Se disputó n el King Power Stadium el partido de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones entre el Leicester City y el Sevilla Fútbol Club. El encuentro finalizó con el resultado de dos a cero --2-0-- a favor del equipo local. Por tanto, como el total de la eliminatoria ha sido de 3-2 para el cuadro inglés, el equipo de Nervión quedó apeado del torneo y no pudo se pudo clasificar para jugar la siguiente ronda de este torneo europeo.
No le acompañó la fortuna el Sevilla en este
partido. Todo lo tuvo en contra a pesar de las oportunidades que tuvo para eliminar el
equipo de Craig Shakespeare. Aunque el Laicester se adelantó a los 27 minutos y
ya puso en franquicia la eliminatoria para los ingleses, los hombres de Sampaoli gozaron de
numerosas ocasiones para empatar y superar el resultado en contra. Con el 1-0
a favor del Laicester, Escudero mandó un balón al travesaño. Y aunque el cuadro inglés marcó el 2-0 en una contra
sorprendente, el Sevilla pudo marcar al menos un gol para poder jugar la prórroga.
Hubo un penalti a favor del Sevilla-- Vitolo fue derribado en el área inglesa--, pero NZonzi, que fue el encargado de lanzar la máxima pena, no pudo batir al
guardameta inglés. Además, el Sevilla, desde el minuto 73 jugó con un jugador
menos. El colegiado italiano mostró una segunda tarjeta amarilla a Nasri, que
fue provocando por Vardy, y se tuvo que ir a los vestuarios. También fue
expulsado el técnico del Sevilla, Sampaoli, en el 83 del partido. Todo estuvo muy en contra del Sevilla y a todo muy favor del Leicester, que terminó ganando esta
eliminatoria para pasar a los octavos de final de la liga de campeones.
UN ENCUENTRO PARA HACER HISTORIA
Recuerdo los primeros encuentros que
el Sevilla jugó en Europa en busca de la gloria deportiva. Fui testigo directo,
como enviado especial, de muchos partidos que ya forman parte de la pasada
historia del club de Nervión. Turquia, Grecia, Bulgaria, Portugal o Alemania
fueron puntos fundamentales de estos encuentros del club de Nervión en el
continente europeo. Viví grandes momentos como periodista y narré todo cuanto
ocurrió dentro y fuera de los terrenos de juego. En aquella época se
desplazaban muy pocos cronistas deportivos. Los informadores viajeros eran
habitualmente los recordados José Antonio Blázquez, de ABC de Sevilla, y Juan
Tribuna, de Radio Sevilla. Yo cubrí estos encuentros europeos para El Correo de
Andalucía, la Hoja del Lunes, y posteriormente para el diario ABC.
Viví importantes triunfos y
jubilosas celebraciones y también numerosas anécdotas en estos desplazamientos
a Europa. Aún conservo en mis retinas al capitán de la nave blanca, Antonio
Álvarez, imitando a “El Pali”, tras el triunfo logrado en Lesvik Spartak de
Sofía, o a los jugadores desplazándose desde el hotel al campo, ya vestidos con
las camisetas, calzonas y calzados con las botas, para saltar al terreno de
juego. El ambiente en la ciudad turca de Eskisehir estaba tan al rojo vivo que
existía el temor del posible robo de todo el material deportivo del Sevilla en
Estambul.
Ahora, ante el Leicester británico,
la historia es otra. El objetivo era pasar a los cuartos de final de la Liga de
Campeones como en aquella temporada 57-58, y estar, de momento, entre los ocho
mejores clubes de Europa. El compromiso era gordísimo. Sampaoli, que en las
vísperas de este choque celebraba sus 57 años de edad, solo estaba centrado en
la responsabilidad que tenía por delante. En la ida, en el Sánchez Pizjuán, el
resultado quedó muy ajustado. El Sevilla se presentó en el King Power con esa
corta ventaja del 2-1. Por tanto, la lucha se presentó muy frenética para poder
hacer historia pasando a la siguiente ronda. “Ser o no ser”, esta era la
cuestión. Y desgraciadamente para el equipo de Nervión, no pudo ser. Fue más
hábil el cuadro dirigido por Shakespeare, que supieron interpretar mejor todos
los papeles sobre el escenario del King Power Stadium.
SORPRENDE EL GOL DEL LEICESTER EN
EL PRIMER TIEMPO
Intensa primera parte el que
jugaron el Leicester y el Sevilla. Los hombres de Craig Shakespeare saltaron al
terreno de juego con todas sus armas ofensivas, dispuestos a marcar un gol que
les diera alas en esta eliminatoria de la Liga de Campeones. Sampaoli buscó de
salida un equipo con hombres que controlaran con temple y serenidad el juego y
llevar a cabo contragolpes letales.
A los 3 minutos fue Nasri quien
hizo sudar tinta al portero local. El balón lanzado por el jugador sevillista
lo tuvo que enviar a córner Schmeichel. Pero el cuadro inglés mantuvo un ritmo
trepidante, obligando al Sevilla a jugar con otra dinámica para poder cerrar
huecos y recuperar balones.
A los 18 minutos, Sergio Rico
acertó en desviar balón peligrosamente centrado por Morgan al área sevillista.
Pero hubo respuesta del cuadro de Nervión, y a los 21 minutos, fue Sarabia
quien remató un balón que estuvo a punto de sorprender al guardameta ingles.
Sin embargo, fue el Laicesiter el
primero en hacer diana. Hubo una falta
de Iborra a Vardy y el balón lanzado al área fue rematado en un barullo
monumental por Morgan, ante la dudosa salida de Sergio Rico, al fondo de la portería sevillista. El equipo de
Shakespeare se ponía con 1-0, igualando la eliminatorio y, de momento, ganando
este litigio para pasar a octavos por su gol marcado en la ida en Sevilla.
Reaccionó el cuadro de Sampaoli --no
había más remedio--, para cambiar el guión. Y los hombres de blanco apretaron
con todas sus fuerzas para poder llegar al área local y lograr la igualada. A
los 38 minutos, la primera oportunidad la tuvo Ben Yedder, pero el portero
británico despejó la pelota a córner.
Insistió el cuadro de Sampaoli en
sus acciones ofensivas, organizado el ataque y sembrando el pánico en el área
del Laicester. Pero el primer periodo acabó con esa ventaja de los británicos.
BALÓN A LA MADERA, EXPULSIONES Y
PENALTI FALLADO
Fue inexplicable lo que le ocurrió al
Sevilla en la segunda parte. Dominó más el juego y tuvo sus oportunidades para
marcar para darle un cambiazo al marcador que tenía en contra desde el minuto 27
del partido. Pero nada positivo sacó el equipo de Sampaoli de todas sus ventajas
ante el Leicester. El cuadro de Nervión afiló los dientes y montó un buen
tinglado para llegar al área inglesa y sorprender al guardameta Schmeichel.
Sufrió el cuadro local con todas las acciones ofensivas de un Sevilla que
mordía en busca del gol.
A los 52 minutos, Escudero, desde
lejos, al recibir un servicio de NZonzi, lanzó un balón envenenado que se estrelló en la madera. Pero el Laicester respondió. No se
había dormido en los laureles, y en el minuto 54 volvió a marcar para ponerse
con un 2-0, complicando de esta forma al conjunto sevillista. El autor del
tanto fue Albringhton, aprovechado el rechace de la defensa sevillista en una
contra local. Con este marcador, el Sevilla tenía que buscar un gol para forzar
la prórroga. Pero los rematadores en el cuadro blanco nunca estuvieron finos y
acertados a la hora de culminar las jugadas y las acciones dominantes. El
equipo de Sampaoli, con el 2-0 en contra, fue a por todas, dejándose la piel en
cada jugada, poniendo garra y poder en cada acción ofensiva. En el minuto 72,
Correa, que salió por Ben Yedder, estuvo a punto de marcar. Pero salvó el
guardameta inglés.
Luego ya vinieron los líos y la
gran ocasión perdida. El Sevilla se quedó con diez en el minuto 73. Nasri, que ya había sido amonestado en el primer tiempo, entró al trapo con Vardy y el
sevillista fue el más perjudicado, porque el colegiado le mostró la segunda
amarilla por su fricción con el delantero del equipo inglés, que solo vio
amarilla. El equipo de Sampaoli se quedó en inferioridad numérica en el campo. Aumentaban las
dificultades para poder seguir con los sueños. El Sevilla pudo marcar y forzar, al
menos la prórroga. El árbitro pitó un penalti a favor del cuadro blanco. Vitolo fue derribado en el área local. La
máxima pena fue ejecutada por NZonzi, pero el balón disparado desde los once
metros no fue bueno y paró Schmeichel.
El cuadro blanco perdía una gran ocasión poder ampliar el tiempo en esta vuelta de la
Liga de Campeones. Aunque el Sevilla no perdió la fe, todo fueron ya barreras insuperables.
El Leicester, volcado el cuadro blanco en ataque, pudo rematar la faena, porque
Vardy tuvo dos claras ocasiones de gol en dos peligrosas contras. Al final, hasta el técnico del Sevilla,
Sampaoli, tuvo coger el camino de los vestuarios. En el minuto 83, el colegiado expulsó al técnico blanco.
Y así acabó el partido. Con ese inexplicable
2-0 (3-2 en el total). El Sevilla, con sus errores en defensa, su falta de remate a puerta y el fallo de NZonzi en el penalti, gozó durante muchas fases del partido de numerosas ocasiones de tiempo y de forma para poder superar a los ingleses. Pero la Liga de Campeones, en estos octavos de fina, se acabó para el equipo de Nervión. Sin lugar a dudas, esta inesperada eliminación del torneo europeo ha sido una gran decepción para la parroquia sevillista.
FICHA TÉCNICA:
Sevilla FC: Sergio Rico; Mercado (Mariano, minuto 46), Pareja, Rami, Escudero; Nzonzi, Iborra; Sarabia (Jovetic, minuto 46), Nasri, Vitolo; y Ben Yedder (Correa, minuto 67).
Goles:
1-0, minuto, 27: Morgan, y 2-0, minuto, 54: Albrighton
Árbitro
Daniele Orsato (Italia). Mostró tarjetas amarillas a los jugadores del Sevilla Nasri (minuto 17); Vitolo (minuto 59), y a los jugadores ingleses, Vardy (minuto 73); Schmeichel (minuto 78); Ndidi (minuto 84); y Mahrez (minuto 84). Orsato expulsó a Nasri por doble amarilla en el minuto 73, y a Jorge Sampaoli, en el 83.
Incidencias:
Incidencias:
Se jugó en el King Power Sadium el partido de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones entre el Leicester City y el Sevilla Fútbol Club. Hubo más de 2.000 seguidores aficionados del club de Nervión en las gradas de estadio. (Fotos: UEFA).
FERNANDO GELÁN.-
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