FERIA DE SAN MIGUEL.- Puerta del Príncipe para José Mari manzanares que cortó tres orejas en la Plaza de Toros de Sevilla

José Mari Manzanares ha sido el gran triunfador de la última corrida de la Feria otoñal de San Miguel celebrada en la Plaza de Toros de la Real Maestranza de Sevilla. Cortó tres orejas –dos en el primer toro y otra en el tercero de su lote--, en un festejo que tuvo un enorme poder de convocatoria. Fue un mano a mano espectacular y de gran calidad torera entre José Mari Manzanares y Alejandro Talavante. Respondieron algunos de los toros de Núñez del Cuvillo y de Juan Pedro Domecq y los matadores, entregados, valientes, inspirados y derrochando valentía y torería, armaron la revolución en una plaza que siempre valoró el buen toreo de los dos espadas. Manzanares, con esas tres orejas, salió nuevamente por la Puerta del Príncipe entre el júbilo y la alegría de los aficionados. Más de hora media de corrida que fue seguida con intensidad hasta el último momento. Apoteosis total en el Coso del Baratillo. 

FICHA DE LA CORRIDA:

Tercer y último festejo del ciclo taurino –25º del abono de la temporada--, de la feria otoñal de San Miguel en la Plaza de Toros de la Real Maestranza de Sevilla. Se lidiaron reses de Juan Pedro Domecq y de Núñez del Cuvillo. Los toros fueron bien presentados, algunos muy bravos y con casta. En el cartel de la corrida, en mano a mano, José Mari Manzanares y Alejandro Talavante.

·       José Mari Manzanares, dos orejas, ovación y oreja tras aviso.

·       Alejandro Talavante, ovación, oreja y ovación.

En el segundo del lote de José Mari Manzanares saludaron los banderilleros Juan José Trujillo y Raúl Rodríguez, así como el subalterno Curro Javier. En el primer toro del lote del torero alicantino resulto volteado el banderillero de la misma cuadrilla Luis Blázquez, que pasó a la enfermería. 

Parte médico del banderillero Luis Blázquez que ha remitido el equipo médico de la Plaza de toros de Sevilla:
"Picontusión, abdominal y en miembro inferior derecho, prentando erosiones superficiales, y refiriendo dolor en hemiabdomen derecho, a la exploración dolor a la palpación sin signos de irritación peritoneal, se mantiene en observación, permaneciendo hemodinamicamente estable hasta su traslado. Pendiente de completar en hospitalización pruebas complementarias. Pronóstico: Reservado. Le impide continuar la lidia".
El parte está firmado por el Dr. Octavio Mulet Zayas.

La Plaza de Toros de Sevilla registró un lleno completo. Tarde con ligero viento y con fina lluvia final.   

CRÓNICA DE FERNANDO GELÁN

Brillante cierre del ciclo taurino de la Feria de San Miguel en la Plaza de Toros de Sevilla. Apoteósica actuación de José Mari Manzanares en dos de los toros de su lote. El cartel, con un mano a mano entre el torero alicantino y Alejandro Talavante, tuvo gancho y los tendidos y las gradas del Coro del Arenal estaban a revienta calderas. El triunfador de este festejo ha sido de forma espectacular José Mari Manzanares. Su toreo fue enorme, sensacional, creativo y subyugante. Dos orejas en el primero de su lote y otra en el quinto de la tarde para abrir de forma meritoria la Puerta del Príncipe y salir en olor de multitudes. Toreo de inspiración, creativo y dominador. José Mari Manzanares volvió a dar una lección magistral. Ante “Trampilla” de 543 kilos (Núñez del Cuvillo), sorprendió yéndose a portagayola. Manzanares, además de su calidad, demostró valentía y firmeza. Las tandas del torero alicantino a este primer toro de su lote fueron de una enorme maestría. Toreo suave y sereno. La música sonó en su honor y aunque sufrió una voltereta, el torero mantuvo el pulso firme y la cabeza muy centrada. Mató de estocada efectiva y logró las dos merecidas orejas.

En el segundo toro del lote –“Rasguero” de 510 kilos (Juan Pedro)--, hubo de todo a pesar del esfuerzo de Manzanares y de la cuadrilla para poder mantener el ritmo alto. El torero también se fue a portagayola y hasta realizó una buena tanda de ajustas chicuelinas. Con este toro se lucieron los subalternos de Manzanares –sonó la música para ellos--, y, además, tuvieron que salir a saludar a los medios. Pero el morlaco se rajó en la suerte final y de nada sirvió el esfuerzo del alicantino para superar la irregularidad de la res.

Manzanares fue a por todas en el tercer toro de su lote para ganarse la salida por la Puerta del Príncipe. Y como no hay quinto malo –era el quinto de la tarde, de nombre “Arrempujo, de 535 kilos (Juan Pedro)--, el alicantino se centró, se fajó y meditó para desarrollar una gran faena. El ritmo de Manzanares fue tremendo, con precisas y lentas tandas de naturales y derechazos, con pases ajustados que se remataban con el de pecho marcando las distancias y con las zapatillas ajustadas al albero. Y la música de Tejera.  Y el júbilo en los tendidos. Circulares suaves. Trincherillas. Temple y calidad. Dominio y torería. Hasta por manoletinas finalizó las series el magistral matador alicantino. Mató de estocada algo tendida y descabello. Hubo un aviso, pero también la oreja. Era el tercer apéndice para salir por la Puerta Grande del Príncipe de la Maestranza de Sevilla. Arte total. Faenas que quedarán grabadas para siempre en las retinas de los jubilosos aficionados que eran felices en tendidos y gradas.

Alejandro Talavante fue el gran rival de Manzanares en este mano a mano preparado por la Empresa Pagés para cerrar el ciclo de San Miguel. No defraudó el extremeño que siempre mantuvo en la plaza un digno nivel. El de Badajoz cortó una oreja en el segundo de su lote, pero ante los otros dos toros de su lote también realizó ajustadas y magistrales faenas para hacer vibrar al público que lo pasaba en grande en los tendidos del coso baratillero.

Talavante se enfrentó primero a un toro de Núñez del Cuvillo –“Vitorito, de 515 kilos--, a portagayola. Aunque no le faltó valor y maestría al extremeño, el morlaco no respondía claramente a la citas del torero. Siempre estuvo firme a ajustado Talavante ante la res, pero no había mucha emoción en el ruedo. El de Badajoz mató pronto a “Virotito”.

En el segundo de su lote, Talavante quería sacarse la espinita. El torero fue a por todas ante este toro –“Destilado”, de 509 kilos (Juan Pedro)--. Y aunque en el inicio de la faena el morlaco no parecía muy boyante, Talavante forzó el ritmo con la muleta y su toreo fue armonioso, firme y atractivo. Molinetes. Pases de pecho. Trincherazos. Y hasta manoletinas como Manzanares. Talavante superó al animal en todos los terrenos con sus ganas y su arte. Sonó la música para ambientar la plaza que echaba humos. Mató de estocada y se ganó la oreja.

Cerraba plaza con el tercero de su lote y sexto de la corrida Alejandro Talavante. Pero el toro – “Ponderoso” de 509 kilos (Núñez del Cuvillo)--, fue muy desigual y cambiante. El torero de Badajoz se entregó con valentía y ambición. Pero el morlaco fue siempre peligroso. Ante tanta dificultad, Talavante fue exponiéndose con todas sus virtudes. Cada pase era un riesgo. Pero la entrega era total. Pinchó. Llevó a cabo una estocada en dos tiempos y tuvo que descabellar para liquidar al morlaco.

Pero fue una gran tarde de toros. Un festejo espectacular por esas tres orejas de Manzanares y la oreja de Talavante. En la Maestranza se toreó de verdad, con arte, con valentía, con firmeza y, sobre todo, con serenidad, con muletazos lentos y armoniosos. La gran fiesta de los toros en la plaza de Sevilla.

(Foto: maestranza.es)