verdiblancos y dar la sorpresa. A los cinco minutos de este periodo –55 de partido--, Jaime Mata marcó el 2-2 y puso la grada del Villamarín con las garras afiladas. Porque, además, en estos cuarenta y cinco minutos, el equipo leridano fue quien tuvo más eficacia, trabajando con una enorme fe en busca de ese gol que le podía dar el paso a los octavos. Al equipo de Juan Carlos Garrido no le salía nada. Siempre desbordado, fallón, sin remate, con nerviosos defensivos y sin ideas. Ninguno de sus atacantes, ni Castro ni Molina, fueron capaces de crear ocasiones de gol. Un Betis totalmente hundido, sin chispa, ni genio, muy temeroso y arrollado por un Segunda B. Además, en la recta final, el partido se endureció y hubo sus agresiones, grescas y rifirrafes. Afortunadamente, el cuadro catalán no estuvo lo bastante fino para redondear la hazaña. Los aficionados, descontentos, censuraron la mala imagen que el equipo verdiblanco estaba ofreciendo. Menos mal al final le salvó la campana, que tocó en el minuto 93. Ni “mano” de Garrido ni talante en los jugadores. El Betis es un equipo a la deriva. La afición, descontenta, explotó nuevamente contra Stosic y la directiva. Ahora bien, dentro del drama verdiblanco, el club de Heliópolis sigue en Copa del Rey --es el único equipo sevillano en esta competición--, y en la Liga Europea. Ahora le toca dejar el farolillo rojo en la Liga BBVA.
FICHA TÉCNICA:
Alineaciones:
Real Betis: Sara, Steinhöfer, Amaya (Didac, m.28), Paulao, Nacho; Nono, Verdú (Vadillo, m.71), Salva Sevilla; Juanfran (Lolo Reyes, m.61), Jorge Molina y Rubén Castro.
Lérida: Pau Núñez; Barreda, Aldalur, Mario (Imaz, m.75), Raúl Fuster, Molo, Monforte (Miramón, m.71); Pau Bosch, Chupe, Osado (Didac, m.81), y Mata.
Goles:
1-0, minuto 5 Paulao; 2-0, minuto 10 Amaya; 1-2, minuto 38 Monforte y 2-2, minuto 56 Mata.
Árbitro:
Alberto Undiano Mallenco (Colegio Navarro). Mostró tarjeta amarilla a Mario (minuto 13), Paulado (minto 66), Vadillo (minuto 79), Molo (minuto 79), Nacho (minuto 80), Bowsch (minuto 91) y Nono (minuto 92) .
Incidencias:
Partido de vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey disputado en el Benito Villamarín ante unos 11.000 espectadores. Pese a la clasificación del equipo bético, ubo pitada general de los aficionados al equipo. (Foto: Liga BBVA).
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