Desde que fue presentado el cartel de la Semana Santa 2009, realizado por el pintor Huget Pretel para el Consejo de Hermandades de Adolfo Arenas, no han faltado algunos pícaros recuadros literarios que, con una cierta guasa y entre intencionadas bromas, han pretendido caricaturizar los diversos motivos cofradieros dibujados por el artista.
Aunque mi manera de entender un cartel nada tiene que ver con la fórmula empleada por Huguet Pretel, tengo que manifestar que para nada han sido justas esas críticas, intencionadamente burlonas, contra la obra que anunciará la próxima Semana Santa sevillana.
Metiendo a más de la mitad de la Sevilla cofradiera en una especie de rebuscado cómic de la bulla procesional hispalense, a esos juglares de las letras solamente les ha faltado meter en esa masiva concurrencia a Roberto Alcázar y Pedrín, investigando la famosa y polémica Madrugá del pánico.
Observando el cartel de Huguet Pretel sobre la Semana Santa de Sevilla se nos viene a la memoria gráfica las obras de Miguel Ángel de la Capilla Sixtina. Tanto en la “Creación del mundo” como en el “Juicio Final”, por poner algunos ejemplos, el universal y polifacético artista italiano también metió, como Huguet Pretel en su “pregón de imágenes para el 2009”, bastante tela de bulla marinera.
Lo bueno de las bufonadas escritas es el pedazo de propaganda que le han hecho al cartelista. Eso es oro puro.
TRAJANO
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