El PA pide a Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía, "que deje de hacerse la nueva"

* Manuel Visglerio recuerda que Díaz votó en el Congreso a favor del Estatut en 2006. Le reta a mostrar el número de familiares de miembros de su gobierno que trabajan para la Junta

El secretario provincial del Partido Andalucista (PA) en Sevilla, Manuel Visglerio, ha pedido hoy a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, “que pare ya de hacerse la nueva cuando lleva desde 1999 dedicada exclusivamente a la política”. Asimismo, Visglerio le parece “especialmente complejo el desdoblamiento de personalidad” de Díaz, “que ayer criticó la labor de Zapatero con el Estatut, pero obvió que ella lo aprobó entonces como diputada por Sevilla que era en 2006”
Según el líder del PA en Sevilla, Díaz “debería de dejar de hacer teatro con medidas como la renta o sus declaraciones rimbombantes como la de ser implacable con la corrupción, cuando ella y su partido llevan años obstaculizando la labor de la justicia en el caso de los ERE”. Así, Visglerio la ha retado a que “haga públicos los familiares de primer, segundo y tercer grado de todos los miembros de su gobierno y de la ejecutiva del PSOE que trabajan para la Junta de Andalucía o cualquiera de sus fundaciones, agencias o sociedades instrumentales”. Defiende Visglerio que “sí de verdad quiere dar ejemplo de transparencia, se debe comprometer a ello”, así como informar la vía de acceso a dichos empleos.
El secretario provincial de los andalucistas sevillanos propone que “de una vez por todas, la presidenta deje de dar lecciones de transparencia y haga público el número total de los trabajadores de la administración paralela de la Junta y su remuneración. Los ciudadanos tenemos derecho a saber en qué y en quién se gasta el dinero de nuestros impuestos”.
“La esencia de la transparencia es la información, si ésta se oculta, se cercena uno de los pilares básicos de la democracia. Tenemos derecho a saber para poder valorar si queremos mantener el gasto en dependencia, educación y sanidad en lugar de hacerlo en agencias, fundaciones y empresas públicas de gestión opaca y en las que se contrata sin garantizar en lo más mínimo los principios de igualdad, merito y capacidad consagrados por la Constitución”.