FÚTBOL.- El Betis, con el 3-0 al Nástic en Heliópolis, se coloca en puestos de ascenso a Primera
Real Bstis, 3: Nástic de Tarragona, 0.-
Ha tenido fortuna el cuadro que prepara Tapia, porque en los mejores minutos de fútbol, cuando sobre la yerba estaban once contra once y los de Tapia eran más audaces y superiores, no supo el once de Heliópolis demostrar su eficacia y su contundencia.
El juego positivo de Emaná, con un acertado Mehmet Aurelio y un irregular Sergio García, pero siempre en la brecha y corretón, colocaba al cuadro sevillano en la cresta de la ola.
Sin embargo, pocos minutos duró ese sueño, Y eso que el Nástic se quedó con diez jugadores, en el minuto 17, por expulsión del ya conocido Mingo –que se pele, le gritaban en las gradas--, porque había empleado excesiva dureza en zanjar la jugada de uno de los hombres verdiblancos.
A pesar de la superioridad numérica y de la falta de peligro visitante, el Betis se metió en un túnel profundo, sin encofrar el ritmo adecuado para ganarle con fe y entrega todo los terrenos el once de Tarragona, muy disminuido en todas sus líneas.
Sin embargo, en una remate de Mehmet Aurelio, en fuera de juego, sirvió al Betis para fortalecer su torpe actitud y su desgana. Un uno a cero que partía por la mitad a un Nástic, con poquísimos recursos. En el cuadro de Tarragona formaba un viejo conocido del Betis, el popular José Mari, que nada demostró en este choque futbolero.
A su ritmo, con caminar muy cansino, el Betis pudo aumentar su cuenta de goles, con un zarpazo de Sergio García y un pedazo de gol de Emaná, pieza fundamental en este Betis de luces y sombras y con muchos altibajos.
Con este abultado resultado, el Nástic fue ya equipo totalmente vulnerable, que nada aportó sobre el terreno de juego. Buscó el cuadro de Heliópolis aumentar sus dianas en la meta tarraconense, pero hubo errores en los remates de los delanteros locales.
Como siempre, Emaná es quien lleva el peso del equipo, tanto a las duras como en las maduras. Y la sorpresa en este litigio ha sido, sin duda alguna, la presencia como titular de Mehmet Aurelio, que además abrió la senda de los goles, aunque en situación ilegal. Pero el tanto se dio por válido y todo fue ya coser y cantar para un Betis que ha de dar una imagen más brillante, porque no rompe y rasga de forma definitiva.
Se coloca en puestos de ascenso el cuadro que prepara Tapia. Albricias. Y, a partir de aquí, ha de luchar para no perder más el compás del pase a la Primera División. El Betis de Lopera ha de coger el ritmo adecuado para amarrar ese ascenso tan esperado.
Real Bstis, 3: Nástic de Tarragona, 0.-
Ha tenido fortuna el cuadro que prepara Tapia, porque en los mejores minutos de fútbol, cuando sobre la yerba estaban once contra once y los de Tapia eran más audaces y superiores, no supo el once de Heliópolis demostrar su eficacia y su contundencia.
El juego positivo de Emaná, con un acertado Mehmet Aurelio y un irregular Sergio García, pero siempre en la brecha y corretón, colocaba al cuadro sevillano en la cresta de la ola.
Sin embargo, pocos minutos duró ese sueño, Y eso que el Nástic se quedó con diez jugadores, en el minuto 17, por expulsión del ya conocido Mingo –que se pele, le gritaban en las gradas--, porque había empleado excesiva dureza en zanjar la jugada de uno de los hombres verdiblancos.
A pesar de la superioridad numérica y de la falta de peligro visitante, el Betis se metió en un túnel profundo, sin encofrar el ritmo adecuado para ganarle con fe y entrega todo los terrenos el once de Tarragona, muy disminuido en todas sus líneas.
Sin embargo, en una remate de Mehmet Aurelio, en fuera de juego, sirvió al Betis para fortalecer su torpe actitud y su desgana. Un uno a cero que partía por la mitad a un Nástic, con poquísimos recursos. En el cuadro de Tarragona formaba un viejo conocido del Betis, el popular José Mari, que nada demostró en este choque futbolero.
A su ritmo, con caminar muy cansino, el Betis pudo aumentar su cuenta de goles, con un zarpazo de Sergio García y un pedazo de gol de Emaná, pieza fundamental en este Betis de luces y sombras y con muchos altibajos.
Con este abultado resultado, el Nástic fue ya equipo totalmente vulnerable, que nada aportó sobre el terreno de juego. Buscó el cuadro de Heliópolis aumentar sus dianas en la meta tarraconense, pero hubo errores en los remates de los delanteros locales.
Como siempre, Emaná es quien lleva el peso del equipo, tanto a las duras como en las maduras. Y la sorpresa en este litigio ha sido, sin duda alguna, la presencia como titular de Mehmet Aurelio, que además abrió la senda de los goles, aunque en situación ilegal. Pero el tanto se dio por válido y todo fue ya coser y cantar para un Betis que ha de dar una imagen más brillante, porque no rompe y rasga de forma definitiva.
Se coloca en puestos de ascenso el cuadro que prepara Tapia. Albricias. Y, a partir de aquí, ha de luchar para no perder más el compás del pase a la Primera División. El Betis de Lopera ha de coger el ritmo adecuado para amarrar ese ascenso tan esperado.
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